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Narra Kat

-¿Y como va el colegio?-. Nos pregunta en general la tía.

Nos encontramos todos desayunando con la tía, mientras hablábamos de bobadas.

Todos intercambiamos miradas y amara contesta.

-Bien-.

-¿Solo bien? Ninguna tiene algún novio escondido por ahí-. Por qué la tía tiene que ser tan picarona dios, por qué.

-Mama por favor, están muy chicas-. Dice Alexander

-Oh tu no tienes derecho a opinar en esta conversación Alexander, siempre que tuviste novias se te apoyo-.

Alex iba a refutar pero la tía lo interrumpió.

-Y no me obligues a llamarte por tu nombre completo-. La cara de mí amigo cambio a una de terror y comenzó a negar frenéticamente.

-Nono, está bien, estoy segura de que Lexa sabe con quién se junta-. Dijo con un sonrisa forzada pero sin dudas graciosa.

-Cambiando de tema, sus madres y yo debemos decirles algo, así que cuando salgan del colegio vengan a las instalaciones—dijo mirandonos- ustedes también chicos-. Dijo ahora a Zack y Kelly.

-Esta bien señora Scott-. Dijeron

-Oh vamos niños, ya estamos en confianza-. Les dio una sonrisa

-Entonces ¿No va a venir un auto por nosotros?-. Pregunté

-Oh, como ustedes prefieran kat-.

Los mire, mire a la tía, los volví a mirar y conteste.

-Creo que un auto a un par de cuadras del colegio no estaría mal-. Dije y todos asintieron.

-esta bien- dijo mientras nos daba una sonrisa, que luego cambio a una de asombro-  santo cielo, miren la hora niños, van a llegar tarde-. Todos nos dimos vuelta para observar el reloj, y si, efectivamente si no salimos corriendo vamos a llegar tarde.

-Agarren sus cosas gente bella, y corran-. Gritó Zack mientras trataba de terminar su jugo de naranja.

-Traga Amara, traga que no tenemos todo el dia-. Alexander estaba apurando a su hermana para que comiera el moffin

-¡No puedo hacerlo animal!-. Gritó mufada

-Sin mí dosis de azúcar no existo-. Gritó desesperada Zai, mientras trataba de terminar su licuado

-Por suerte yo ya terminé- hablo de forma relajada dess- ven chicos, esto pasa cuando una no madruga-.

-no todos nos despertamos a penas sale el sol-. Dijo está vez Lexa que trataba de untarle mermelada a su tostada lo más rápido posible

-¡Vamos, vamos, vamos, manga de vagos!-. Grite yo, me encanta cuando se desesperan.

(...)

-¡Paren todos un segundo!-. Fue el gritito que pegó Destiny a penas llegamos al colegio.

-¿Y ahora que?-. Pregunto Kelly

-Que quiero ir y comprar unos dulces en el kiosco de enfrente-. Dijo mientras apuntaba a el lugar.

-¿Es broma cierto?-. Pregunto Alex incrédulo, viendo como ella asentia- Estamos llegando tarde y quieres comprar dulces, puedes comprarlos en la cafetería del colegio Lo sabes ¿Verdad?-.

-Los de la cafetería son feos, tienen un sabor rancio asqueroso-. Dijo ella en su defensa.

Sinceramente no sé lo puedo negar, la vez que compre unos, termine vomitando.

La nerd modeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora