𝕺𝖓𝖊-𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 [Pedidos Cerrados]

✺ Soporte [Itadori Yuuji]

Anime: Jujutsu Kaisen.

Es un poco corto.

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Noches como aquellas las extrañaría. Sin necesidad de decir palabra alguna, el sonido de los grillos cantando acompañados por el suave viento nocturno y las estrellas sobre ellos como pequeñas partículas que iluminaban a una gran distancia, de infinidad de formas y tamaños. Su cabeza en el hombro de su novia, sus brazos a cada lado de su cintura mientras respiraba pacíficamente, como pocas veces podía hacer por culpa de las maldiciones que se aparecían para arruinar su tiempo de calidad como pareja. Las manos de la chica en posiciones estratégicas para volver de aquel momento, una anécdota memorable. Sus dedos acariciando su rosado cabello mientras murmuraba las letra de alguna canción tan suave como esperanzadora.

Para él, que se quedó sin nada, su único comfort era su querida (T/N).

Las luces lejanas de la ciudad no se asemejaban con los fuegos artificiales que Megumi, Nobara además del profesor Gojou lanzaban entre risas (por parte de Gojou y Nobara, pues Megumi tan sólo los encendía) para celebrar el año nuevo. Tras un largo proceso de permisos, peleas, desacuerdos y papeleo habían logrado obtener el permiso para tener un día fuera y acampar, con la única condición que de reportarse un incidente, abandonarían todo para acudir.
Pero eso era lo que menos quería pensar en ese momento. Lo único que importaba en esos momentos eran las caricias de (T/N) para reconfortarlo, para asegurarle que no tenía porqué temer del futuro, para recordarle que ya no estaba solo.

Se conocieron en un mal momento. Megumi estaba inconsciente, Kugisaki se encontraba herida pero peleando con una maldición hasta el cansancio, mientras que él estaba teniendo problemas con otro par más, sin mencionar que al estar en una zona poblada era un poco complicado ya que tenían que asegurarse de no provocar daños a pasantes o personas en general, y esas mismas personas no parecían querer cooperar ya que los que podían verles, entraban en pánico tras ver la escena. Desafortunadamente Gojou no podría respaldarlos ya que se encontraba fuera (como en otras ocasiones), además de que no estaban tan cerca de sitios dónde pudieran conseguir cualquier tipo de ventaja.

Pero para su suerte, el mensaje que Megumi había intentado enviar lo recibió alguien. Ahí fue cuando ella apareció cubierta hasta la cabeza con el uniforme, con nada más que aguja e hilos. Lo que sucedió después apenas había tenido tiempo de reaccionar. Derribó la maldición con la que la otra chica peleaba con un ágil movimiento de dedos mientras hacía formas apenas visibles con el hilo que rebosaba de energía maldita. Aquella cosa cayó al piso hecha pedazo, y con un destello breve el otro par hizo lo mismo, con sonidos agonizantes antes de morir casi al instante. No tuvo mucho tiempo de conversar con ella ya que se dedicó a auxiliar a Fushiguro mientras que su suave voz conversaba con Nobara de un tópico que no podía escuchar; al parecer ella era una hechicera de rango superior, no venía de ninguna familia como tal pero fue acogida por la escuela tras ciertos sucesos en su vida de los que prefería no hablar. Al parecer era como él, aunque un año mayor. En ese momento no pudo hacer más que agradecerle avergonzado de su poca capacidad para evaluar la situación, sus compañeros terminaron bastante heridos mientras que por su cuenta no había podido eliminar siquiera una maldición (aunque eso le alegraba, pues la tras la traumática experiencia con Mahito prefería no tocar el tema).
Con el tiempo se volvieron cercanos, si bien no pertenecía a los discípulos de Gojou, era común que se encontraran en la escuela, misiones entre otros lugares, y como era de esperarse, terminó enamorándose de ella, pues tenían muchas cosas en común, se complementaban añadiendo que sentía comodidad en exceso cuando charlaba con ella. Sabía que podía confiarle su vida ciegamente y ella haría lo posible para mantenerla estable, ignorando por completo el hecho de que contenía al Rey de las Maldiciones en su cuerpo. Lo trataba como Itadori Yuuji, y no como El recipiente de Sukuna. (TN) estaba con él a pesar de todo lo que le contó, y le permitía hacer memorias para que el día en que decidieran ejecutarlo no tuviera arrepentimientos más que el hecho de tener que dejarla. Ella era su soporte, y hasta ese momento, no sabría qué hacer si algo le pasara. Pero por ahora, no podía hacer nada más que disfrutar de los pequeños momentos compartidos que casualmente tenían cada que podían.

- ¿Pasa algo, Itadori?

La voz de la chica lo regresó a la actualidad, dispersando sus pensamientos. Él le sonrío para eliminar la preocupación de que deambulaban en sus bonitos ojos (c/o), dejando de encorvarse y abandonando su hombro para dejar un beso sobre su frente, aferrándola a su cuerpo unos momentos más, atesorando su calor corporal como ninguna otra cosa.

- Mientras te tenga aquí conmigo, nada me pasa.