Rey solitario ||RivaMika

♕Miedo♕

—papá, tranquilo, yo te libraré de aquí y escaparás, pero no vuelvas...

—¡No! ¡No te dejaré aquí sola hija, vuelves conmigo! —dice apretando con sus manos el fierro de la celda.

—no padre. Escaparé después de ti.

—que no, te lo prohíbo.

—¡Escucha papá! Ya intenté escapar y no pude porque alguien nos traicionó. El rey parece una sombra acechándome y la reina Kuchel ni hablar, está al pendiente de los pasos que doy. Es mejor que tu escapes y se vallan de la casa. —ordeno con voz firme—. Ya no es segura esa casa... Créeme papá.

—¿Irnos a otro casa...? Hija, nosotros hemos estado siempre en esa isla.

—lo se, pero es mejor. —la cara de mí papá era de preocupación. Sasha estaba vigilando por si alguien venía.

—esta bien. —dice suspirando—. Pero tu te vienes, ¿Eh?

—si papá, claro que escaparé —sonreí para darle tranquilidad. Miento, no sé si escaparé, todos parecen tenerme tanto odio que buscarán cualquier cosa para hundirme. Que bendita mi suerte...

—Mika, Mika —Sasha agarra mí brazo y nos escondemos dentro de un mueble de madera viejo que había en el lugar. Iba a hablar pero Sasha me puso la mano en la boca—. Shh.

Sentí unos pasos, y, como había un pequeño agujero vi a esa tal Annie acercándose a mí papá.

—hola bastardo —abre la celda y deja un plato con apenas y un trozo de pan. —ahí está tu comida.

El hombre se acerca al plato y se come este trozo de pan. Annie sonríe y lo patea haciendo que caiga de espaldas.

"¡Que hija de puta!"

Pensé mientras tenía esas ganas de moler a esa tipa a golpes. Sasha al ver mí reacción me calmó. Teníamos que hacer mucho silencio ya que el lugar estaba vacío, y cualquier ruido que hagamos, pondrá en alerta a Annie.

—mira viejo, no puedes morir, la reina te necesita con vida, ¿Entendiste? —habla de manera fría—. Te presentaremos ante tu hijita querida y así te haremos sufrir y a ella también.

"Malditos... ¿Por qué? Yo nos le hice nada"

Quisiera que esto fuera solo una pesadilla y que al despertar me encuentre con mamá y petra a mí lado. Mí papá llegando de su trabajo y todos felices y sin problemas.

Pero no.

Estoy en una maldita realidad, dónde mí vida y la vida de mí papá corren peligro. Una realidad dónde ya no puedo ser feliz.

Todo se arruinó tan rápido...
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Tuvimos que salir de las celdas, estar ahí ya era demasiado peligroso, podía bajar en cualquier momento la reina y esa víbora se entera de todo.

No podía comer, no tenía hambre. Acercaba un trozo de comida y me venían ganas de vomitar y no, no quiero vomitar, que asco. Ahora solo pensaba en papá y en como sacarlo de ese lugar.

"Pídele ayuda a Levi"

Abrí mis ojos en sorpresa, claro, no se me había ocurrido... ¿Podrá el ayudarme a liberar a mí padre?

"Pero seguro querrá algo a cambio"

No me importa, haré todo por mí papá.

Me levanté e iba a salir del harén pero una mano me detuvo.

—¿A dónde vas?

rodé los ojos con fastidio y bufé molesta.

—mira Nanaba, lo que yo haga no te incumbe. Métete en tus propios asuntos y déjame en paz ¿Quieres? —dije tratando de irme pero esta solo me agarraba más fuerte del brazo.