9. De vuelta al juego.

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Resultaba extraño.

Ver esta batalla de miradas de su tía Lucy con lo que sea que estuviera en su cuerpo también resultaba algo interesante, más porque con la intensidad que se miraban era como si fueran rivales que no se ven desde hace mucho tiempo, como si tuvieran un último duelo pendiente que debía ser atendido, no sabía cuál sería el resultado de esto.

Pero si su plan salía bien, su tía se encargaría de hacer que pudiera volver a estar vivo.

- Luna.. solo conseguirás que te lastime a ti o a tu hijo..—Metía discretamente una de sus manos en su bolso, tenía algo que quizá pudiera ayudarle, algo que nunca esperó usar, y que tenían que haber ciertos requisitos para su uso.

- ¿Y que me harás, eh?, por lo poco que sé, tienes casi abandonada esa vida de las cosas paranormales desde hace mucho.. porque no querías que la idiota de tu hija usara ese conocimiento para el mal, —Reía— supongo que al final te terminó siendo inútil..

Luna reía al ver lo patética que se había vuelto su hermana menor, tantos años aprendiendo de esas cosas inútiles para que después de todo ya no pudiera defenderse ni de espíritus tan débiles como ella. Porque lo sabía, aún cuando sus habilidades están creciendo, su estancia en el cuerpo de Lemy hace que ese proceso sea más lento, cosa que no le importaba mientras tuviera su venganza podría al fin descansar en paz.

Se acercaba a ella a paso lento, la fuerza que posee actualmente es poca pero debería ser suficiente para combatir a su hermanita menor.

- ¡Este será tu fin!—Dijo Luna mientras aumentaba la velocidad al acercarse, deteniéndose en un segundo al sentir algo en su frente— ¿Que demonios es es-...

- Abandona este cuerpo.. ¡espíritu del mal!—Mencionó Lucy para luego mencionar otro par de cosas, cosas inteligibles, al menos para Lemy(Luna).





- ¿Tía está todo bien..?—Decía una Lyra que venía con el té que se había ofrecido a traerle, observando de paso como su hermano estaba en el suelo— ¿Que le pasó a Lemy?, ¿Le dió un infarto?, ¿Su corazón falló?

Empezó a serle difícil respirar adecuadamente hasta que su tía la tomó del hombro, obvio estaba asustada de ver a su hermano en el suelo, conoce lo sensibles que son ambos por ser hijos de hermanos, así que no le sorprendía que había la probabilidad de que algo le hubiera afectado a Lemy mientras no estaba, normalmente ignorándolo, pero en cuestiones médicas, es donde no dudaba en actuar.

- El se encuentra bien.. gracias por el té, deberías traer un vaso de agua para tu hermano, yo cuidaré de él, no te preocupes, ya verás que estará bien dentro de poco.—Dijo a su sobrina mientras veía cómo esta se calmaba, viéndola ir sin decir mucho por el vaso de agua que pidió.

Suspiró, tanto como en acción como en su distintiva frase, usar un método religioso(católico,Cristiano, ósea, Jesús) iba en contra a todo lo que ha jurado hacer y respetar de las artes oscuras, pero no quedaba de otra, mientras observaba el cuerpo sin alma de su sobrino, observó unos momentos el techo de la casa diciendo las siguientes palabras.

- Lemy, si estás por ahí, ya puedes volver, pero debes hacerlo rápido, tu cuerpo no estará protegido por mucho tiempo por esa frase..—Decía mientras a su alrededor sentía una leve brisa, era su sobrino, que estaba regresando a donde pertenece.

-...—Tomó una gran bocanada de aire mientras el brillo y color de sus ojos volvía— ¡Ahhh.!, t-tia Lucy.. gracias por ayudarme..

- No es nada sobrino.—Dejó de apoyarlo en sus piernas, haciendo que este golpeara su cabeza en el suelo— admito que debí ver esto venir, aunque nunca quise comentarlo por miedo de que pudiera decirse algo..

Más allá de lo visible.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora