-Kami-Sama...Quiero ser más fuerte-Expresó Bell su deseo hacia su diosa, antes de caer desmayado.
Aquellas palabras comenzaron a hacer notar la seriedad con la que ese chico deseaba alcanzar su sueño, no eran palabras vacías, no era una ilusión, la decisión, la voluntad y la determinación que emanaban de él eran lo suficientemente fuerte para creer en Bell.
-Bien, Bell, haré todo lo que esté en mis manos para que cumplas tu sueño, al fin y al cabo, eres el primer miembro de mi familia ¿Qué clase de diosa sería si no te apoyara?-Respondió Hestia con una sonrisa amable mientras llevaba a su hijo a donde la farmacia azul se encontraba, al observar de mejor manera el estado físico de Bell, pudo concluir que no era tan grave como se veía a simple vista.
Farmacia azul, sede de la familia Miach.
-Oigan, entiendo que sea un aventurero pero no creo que sea normal llegar herido de esa manera dos días al hilo, creo que debe controlarse-Decía Naaza mientras traía algunas pociones para el chico peliblanco que se encontraba recostado.
-Ya Naaza, sabes como son los jóvenes aventureros, siempre se meten en muchos problemas por su entusiasmo, me alegra saber que no pasó a mayores-Contestó el dios de la familia cuando tomaba la poción y la vertía en las heridas de Bell.
-¿Se encuentra bien? ¿No requerirá algún tratamiento extra?-Preguntó Hestia con preocupación hacia su amigo Miach.
-Lo dudo, para haber pasado casi 12 horas seguidas en el calabozo se encuentra muy bien, me pregunto hasta qué piso llegó-Respondió Miach sin perder de vista como las heridas de Bell comenzaban a cerrar poco a poco por el efecto de la poción.
-Es un alivio... no es como si tuviéramos los fondos necesarios para pagar un tratamiento mayor-Dijo Hestia de una manera calmada.
-Listo, con esto debería ser suficiente, solo debe reposar, pienso que sería recomendable para Bell no ir al calabozo hoy, creo que tuvo suficientes aventuras en estos dos días-Dijo Naaza como recomendación.
En ese tiempo de descanso para el agotado aventurero, su mente no dejaba de repetir y resonar aquellas palabras oídas en el bar la noche anterior, el enojo que provenían de ellas, era simple y llanamente porque en el fondo sentía que tenían razón, desde joven ha sido un cobarde, como en aquella ocasión que tuvo miedo de un goblin y su abuelo tuvo que salvarlo de una muerte segura.
"Un Goblin... tuve miedo de un goblin... soy patético" dijo Bell en su subconsciente.
"Pero, no más, no me permitiré seguir así, no voy a dejar que los demás decidan en qué puedo o no puedo convertirme, seré el mayor héroe que el mundo haya visto, seré más fuerte que nadie, protegeré a todos los que me rodeen, a todos lo que me importen, no perderé a nadie, no como con mi abuelo, no como con mis padres, no como... mi madrastra Alfia y el tío Zard..., se esforzaron en entrenarme desde que era joven, aún recuerdo toda la dedicación que pusieron en cuidarme, lo felices que éramos todos juntos pero, de un día para otro, ambos se fueron y un tiempo después los siguió mi abuelo, no soy tan incrédulo para pensar que siguen vivos, mi corazón quisiera creer que existe la posibilidad pero ya han pasado varios años desde eso y es imposible que eso sea verdad" agregó Bell internamente mientras que, en el mundo real, unas pequeñas lágrimas se deslizaban delicadamente por sus mejillas, provenientes de los ojos cerrados del chico.
-Bell...-Dijo Hestia al ver tal escena, no era posible saber qué era lo que soñaba pero no se necesitaba ser un genio para comprender que no era una imagen agradable lo que pasaba por su mente.
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¿Está mal enamorarse de un aventurero?
Fiksi PenggemarLa historia comienza desde que Bell llega a Orario, conociendo a la bella semi-elfo Eina Tulle, los sucesos que se desencadenarán desde aquel momento, no se los esperaban ni ella ni el propio Bell. ¿Lograrán romper ese dicho de "No debes relacionart...