𝕺𝖓𝖊-𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 [Pedidos Cerrados]

✦ Guren Ichinose

Pedido por: AlissCortes

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Las botas negras de ____ emitieron un suave golpe al impactar con otra silla, mientras estiraba sus brazos. Estaba agotada, tras los hechos de algunas horas atrás. Los orbes violetas la miraron alzando una ceja, con cucharilla en mano, tras haber comido un trozo de postre.

- ¿Fue demasiado para tí?

Le sonrió a medias de forma burlona, recibiendo una mirada de irritación por parte de _____. Le sacó la lengua en un gesto infantil, y Guren rodó los ojos en respuesta, volviendo a tomar un trozo de fruta con la cucharilla.

- No te veo quejarte de mi apoyo. ¡Casi lo hice todo yo!

- Si no das lo mejor de tí siempre, no llegarás a ningún lado.

La boca de su acompañante se volvió una mueca quejumbrosa, mientras sus ojos [c/o] se fijaban a los de él, quien alzaba una ceja de manera retórica para que le respondiera. Sabía que el apreciaba el esfuerzo de sus compañeros y el trabajo en equipo, pero esa última misión había carecido del último elemento en mayoría, sobrecargando a ____, que solo quería descansar, y si era posible, dormir un poco. Los cabellos [c/p] le caían al rostro.

- Si, bueno, necesito energías, gracias por preguntar.

Respondió en tono sarcástico, solo para después soltar una risa corta junto a Ichinose. Su relación era bastante buena desde que ____ finalmente llevaba el característico uniforme que caracterizaba a los pertenecientes al escuadrón. Eso la incluía a la familia.
Esbozó una sonrisa, arrebatándole una frutilla [fresa] del platillo a su compañero, con su expresión alegre de siempre. Se miraron el uno al otro en silencio por un rato, como si cada segundo en el que mantenían la mirada hablaran por alguna extraña clase de telepatía. Nuevamente, las hebras [c/p] se movieron al llevarse el postre a los labios y comerlo, sin despegar la mirada de aquél joven.

- Eres un poste.

Repentinamente comentó. Y pues, no había como negarlo, pues tan solo unos cuantos centímetros lo separaban de los metros, por lo que era de esperarse que, hombro a hombro, se notara claramente la diferencia de altura entre los dos.

- ¿Perdón? Yo no soy un poste, al contrario, no es mi culpa que tú seas una pulga. - Rió con burla.

- ¿¡Haaah!? ¡Ichinose, no soy una pulga! ¡Maldito poste con patas!

Gruñó, bajando los pies de la silla al norte de su cuerpo y poniéndose de pie al tanto, casi abalanzándose sobre el hombre, tomándolo por los hombros y sacudiéndolo, antes de que, por obvios motivos, la silla se echara hacia atrás y terminaran uno sobre el otro en el suelo.
Tras recuperarse de la contusión momentánea, sacudieron la cabeza. Ninguno dijo nada, y por su parte _____ desvío la mirada con un leve rubor, haciendo que Guren sonriera. Era una situación bastante comprometedora.

- ¿Es cómodo?

- ¿A-ah?

Éste le dedicó una mirada sugerente, de manera burlona, refiriéndose a si le era cómodo el estar técnicamente recostándose sobre él. Inmediatamente se apartó a tropezones, sacudiéndose el uniforme azul marino y extendiéndole la mano.

- Supongo que sí.

- Cállate. - Rió. Pronto su superior le tomó la mano para ayudarle a pararse, mirándole con vagancia.

- Si tanto es tu cansancio, podemos ir a dormir un rato. ¿Quién sabe? Tal vez puedas volver a usar mi pecho como almohada.

Bromeó, como respuesta obtuvo una risa cortada y una negación. Comenzaron a caminar por los pasillos, con el de hebras [c/c] más falto de energías que nada, siendo sus pasos lentos y adormilados.

- ¿Y si mejor me cargas?

- ¿Tengo cara de mozo?

- Podría ser...

Volvió a reír. Sin siquiera darle respuesta, tomó vuelo y se trepó en la espalda del más alto, riendo.

- ¡Arre, caballo, arre!