D O C E

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(G)I-DLE - Dahlia

"Mi amor es Dahlia
Nuestro amor es Dahlia"

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—¿Qué tal si cómo entrante ponemos una crema de queso? —preguntó YoonGi a la peligris, la cual no tenía idea de que pedir

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—¿Qué tal si cómo entrante ponemos una crema de queso? —preguntó YoonGi a la peligris, la cual no tenía idea de que pedir.

—Me gustaría —observó a su guardaespaldas que justamente estaba detrás de su prometido probando uno de los platos que había sobre la larga mesa llena de propuestas para el banquete—, una ensalada de camarones —, soltó y el rubio al escucharlo se alejó de los platos sorprendido, claramente sabía que no tenía derecho a probar nada, pero aún así lo hizo a escondidas.

YoonGi se cruzó de brazos y fue a ver el plato que sugirió su prometida. No le gustaba para nada la idea, pero para una vez que sugería uno de los platos se sintió cómodo.

—Entonces —el pelinegro se dirigió a la organizadora de la ceremonia poniendo sus manos en los bolsillos de su pantalón—, tendremos para el entrante una ensalada de camarones, para el plato fuerte pollo asado ,para el postre un cake y en el caso de las bebidas quisiera una barra abierta si es posible.

La organizadora apuntó cada una de las cosas en su tableta y por último sonrió —¿La novia desea algo más?

Soyeon negó con la cabeza y alisando sus largos cabellos grises salió del salón seguida por su guardaespaldas.

—¿A donde vas ? —preguntó YoonGi agarrándola de la muñeca, ambos estaban en el estacionamiento.

—A mi casa —dijo a secas—, ¿Podrías llevarme?

—Me gustaría tener una cita contigo antes de eso —Mojó sus labios con su lengua— ¿Y si comemos juntos?

Soyeon dirigió su vista al suelo y jugó con una piedra que estaba entre sus pies. —Está bien —él besó su mejilla en respuesta—. Estás hermosa hoy.

Ella se sonrojó ante el alago y luego aún más cuando le abrió la puerta del auto como todo un caballero.

Dentro del coche se acomodó en el asiento delantero y sé puso el cinturón de seguridad, su compañero tenía las manos al volante y la vista al frente, pero eso no lo detuvo para dedicarle unas cuantas sonrisas a la que estaba a su lado.

En el asiento trasero estaba Chan, observaba cada movimiento de la pareja frente a sus ojos y por un minuto sintió celos por ellos, pero luego se le pasó, pues recordó algo de su pasado; algo que para él es la razón de su condición actual.

—¿El guardaespaldas no tiene coche? —preguntó YoonGi mirándolo por el retrovisor.

—No sabe conducir —declaró Soyeon mirando la vista gracias a la ventana.

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