Jardín Del Deseo

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Caminé tras Daniela, esta me guiaba hacia una parte del castillo que no había recorrido mucho a decir verdad, si me pongo a pensar, creo que del todo no la conocía ya que en todo el tiempo en el que estuve con el rol de sirvienta no se me asignó encargarme de esta zona. En esos momentos eran en los que reconocía el gran tamaño del castillo ya que tardamos bastante de la habitación hasta donde vi que Daniela paró de caminar, “Cielos, odio el trato que te está dando mi madre, eres tan suertuda, ya hace semanas que habría acabado contigo, en lugar de eso debo soportar tu lentitud y caminar hasta acá como simple mortal” dijo la hija con mirada despectiva, supongo que la opinión que tiene esta chica una cambia hacia mí, debo vivir siempre con este miedo, “Es aquí” agregó señalando una gran puerta que al abrirla dió con una entrada con techo de vidrio a lo que parecía ser un jardín, aunque no se lograba divisar del todo bien.

Al entrar del todo pude visualizar un hermoso jardín que a diferencia del resto del pueblo, este poseía flores y plantas hermosas, bien cuidadas, me sentía en otro lado, todo menos en ese pueblo viejo al cual mi familia había tenido la gran idea de mudarse,  Daniela cerró la puerta dejándome sola, al fondo del espléndido lugar estaba Alcina junto con Donna y su muñeca, con lo que parecía un picnic, pues estaban sentadas encima de un mantel floral, bebiendo vino, Lady Dimitrescu al  mirarme me hizo una señal para que me acercara, no entendía nada, pero entre mas me acercaba podía notar lo hermoso que se veía la escena y las delicias que tenía preparada mi señora, “¿Necesitas algo ama? “  pregunte con demasiada curiosidad, tomó un sorbo más de su copa para después dirigirse hacia mi, “Nada en especial, quería disculparme adecuadamente por los sucesos de la mañana, mi hermana ha ayudado un poco tambien, asi que toma asiento junto”, su respuesta me dejó confundida y sorpresiva a decir verdad jamas pense que tendria un acto tan bondadoso conmigo. Ya al acercarme logré admirar más detalladamente todo el paisaje floral que teníamos alrededor de nosotras, incluso arriba de nosotras, ya que había un arco de estas; me senté a su lado y frente a Donna que tenía recostada a ella a Angie, “Dios...que malos recuerdos tengo respecto a esas dos, mis piernas me siguen pidiendo a gritos que salga corriendo de allí” pensé, de repente Angie se puso de pie. sacó de una canasta lo que parecían ser diademas hechas de pequeñas flores y nos las puso a mi ama, a Angie y a mí, “E-es un pequeño detalle que hice para disculparme por perder el control en la mañana, de veras lo siento” dijo Donna con voz inocente y a mi parecer demostrando bastante honestidad, me pareció un detalle muy lindo que dejando atrás el trauma que probablemente me deje de por vida pasaré por esta vez y le aceptaré la disculpa.

“Hmph...que detalle tan infantil hermana” le dijo Alcina a Donna, la que agachó la mirada inmediatamente demostrando decepción de su detalle, “Quizás infantil pero suficientemente lindo para que su disculpa sea aceptada” dije mirando a mi ama con una sonrisa pícara, la que hizo un puchero con mi respuesta desafiante. Satisfecha con mi pequeña pero primera victoria sobre esta  me serví un poco de té y unas galletas que se veían deliciosas y me decidí a aprovechar la ocasión y quizás a acostumbrarme un poco a este estilo de vida al que estaba llegando, de repente sentí algo grande pero suave tocando mi mano y dirigí mi mirada para corroborar de que se trataba y me topé con que era la mano de mi ama posada sobre la mía, “Joder, ¿Qué hace?” pensé, esta mujer me quería matar...pero de la pena, de repente sentí un calor en todo el cuerpo y lo que le suelen llamar “mariposas en el estómago”, no sabía que me pasaba solo con esa irrelevante acción, pero me estaba volviendo loca, era una sensación que honestamente no quería que acabara, en este entorno tan bello con esta mujer con mismamente belleza equiparable.

