NUNCA JAMÁS ME ENAMORARÉ DE TI (Peter Pan / Robbie Kay y Tú) OUAT

PACIENCIA:

 Narras Peter:

 Una vez hubo despertado _____ y después de darle algunas indicaciones, salí del campamento, el hecho de estar a su lado cuidándola durante dos días había retrasado varias de mis actividades, y había algunos asuntos que estaban prácticamente pidiendo toda mi atención, ya que solo yo podía hacerme cargo de ellos.

 Primeramente, me dirigí a lo que antiguamente había sido el Bosque de las Hadas, hacía mucho tiempo que sus árboles ya no producían polvillo de hadas, tal vez con eso podría chantajear a _____, con ese buen corazón que tiene dudo mucho que se resista, posterior a eso me encamine a donde se encontraba la cascada curativa contra el veneno de corazón, tome la decisión de esconderla y cubrirla mucho más de lo que ya estaba, para que si en algún momento uno de los Chicos Perdidos le da a uno de nuestros visitantes con alguna flecha empapada en veneno, por muy pequeño que fuera el rasguño, ellos no puedan salvarse tan fácilmente, luego fui a revisar personalmente que todos los puestos de vigilancia estuvieran bien ocultados y funcionales, me sorprendí un poco al notar que ya estaban siendo usados por los Chicos Perdidos, Félix ha hecho bien en adelantar las patrullas de la isla, por último, pero no menos importante me dirigí hacia la parte más alta de la isla, justo en donde prácticamente se podía ver todo, note que el campamento se distinguía un poco, tendríamos que apagar algunas antorchas y desmontar algunas tiendas, estaba pensando en mover el campamento un poco de lugar para distraer a nuestros queridos intrusos y que no encontraran tan fácilmente la casa en donde se encontraba ____, cuando escuche una voz a mis espaldas.

-¿Qué estás haciendo?

 Me gire para ver de quien se trataba, era Sombra.

-No es nada, solamente me aseguro de que todo se encuentre en orden dentro del campamento.

-Hace mucho que no te veía tan atareado y ocupado –respondió ella.

-Es porque hace mucho tiempo que tampoco teníamos intrusos en la isla Sombra –rebatí rápidamente.

-¿Cómo va tu plan de hacerte bueno y conquistar a esa chica?

-Primera, jamás dije nada sobre conquistar a esa chica, por lo que no planeo hacerlo.... Y segunda, con respecto a mi plan, va marchando bastante bien.

-¿Bastante bien?, no te he visto interactuar con ella en casi todo el día.

-Era porque me estaba asegurando de que todo esté en perfecto orden y que nada más requiera de mi atención para que pueda volcarme completamente a ella y convencerla de que este de mi lado.

-Vaya, sí que eres bastante astuto Peter Pan... Espero que cumplas tu objetivo, ya que de eso depende tu vida.

-Claro que lo cumpliré Sombra, no permitiré que nadie vuelva a fallar, y hare lo que sea necesario para que esta Isla siga teniendo a su gobernante, que soy yo, obviamente.

-Tan confiado como siempre, deberías aprender de tus errores.

-No he cometido ninguno –respondí de manera autosuficiente- al menos no desde que estoy aquí.

-Ninguno es una palabra un poco exagerada, ¿recuerdas lo que paso con el otro niño? Se escapó de tus manos como si se tratara de la mismísima arena de tu reloj.

-¡BASTA! –grite furioso recordando lo que había pasado, cerré los puños llenos de impotencia- no fue un error lo que paso en ese momento, no fue mi error.

-Puedes decir eso y negarte todo lo que quieras a la situación, pero es algo que sucedió y que no puedes borrar.

 Cerré los ojos intentando calmarme para no perder los estribos.

-¿Qué es lo que quieres Sombra?, ¿para qué has venido?

-Solamente venía a recordarte eso, espero que tu nuevo plan tenga éxito –fue lo último que dijo antes de retirarse.

 Me quede un rato más ahí en lo que me calmaba a mí mismo, no podía llegar de esa manera al campamento, ya que de ese modo lo único que lograría seria espantar a _____ y en estos momentos era lo último que quería, necesitaba que ella confiara en mi plenamente; una vez estuve más relajado me dirigí nuevamente al campamento, aterrice en el centro y comencé a ponerme al corriente, con Félix como fuente informativa.

-¿Ha comido bien? –cuestione.

-Si, en el desayuno pido más alimentos, así que a la hora de la comida le hemos dado una porción y media, y ya casi es hora de su cena.

-¿Ha intentado escapar?

-No, se la ha pasado todo el día encerrada.

-¿Ha hecho algún movimiento extraño?

-Nada, literalmente no ha salido de su confinamiento... Lo único que ha hecho es hacer demasiadas preguntas e intentar entablar una conversación conmigo, sin embargo, no le he respondido ninguno de sus cuestionamientos.

-¿Qué fue lo que le dijiste entones?

-Que esperara hasta que tu llegaras, y que solo tu podías responderle todas sus dudas.

-Muy bien Félix, bien hecho –dije asintiendo con la cabeza- dame su cena, se la llevare yo personalmente.

-De acuerdo Pan, como tú digas –respondió él dirigiéndose a una casa de campaña y sacando una charola con comida- toma.

 Tomé la charola con comida y me dirigí a la casa de árbol donde estaba habitando _____ actualmente, subí las escaleras y abrí la puerta, para mi sorpresa estaba todo acomodado con cosas que no había anteriormente, incluso tenía un toque más hogareño ahora, miré a mi alrededor observando los cambios, _____ se encontraba sentada en la cama leyendo un libro.

-Hora de la cena –dije entrando a la habitación y cerrando la puerta detrás de mí.

-Volviste –dijo ella levantando la mirada del libro.

-Te dije que regresaría, siempre cumplo mis promesas, recuerda eso –respondí dejando la charola en la cama- espero que tengas hambre, no quisiera que te quedes sin fuerzas a mitad de camino.

-¿Cómo? –pregunto ella extrañada.

-Me refiero a que no quiero que mueras.

-¿Por qué no?, ¿no sería lo mismo? –cuestiono acercándose a la bandeja y tomando la rebanada de pan que había.

-No seas tonta –conteste dándole un pequeño golpe con le servilleta- por supuesto que no es lo mismo, además si te quisiera muerta, ¿no creerías que debería haberte dejado en el Lago de las Sirenas ahogándote y desangrándote?

 Ella me miro con los ojos entrecerrados comenzando a comer.

-Veo que ya te has establecido sacando todas tus cosas acomodándolas.

-Sí... La verdad es que se veía muy feo y maltratado todo, además los muebles son para ocuparse, así que eso es lo que he hecho.

-¿No te parece que son demasiadas cosas las que traías contigo?

-En realidad son pocas –respondió ella como si fuese la cosa más obvia del mundo.

 _____ comenzó a comer, esperé un momento mirando todo lo que había cambiado, si bien ya había comenzado a observar, no me había dado cuenta que cabían tantas cosas en sus maletas, parece ser que se parece mucho a su madre, finalmente después de haber estado observando todo atentamente dije:

-Félix me ha dicho que al parecer tienes varias preguntas por hacer, bien, aquí estoy... Puedes preguntar lo que sea que se te venga a la mente.

-Amm... Bueno, me gustaría saber que hago aquí principalmente.

 Muy bien, es hora de comenzar con el show, _____ nunca debe enterarse porque está aquí realmente.