𝗣 𝗜 𝗥 𝗢 𝗣 𝗢 𝗦▕ Tᴏᴅᴏʙᴀᴋᴜ

72

–¡Dame el puto pau-pau!–. Dijo la pelirosa.

–¡Noo!, Es mío–. Denki le saco la lengua.

Mina quería ese último pau-pau, y que Denki se lo fuera ganado, no... Con los ojos lagrimosos volteo a dónde estaba Katsuki.

–¡Me quito mi pau-pau!–. Señaló a Denki, quien lo estaba tomando.

Katsuki solo los miro, suspiro escondiendo su rostro en el pecho de Shoto. Odiaba que lo tratarán como una madre. Queriendo que el solucionará sus problemas, pequeños, por ejemplo, como este.

Shoto sonrió abrazándolo.

–Iré yo–. Beso sus cabellos y se levantó–. Ashido, vamos–. Señaló.

La pelirosa asintió, levantándose dando un pequeño saltillo.

Cuando salieron, Hanta solo se les quedó viendo a los demás.

–Oigan...¿Nunca pensaron que...Shoto y Katsuki parecen padres de unos pequeños, osea ustedes?–. Se cruzó de brazos.

–Corrección mi querido amigo, nosotros. Nosotros cuatro somos los bebés de estos dos–. El rubio señaló a Katsuki, quien les daba la espalda abrazando una almohada.

–Es vergonzoso aceptarlo...pero si–. Dijo Eijiro.

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–¿Feliz?–. Preguntó Shoto a la chica.

Ashido asintió tomando un sorbo a su jugo.

–Bien...–. dirigió su vista a la bolsa en sus manos.

Shoto la llevo a la tienda, obviamente con el permiso de los profesores, a comprar su pau-pau.

Aprovechando también para comprar algunas cosas para Katsuki.

Ambos iban regreso a la habitación del rubio. Mina abrió la puerta, mostrando el pau-pau a Denki, quien solo alzó los brazos y termino de beber el suyo.

–¿Y Katsuki?–. Preguntó Shoto dejando la bolsa en la cama.

–Sus padres lo llamaron. Dijo que no fueras–. Contestó Eijiro mirando la televisión.

–Oh...–. bajo su mirada–. Estaré en mi habitación por cualquier cosa–. Dijo a los chicos dirigiéndose a la puerta–. Por cierto, no toquen esa bolsa–. Sonrió saliendo de ahí.

–¡Que no la toques!–. Dijo Sero a Eijiro, quien había estirado su brazo.

–¡Solo quiero ver qué es!–. Contestó sobando su mano.

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Shoto estaba en la azotea mirando el atardecer. Suspiró bajando su vista a su celular, mirando el visto que Katsuki había dejado en ellos.

–Cuando estás... se me hace agua la boca–. Sonrió–. Pero, cuando no estás... se me hacen agua los ojos–. soltó una pequeña risa.

Después de unos pocos minutos Katsuki contestó.

"No seas ridículo. Voy de regreso, a tu habitación...e-espero que los hayas comprado". No pudo verlo, pero con solo escuchar su voz, sabía que su rostro estaba totalmente colorado.

–Los compré... pero están en tu habitación–. Contestó.

"¿Osea que no solo pareces, si no que, también eres estúpido?... Ve ahora mismo. Esos imbéciles no conocen la privacidad".

Shoto se quedó unos momentos, para después mandar el siguiente audio.

–Son buenos chicos. Dudo que fueran a hacer algo... así.

"Ve ahora mismo, Todoroki Shoto".

Bueno, a dicho su nombre completo. Será mejor ir.

Guardo su celular dispuesto a ir abajo nuevamente por aquella bolsa.

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–¿La puedo abrir?.

–¡Que no!–. Golpeo su cabeza.

–¿Por qué tanta insistencia en que no se habrá?. ¿Que tiene?. ¿Condones?–. Sonrió.

Los tres dirigieron su vista al pelirrojo, para después mirar la bolsa.

–Mejor deja la bolsa.

–Si.

Al soltar la bolsa la puerta se abrió, viendo a Shoto ingresar a la habitación.

Eijiro sintió que su corazón se salía. Solo esperaba que no lo haya visto colocando la bolsa en cama nuevamente.

–Hola de nuevo. Vengo por la bolsa–. Dijo acercandose a los chicos para tomar la bolsa de la cama–. Por cierto, ustedes pueden quedarse aquí, Katsuki a dado su permiso–. Sonrió saliendo nuevamente de la habitación.

Los chicos se miraron mutuamente.

–Mínimo debiste revisar la talla.

–¡Privacidad, Ashido!–. Regañó el azabache.

La chica se cruzó de brazos inflando sus mejillas.