𝕺𝖓𝖊-𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 [Pedidos Cerrados]

✦ Deidara

Pedido por: @_Und3rf3llFrisk

Las hojas caían a cada salto ente las ramas. Los ojos de la chica amenazando con llenarse de lágrimas a cada paso, mientras su pecho subía y bajaba.

Deidara de Akatsuki había vuelto.

No. Eso no era posible. La última vez que lo había visto fue en el día que se unió a Akatsuki, abandonando la aldea. Pero sabía que Deidara había muerto por los rumores que rápidamente se extendieron. Estaba muerto. Se negaba a creer que volvería a ver los cabellos rubios sobre uno de los ojos del chico, mientras manejaba la arcilla. Tampoco quería admitir que seguía estando atraída por el, y quería abrazarlo una vez más.

Avanzaba rápido entre los árboles de aquella isla, había escuchado tantas cosas que no sabía en qué creer. Pero la mirada de preocupación del Junnin cuando entró a los entrenamientos gritando a todo pulmón: "¡Onoki, están aquí! ¡Deidara está vivo!" Se alarmó. Tan pronto Onoki, Kurotsuchi y Akatsuchi salieron, ____ les siguió. El deseo de ver a su mejor amigo una vez más era más fuerte que su voluntad, tal vez si aquello era cierto, podría decirle lo que nunca antes se atrevió. Podría confesar sus profundos sentimiento hacia él.

Entonces, noto un movimiento extraño en la isla tortuga, siendo que bajo del árbol y miró hacia el océano: nada anormal. Sus ojos fueron a dar en el cielo, por un momento, no divisó absolutamente nada. Poco después, notó como un gran ave blanca descendía a una distancia considerable. Y ahí le vió, el cabello rubio, cubriendo uno de sus ojos, una expresión seria, más sin embargo, había algo extraño en él. Su ojo descubierto tenía un color negros, mientras que su iris era de un color gris, ¿Qué significaba eso? ¿Dónde había leído acerca de ello?.
La respuesta llegó a ella como un balde de agua fría: Transmigración. Aquella técnica poderosamente prohibida para cualquier tipo de práctica; el ave ya había descendido lo suficiente como para poder apreciar de cerca la sorpresa de la chica. No había palabras, ni saludos absolutamente nada, solo una mirada mutua entre ambos, que decía sus intenciones, pero a la vez callaba sentimientos profundos. Aún estaba estática sin entender, ahí fue cuando divisó una figura detrás del rubio, ajeno a el, también masculina. El desconocido había mascullado algo al oído del otro, quien asintió y de un salto cayó frente a la peli____.

- ____, cuanto tiempo.

- ¿D-dei-chan?... ¡N-no puede ser!

Retrocedió, no quería creerlo, y se negaba rotundamente a aceptar que el amor de su infancia y parte de su adolescencia está a parado ahí, frente a ella y no había muerto.

- Mira, no tengo tanto tiempo, tengo que hacer las cosas explotar, ¿Entiendes? El viejo no pudo entender mi manera de hacer arte per-

- ¡Calla! ¿¡Por qué no me lo dijiste!? ¡Dime, Deidara! Estuve meses... ¡Años esperando por tí, verte de nuevo entrar a la aldea!. Me asusté, me sentí muy triste cuando supe que habías muerto, pero, ¡No deberías estar aquí! ¡NI SIQUIERA SE SI ERES REAL O UNA ALUCINACIÓN!

El silencio volvió, por lo que el viento era lo único que irrumpia. El Rubio se aproximó algunos pasos más a la chica, quien temerosa se mantenía cual estatua, el río levemente.

- Mira, yo, lo siento o lo que sea. Me gustaría hablar contigo, con más tiempo, pero, Kabuto me está esperando, ¡Y no salí del escombro para nada! Si no regreso, seguro la serpiente me muerde... Entiendo que estés confundida, por qué yo también lo estuve cuando reaparecí, pero no es nada simple.

- Dei-chan...

- Se me acaba el tiempo, idiota. ¡TENGO QUE MATAR AL TEME DE SASUKE!, Prometieron ayudarme, así que me voy.

- ¿Quiénes...?

Deidara frunció el ceño, el control que ejercía Kabuto como aprendiz de Orochimaru era doloroso, controlaba sus impulsos y acciones, por lo que no dijo nada. El breve espacio entre ellos se cortó un breve abrazo y un beso en la frente, solo entonces, él se retiró, dejando a una más que confundida ____. Apenas y había podido murmurar:

»Por favor... Cuídate, Dei-chan «

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N/A: ¡Lamento haber tardado tanto tiempo! Estaba bloqueada profundamente, me vicié con algunas cosas y los estudios. ¡Feliz año, y muchas gracias por apoyar el libro!.