¿Amor?

1.9K 225 25
                                    

Me sentía como si fuera parte de una broma de mal gusto, sin pronunciar ni una palabra se alejó de mí, dejándome sola en el lugar, no me quedaría sin respuesta, así que la seguí de nuevo, bloqueando su paso, mi mirada fija a la suya, tratando de controlar mi respiración, "Eres intensa además, no tengo nada que conversar mas... sirvienta", estaba tan nerviosa que casi me llama mascota de nuevo, "No te dejaré en paz hasta saber algo, créeme que soy muy desesperante cuando quiero algo", dije con seguridad, el miedo que le tenía ahora era nulo, no me haría daño lo podía notar en su mirada, "Lo siento... hice mal, no debí hablarte de esa forma", expresé dejando mi orgullo de lado por primera vez en la vida, pero esto no sirvió de nada, pues sus palabras fueron claras, "No soy tan ingenua como para no darme cuenta que piensas eso y muchas cosas peores sobre mi y sólo lo haces para salvarte de más torturas, hazte un lado", no podía negarme, en parte sí lo hacía por esa razón pero otra parte decía que olvidara lo que había visto y que corriera a sus brazos porque no aguantaba esta sensación que quemaba en mis adentros, ¿amor? Es la primera vez que le pongo esa etiqueta, estaba perdida, me hice a un lado dejándola pasar por el estrecho pasillo.

Volví con Donna, esta terminó su trabajo con las heridas, aún dolían pero era soportable, me retiré del lugar, hasta Angie se dio cuenta de lo desanimada que estaba después de esa conversación, pero preferí no hablar de eso. La cena estaba por empezar, así que de nuevo me dirigí para servirles, esta vez siendo cuidadosa sin embargo sólo la presencia de ella hacia que mi corazón latiera más rápido, esta vez no me quitaba la mirada, le llené su copa de vino, igual que a sus hijas, estas murmuraban entre ellas riendo, ya me habían humillado tanto, ¿no se cansaban?, en efecto no, porque al querer servirle a Donna su copa, empezaron hablar, "Tu corazón va muy rápido, aún nos tienes miedo", dijo Cassandra lamiéndose el labio, me quedé en silencio era lo correcto, pero... "No es miedo hermana, es por amor awww", dijo Daniela juntando sus manos, para después las tres se rieron en mi cara, lo que note fue la expresión sorpresiva de Alcina a lo que dijo su hija, "¿A que te refieres Daniela?" preguntó Dimitrescu con cierto desconcierto e insistencia, Daniela no contestó, no quería problemas, pero Cassandra sí, sólo para molestar aún más, "La mortal se enamoró de Donna, madre" dijo riendo... me había puesto roja en un instante volviendo a ver a Donna y Angie que hasta dejó caer su cuchara, por la barbaridad dicha, negué con la cabeza, mirándola aún, al parecer Donna había entendido que sólo querían molestarme, la que no se tomó para nada bien lo que dijeron fue la propia Alcina, enfurecida se levantó de la mesa golpeando esta misma, "Podrían comer sin estar diciendo estupideces, ¡silencio!", las tres se miraron sorpresivamente por la reacción de su madre y cesaron las risas, ahora era un silencio verdaderamente incómodo, decidí salir, dejando a las demás sirvientas recoger la mesa cuando terminaran, ahora ¿qué estaría pensando de mí? Esperando que no les creyese nada, muerta de vergüenza me dirigí a mi habitación.

Un nuevo día, ni siquiera había podido dormir bien en toda la noche por estar pensando en ella, quería verdaderamente estar en su cama junto con ella, la extrañaba horrores, exhausta aún así me levanté, directamente fui a ordenar las habitaciones, terminé este labor para seguir limpiando los adornos del pasillo, con cuidado de no romper nada, en toda la mañana sólo había visto pasar a otras sirvientas, seguro que no se encontraba, ni siquiera Donna estaba en su habitación, ¿otra reunión importante? pensé, me dirigí hacia el salón principal para recoger y para estar ahí cuando llegara, para mi mala suerte las tres hijas aparecieron rodeandome en un instante, pasaría de nuevo "joder" expresé en voz alta, "No le agradabamos hermanas" dijo Bela, "Eso me hace mal, acaso no me amas?", diciendo Daniela mientras se acercaba aún más, Cassandra por otro lado estaba de espectadora, mandaba a sus hermanas a su conveniencia, cuando Bela me rozó la espalda con su hoz, un escalofrío recorrió por todo mi cuerpo, " Todavía ni siquiera me termino curar de las heridas de la otra vez, ¿va en serio?" dije esperando un poco de clemencia, mucho pedir para ellas, lo único que contestó Cassandra fue "Tenemos sed mortal, ahora colabora, sin lloriqueos", sin poder salir corriendo, cerré fuerte mis ojos para aguantar el primer corte que me harían, al no sentir ningún ataque, mire de nuevo, pronto tenía unas alas negras cubriendome, era Madre Miranda, las tres hermanas se esfumaron en moscas, suspiré tranquila...

De momento tenía a Miranda levantando mi mentón para que la mirara, "Te has ganado unas enemigas no muy fáciles de llevar, menos mal llegué a tiempo", Alcina se encontraba detrás de ella mirando la escena con cierto recelo, Miranda después se dirigió hacia ella, "¿Así tratas a nuestra invitada?, sino más recuerdo te dije que su lugar ya no era más el de una sirvienta y regreso para verla con heridas y con ese traje", "Es su castigo Madre, intentó escaparse", ok ahora estaría en más problemas, Miranda sólo ignoró el hecho y siguió reclamando, "Has pasado sobre mis órdenes, no quiero verla muerta o pagará una de tus hijas, acepte el jueguito que tienes con ella pero no aceptaré que el recipiente perfecto se dañe, ¿me entiendes?" Dimitrescu sólo asintió, avergonzada, pero ¿de qué hablaba? ¿recipiente? Que mierdas dice, no quería que pagara ninguna de las hijas por mi culpa así que intervine, "Lo siento mucho, no volveré a causar problemas, no intentaré escaparme, sólo intenté ayudar a una doncella, no es culpa de Alcina, me he ganado el castigo por lo mal que me he portado con ella, no hay necesidad de amenazas", expresé con urgencia, alzando una ceja con interés, tomó mi rostro diciendo "Te has enamorado de esta doncella, querida", las palabras le cayeron muy mal a mi señora, que inmediatamente intervino negando, parecía demasiado ofendida pero nerviosa, "Eso no es cierto, necesito respeto ante todo", "¡Silencio!" pronunció Miranda, yo no sabía dónde meterme, "Retírate inmediatamente", dijo Alcina, obedecí que solamente me disculpé para retirarme, pero obviamente me quedaría escondida para escuchar lo demás, oportunidad así no la podía desperdiciar.

Nota: Los fanarts que a veces expongo, NO son míos, así que créditos a quién los merezca, intentaré buscar de quién es para nombrarlo aquí aunque sea.

Mi Dama de Fuego Donde viven las historias. Descúbrelo ahora