NUNCA JAMÁS ME ENAMORARÉ DE TI (Peter Pan / Robbie Kay y Tú) OUAT

AMENAZAS:

     Hace 15 años atrás:

 Narra Henry:

 Hacía ya bastante tiempo que no leía mi libro de cuentos, por lo que decidí sacarlo del librero y desempolvarlo, aún recuerdo cuando toda esta loca aventura comenzó, en ese entonces casi nadie me creía, excepto mamá Emma, no los culpo supongo que es difícil pensar que los personajes de cuentos existen realmente y más aún cuando le dije a mamá Regina que ella era la Reina Malvada, fuera de todo eso, el temor, miedo y de cierta manera odio que me hizo pasar Peter Pan no valieron al final de mucho, resulto que mi corazón no era el que necesitaba para sus planes, por lo que al final de nada sirvió que me raptara, cuando mis madres, papá, mis abuelos y algunas personas del pueblo me rescataron y lo vencieron, logramos regresar a casa sanos y salvos, todo ha estado bastante pacífico y tranquilo, ya ha pasado más de un año y no hay ni señal de peligro.

 Todos han rehecho sus vidas, el Sr. Gold (Rumplestiltski) y Bella ahora viven en la misma casa junto con su hijo Gideon, mamá Emma se ha casado con Killian (Garfio) y tienen una niña de un año que es la adoración de Mary Margaret (Blancanieves) y David (Encantador), sin contar obviamente a su hijo Neal, Roland (el hijo de Robin y Marian) pronto cumplirá los 5 años y yo los 7, mamá Regina se ha casado con Robin Hood, tal como debió haber sido desde un principio, de hecho, ahora mamá Regina está embarazada de 5 meses, todo indica que será una niña eso es lo que ha dicho el doctor, y en cuanto a mí, estoy viviendo en casa de mis dos madres como quien dice, voy y vengo de allá para acá y me agrada convivir con ambas familias.

 Está semana hemos estado viendo la decoración de la habitación de la nueva integrante, me han dejado escoger prácticamente todo, le leeré los cuentos que me leyó nuestra madre en algún momento, sé que seremos una gran familia, ahora volveré a ser el hermano mayor y estoy muy feliz al respecto, incluso Roland ha estado viniendo a ver en que puede ayudar, dice que no, pero sé que a él también le emociona la idea de tener una hermana, en su caso será hermano mayor por primera vez.

 Al abrir mi libro me doy cuenta de que nuevamente hay más páginas, cosa que me sorprende, ha aparecido nuevamente un personaje que no esperaba que volviera, la Bruja del Oeste, no sé porque ha aparecido, supongo que saldrá de su cuento para venir al pueblo, deberé estar atento a cualquier movimiento que sea extraño, comúnmente las brujas no suelen ser un buen personaje, lo cual me preocupa.

 ***

 Ya han pasado tres meses desde que mamá Regina se alivió, Robin ha dicho que la nueva integrante será bautizada, así que después de un mes de planeación aquí estamos, hemos tardado tanto ya que para Robin nunca nada era suficiente para su preciosa hija.

 La ceremonia ha salido bastante bien, ahora estamos en la recepción es increíble ver cuanta gente sigue llegando, demasiados personajes de cuentos en un día, todos parecen felices con la llegada de la nueva integrante, Razzi Hood Mills es su nombre, observo como es que pasa de brazos en brazos, todos quieren cargarla un momento, es una bebé bastante linda ha sacado los mejores rasgos de mamá Regina y de Robin, de pronto y de la nada apareció la Bruja del Oeste, inmediatamente Robin y Regina protegen a la bebé, ella se ríe y comienza a hablar:

-Oh Regina, querida cuanto tiempo.

 Volteo a ver a mamá la cual me da a cargar a la bebé, se levanta y se dirige a ella.

-¿Qué haces aquí? –pregunta bastante molesta.

-Oh, ¿así es como recibes a tu hermana? –pregunta burlonamente la otra.

-No tengo tiempo para esto.

-Escuche que estabas embarazada, así que venía a darte mis felicitaciones... Quería conocer a mi sobrina –respondió ella dirigiéndose a mí.

-No oses tocarla, te lo advierto –dice Robin interponiéndose entre la Bruja del Oeste y yo.

-¿Enserio hermanita?, de todos los hombres, ¿elegiste a Robin Hood?, mamá estaría bastante decepcionada de ti.

-Bueno, ella ya no está, así que no importa su opinión ahora... Te lo diré solamente una vez Zelena, vete.

 La Bruja del Oeste le dirigió una mirada despreciativa a mamá Regina y comenzó a avanzar hacia la salida.

-Que no se te olvide el daño que me causaste linda, ni tu osadía del día de hoy, porque no lo dejaré pasar y no lo he olvidado... Pero sé que aún no es momento de hacerte saber el daño que también yo te puedo causar.

 Después de eso, la mayoría se fue a sus casas, no tenían ánimos para continuar con la fiesta después de la amenaza, los únicos que se quedaron fueron mis abuelos, Emma con su familia y Regina con Robin, yo me dirigí dentro de la casa con Razzi en brazos.

-Esa niña te traerá toda clase de problemas querida –dijo Rumple.

-No deberías decir eso, es tan linda... Además, ella no tiene culpa de nada –respondió Blancanieves.

-Eso es porque tú piensas como una persona buena linda, pero recuerda que mi mentalidad sigue siendo en el fondo la de un villano, y siento decir que todos querrán tomar venganza contra Regina por medio de una debilidad que acaba de nacer.

-Rumple tiene razón mamá –dijo Emma- Regina deberá ser cuidadosa con esto, no sabemos que tantas personas le han guardado rencor estos años...

-Tal vez sea una coincidencia –interrumpió Bella- además no sabíamos que esto pasaría.

-Yo si –dije saliendo al patio.

-¿De qué hablas Henry? –pregunto mamá Emma, dejando a mi hermana Faina en brazos de Garfio.

 Dejé a Razzi en brazos de Robin y subí corriendo las escaleras, entonces bajé con el libro bajo el brazo, abrí el libro en la página que había encontrado, eran Regina y Zelena encontrándose tal como hace un momento, todos se mostraron sorprendidos ante esto.

-¿Por qué no me lo habías dicho? –preguntó mamá Regina en un tono que no supe si era tristeza o decepción.

-Yo... No pensé que podría pasar algo así.

 Robin inhaló y exhaló para después decir.

-Henry, por favor... En cuanto veas algo nuevo dentro de tu libro, dínoslo por favor.

 Asentí, claro que a la próxima les diría, no quiero que se repita una situación así, aunque sinceramente preferiría que no hubiera una segunda vez.