Y ASÍ SERÁ- Flor y Fede el final que se meritaban

Capitulo 13: Encuentros y Desencuentros

Un nuevo día llegó a la casa de los Frizenwalden y toda la familia estaba en la cocina desayunando.
"¡Dámelo es mío! ¡Pon menos o lo terminarás!"
"¡Qué tacaño sos! ¡Déjame estar nano!"
"¡Chicos, basta de discutir!", dijo Flor a Tomas y Roberta que estaban peleando por la mermelada para la tostada, mientras Federico la miraba raro.
"¿Le pasa algo al señor Federico?" preguntó Flor, moviéndose el mechón y mirando si estaba sucia o tenía algo que no estaba bien, dado que Federico no dejaba de mirarla así raro; Evidentemente aún estaba muy alterado desde el día anterior.
"¡Sí vos!" respondió Delfina abrazando a Federico desde atrás.
"¡Detente!" dijo él para defender a Flor que se alejó nerviosa para evitar un enfrentamiento con la bruja, que estaba muy satisfecha comiéndose su brioche.
"¡Floricienta tener visita!" dijo Greta al llegar a la cocina.
"¿Para mí?" preguntó Flor estúpida.
"¿Pero quién es este maleducado que viene a molestarla a esta hora de la mañana?" dijo el Freezer que se puso nervioso, mientras Flor sonreía, al fin y al cabo, también la animaba un poco ver a Federico celoso, le daba satisfacción.
"¡Seguramente será Maximo que se la quiere levar con él!" dijo Delfina tratando de provocar a Flor, pero esta vez la chica  no cayó en su trampa y sonriendo le dijo:
"Si probablemente.....¡con su permiso voy a ver qué quiere mi tesoro!"
Delfina se sintió mal aunque traté de no hacerlo ver y le lanzó su mirada de bruja, mientras que Federico saltó de la silla tan pronto como escuchó las palabras de la chica.
"¿Federico a dónde vas?" gritó Delfina cuando vio a Federico alejarse mientras los chicos se reían.
"Er....no.. no...de ninguna parte..." dijo el Freezer volviendo a sentarse acerca a la bruja.
Franco lo miró mal, quería que su hermano se despertara y animaba un poco, que reaccionara y escuchara más su corazón y no continuar a estar detrás de esas brujas.
"¿Qué pasa Franco? ¿Te ha pasado algo? Te veo un poco raro hoy..." le preguntó Federico.
"¡No!.... ¡No tengo nada!" respondió el muy enfadado.
"¿Te he hecho algo?" preguntó el Freezer poniéndose la mano en el pecho.
Franco lo miró decepcionado por unos segundos y después se fue sin decir una palabra.
"¿Es mi impresión o tiene algo  contra a mi?" preguntó Federico dirigiéndose al resto de la familia, que le respondió levantando los hombros y las cajas al cielo.

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Mientras tanto, Flor fue al salón a ver quién la buscaba; Obviamente era el Conde que vino a convencerla de salir con el a hacer un paseo, dada que aquella mañana había un sol de verdad invitante.
Al principio Flor no quería, porque estaba demasiado deprimida y desconsolada para salir , pero luego se dejó convencer por el Conde.
Flor sabía que él la entendía y que soportaría y respetaría su dolor; Tan cargada de los complimentos del Conde, se cambió, se maquilló y se hizo aún más bella de lo que ya era.
Por primera vez una sonrisa espontánea de 42 dientes volvió a invadir su bonita cara que había sido por demasiado cubierta solo de lagrimas.
Antes de irse, arrancó unas hojitas de su árbol para que pudieran conducirla y darle suerte.
"Vamos señor Conde" dijo Flor sonriendo, y abrazando al Conde que estaba muy eufórico y no podía esperar a pasar toda la tarde con su amada.
"¡Vamos, princesa!" le respondió él, lanciandole su encantadora mirada de rompecorazones.
Los dos estaban bajando por las escaleras del salón cuando se encontraron con Federico y la bruja:
"¿Van a salir?" preguntó Federico abaja voz, mientras Delfina lo abrazaba muy fuerte para poner celosa a Flor, y todos sabemos que cuando Flor se pone celosa ¡esta aun peor de Federico!
"¡Sí, señor Federico! ¿Problemas?" dijo Flor arrogantemente;  Federico se mordió el labio inferior nerviosamente e intenté responderle, pero fue interrumpido por Delfina, que toda satisfecha, dijo:
"No, pero ¿qué problema hay?"
"¡Si lo hay!", dijo Federico, poniendo nerviosos a todos los presentes en ese salón.
"¿Qué?" dijo Delfina enojada y molesta.
"¡Hoy no es su día libre, su día de descanso es mañana!", dijo Federico muy fiero y convencido de poder detener Flor allí a casa con él.
"Bueno, ¿no veo cuál es el problema, señor Federico? ¡Hoy salgo y mañana trabajo!", dijo Flor como venganza a los celos de Federico.
"¡Me parece perfecto!" dijo Delfina un poco sorprendida, ella pensó que tenía que presionar a Flor para que se alejara; el hecho de que ella hacía todo el contrario de lo que habia calculado le daba un poco de molestia.
"¡Bien! ¡Ahora podemos ir!" dijo Flor haciendo muecas a Federico antes de cerrar la puerta y desaparecer con Maximo.
Federico permaneció en el salón con los brazos cruzados, muy molesto, con Delfina que le estaba siempre encima sin dejarlo un minuto.....comenzaba a no soportar más su presencia.