𝐁𝐑𝐀𝐕𝐄 | ❝You don't have to say you love me
I just wanna tell you somethin'
Lately you've been on my mind❞
Gabriela se une a la manada de Scott como una humana más y ayuda en todo lo que sea capaz para combatir las amenazas sobrenaturales que r...
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Esperaba sentada en uno de los sofás de la casa de Liam. Jugaba con mis dedos sonriendo levemente al escuchar a mi novio quejarse de no querer ir a la escuela y Scott regañándolo.
Habían sido días difíciles. Muy difíciles.
Liam se había aislado del mundo. Ni siquiera a mi me hablaba. Había estado ignorándome desde la muerte de Brett y Lori.
Yo quería ayudar al beta con el dolor de la pérdida. Quería que nos ayudáramos mutuamente, pero él no contestó mis mensajes ni mis llamadas, le había pedido a su madre que no me dejara pasar. Sabía que se sentía culpable por haberse transformado, también sentía culpa por no haber evitado la muerte de los hermanos.
Escuché un golpe seco en la habitación del castaño así que me levante aburrida para tratar de convencer a Liam de una vez por todas.
Estuve a punto de abrir la puerta, pero escuché al beta hablar con un tono de voz bajo sonando sentimental.
— No conocía a Brett o a Lori — habló Scott de igual forma —. No como tú, pero te conozco a ti. Y si te da miedo ver a otros amigos morir... — hubo un pequeño silencio — o a Gaby, irás.
— ¿Crees que ella quiera verme? ¿Está enojada conmigo?
— No estuvo bien que la ignoraras, pero ella te entiende. Gabriela a pesar de también estar sufriendo, quería ayudarte a que superaras la pérdida junto a ella. También sé que quería quitarte esa culpa que cargas.
— Yo no quería hablar con nadie — su voz apenas fue un susurro —. Sé que estuvo mal no haberle respondido, pero en serio no quería hablar con nadie.
— ¿Quieres hablar conmigo ahora? — pregunté suavemente abriendo la puerta de su habitación. Él de inmediato me miró.
— Estaré abajo — dijo el alfa saliendo.
Me acerqué lentamente y me senté a su lado.
— Perdón — susurró.
— Está bien, Liam — sonreí —. Solo no lo vuelvas a hacer — acaricié su cabello —. Recuerda que siempre estaré para ti, sin importar qué.
— Y yo para ti — me tomó de las mejillas y dejó un beso en mi frente —. Perdóname.