Después de tantas semanas por fin podía sentir paz, ¿paz? ¿con asesinas a mi alrededor? no podía engañar a mi mente del todo, a veces se me olvidaba ese detalle y no tan pequeño, decidí no mortificarme con el pensamiento y tome un ramo de uvas, el silencio fue interrumpido por Angie, una vez más dirigiéndose a mi, “Espero te gusten, Donna hizo las galletas deliciosas”, “Si, todo sabe muy bien, gracias de nuevo”, Alcina tomó una uva del ramo que sostenía y se la llevó directo a su boca, como si  fuera un juego de seducción la mordió lentamente, sabía que la estaba mirando, ¿era un clase de indirecta?, quise entablar conversación pero no sabía hasta qué permitido tenia hablar, asi que preferi elogiar su jardín, “Sabes cuidar muy bien este lugar, a pesar del mal clima de afuera”, “No todo el año es tan frío, pero puedo decir que se me da bien la jardinería, cuido a mis plantas tanto como cuido a mis hijas” , sonreí a su respuesta, ante todo era una buena madre, Donna seguía con su velo negro, no se lo retiraba ni para comer, era todo un misterio su rostro, se levanto primero disculpandose, “Bela me espera y mi trabajo con los vestidos igual, nos vemos luego”, dijo tímidamente, al retirarse por completo Alcina tomo mi barbilla con rapidez para proporcionarme un beso calido que respondi al segundo, rompio el beso, para despues relajarse mejor, “Al fin solas, no soy grosera pero mi hermana es un tanto...aburrida” , “solo es timida, sabes por que es asi? “ , me miró dudosa, si contarme o no  pero aun así continuo, “según Madre Miranda, sus padres murieron, no tenía a nadie a parte de ella y además tiene una cicatriz en su rostro, por el cual la molestaban de niña”, “ahhh por eso el velo, tiene una historia bastante triste”, ahora quería abrazarla, ahora me pregunto si mi señora tendrá una historia igual de trágica.   

“Pero bueno mi niña, creo que es momento de que dejemos de hablar del pasado y nos centrémonos en el presente y cumplas con mis mandatos, así que como buena mascota que eres compláceme nuevamente” dijo de repente cortando el tema anterior, de repente se acercó a mí y me besó nuevamente pero esta vez más bruscamente introduciendo su gran lengua dentro de mi boca, obviamente le correspondí, cerré los ojos y me dejé llevar, era todo un placer sentir esa lengua frotando contra la mía una y otra vez, sus labios carnosos y suaves comiendose mi boca, no pude acabar de disfrutar este momento cuando Alcina separó el beso y apartó todo el juego de té y comida de la manta donde estábamos sentadas y bruscamente me tomó de los hombros y me acostó en esta, se abalanzó sobre mí y tomándome de los hombros fuertemente me miró con esos ojos color amarillo topacio como si de su presa me tratase y empezó a lamerme el cuello salvajemente, como si se estuviese conteniendo mucho tiempo de ganas de hacerlo, pero maldición, que bien sentía su lengua lamiendome, pasó entonces a chuparme también y luego pasó a seguirme besando y a masajearme los pechos con su gran mano, estaba siendo sometida a fuerza pero no me disgustaba para nada, al contrario, me encantaba lo que sucedía, luego de eso me despojó de mi vestimenta superior y bajó a lamerme uno de mis pezones mientras seguía masajeando el otro pecho, mis pezones eran tan sensibles que no tardaron mucho en erectarse debido a fantástica estimulación por parte de mi ama, me encantaba como delicadamente frotaba con sus dedos mis pezones, era salvaje y a la vez precavida con hacerme sentir bien, tras dejarme acabada en esa zona bajo con su lengua por mi abdomen acompañandola con un acariciamento de cintura mientras iba bajando a donde esperaba más que llegara...a mi vagina que a decir verdad ya estaba bastante húmeda. Al llegar a la esperada zona genital, en vez de empezar inmediatamente me cambio de posición a su gusto, me sentó en su rostro e inmediatamente empezó a lamerme bárbaramente ese sitio que estaba tan mojado ya mientras sostenía firmemente mis muslos, yo a la rapidez del momento logré apoyarme en sus grandes pechos, que se sentían bastante delicioso apretarlos, no sabía si estaba bien aprovecharme del momento para tocarla de esa forma tan lasciva pero no podía detenerme a pensar en ello con la señora succionandome tan placenteramente la vagina, su lengua se sentía excelentemente lamiendo de un lugar a otro, recorriéndome por dentro completamente, trataba de contener mis gemidos pero era inevitable perder el aliento con esa mujer comiendome el coño como lo estaba haciendo, nunca me imaginé en esta situación al aire libre en un lugar tan hermoso. Ya no pudiendo contenerme más le dije a duras penas “A-ama estoy a punto de correrme”, saboreandome paró un momento para decirme “Hazlo querida, estoy lista para recibirte completamente” e inmediatamente continúo con un ritmo más acelerado, “DIOS, ESTABA POR PERDER LA CABEZA AHÍ MISMO”, hasta que no pude más y me vine en el rostro de mi ama. 

Nota: Muchas gracias por seguir la lectura, esta semana estaré ocupada con la universidad pero espero poder actualizar en unos días c: ❤️ la trama la voy alargar más de lo que esperaba, así que bueno espero que compartan la historia en el fandom :') lo subiré en inglés también.

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