21. La charla.

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Diría la verdad.

Aún faltaban unos días para que Lucy trajera todo lo necesario para lograr exorcizar a Luna y sacarle del cuerpo de Lemy, siendo eso algo que lo consolaba cuando un día pasaba.

Pero honestamente no estaba seguro de cuanto más podría aguantar, no negaría que al ver lo que Luna le ha hecho a cuerpo de su hijo no le ha causado ninguna reacción, si lo negara estaría mintiendo mucho, mucho si era honesto. Le provocaban mayoritariamente sentimientos nostálgicos, esa época a la que ya nunca se podrá regresar y que probablemente debió tenerla más cariño, pues, de haber sido más considerado.. o atento, puede que nada de esto estuviera pasando y Luna estaría en paz.

Aunque por supuesto, no valía la pena lamentarse, lo hecho, hecho estaba, y aún si pudiera arreglarlo todo en un instante, no se sentiría bien con ello, así que debía esforzarse por el bien de todos.

En especial.. el de Lemy.

Habitación de Lemy










Ya era usual.

Los pocos días que llevaba así eran, pues cada vez que se despertaba, en el espejo estaba la imagen de su hijo, que siempre reclamaba a gritos que le regresara su cuerpo.

Algo que no haría en definitiva, porque puede que le tome todo lo que este recipiente tenga de vida, pero jamás se iría.. sin no ver a ese albino traicionero sufrir como se lo merecía, perdón ya nunca habría perdón, eso era para los débiles. Su objetivo era simple, pero iba mucho más allá del perdón, eso ya no existía en las cosas que cree.. ahora sólo cree en la venganza y en cómo en esta encontrará La Paz que nunca pudo obtener porque Lincoln se lo impidió, porque en efecto, si aún estaba en este plano, eso era culpa de Lincoln.. ¿De quién más si no?

Y aunque quizá no se suponía que viera aquello que vió, lo había visto que era lo importante.. y lo que la motivaba a seguir con su plan.

- Repasemos.. —Decía mirándose al espejo, viendo en el reflejo a Lemy que seguía luchando por salir— iremos con Lincoln.. haré que me toque indebidamente y por supuesto.. conseguiré que lo haga conmigo.. de esta manera.. nunca podrá vivir en paz al saber lo que hizo.. y se arrepentirá por todo el daño que me causó..

Lemy no podía decir mucho al respecto, estaba encerrado después de todo, pero debía hacer algo.. lo que sea.. no quería que su padre y.. bueno, en síntesis su cuerpo hicieran aquello.. que.. si sabía de lo que hablaba, si fue a la escuela desde luego. Además.. quería ayudar a su padre, aunque no fuera culpa de él que está fantasma estuviera atormentándolos, se sentía responsable debido a que.. pudo habérselo contado a su padre, y de esa forma.. que él consiguiera algo para protegerlo a él.. y a su hermana, sin olvidarse de su padre, poco podía hacer honestamente, pero lo poco o casi nada que hiciera, debía ser para ayudar a su padre a sacar a este espectro de su cuerpo.

Seguía sin saber de la verdadera identidad de la fantasma que lo atormentaba y lo estaba poseyendo, no le sería útil, pero al menos podría improvisar insultos que la desconcentrasen y pudiera tomar el control.

Todo quedaba en manos de su padre y hermana.. y con suerte, de su tía Lucy también.

Sala










Era obvio.

Desde hace un par de días que Luna está en el cuerpo de su hijo, y aunque Lucy le dijo que esperara, y que tratara a Luna con el pasado, simplemente no puede.

Más allá de lo visible.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora