Pruebas

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Un par días habían pasado, la verdad ni siquiera sabía que día de la semana era, había perdido la noción del tiempo, pasaba todo el día en la habitación, tuve la grandiosa visita de Miranda, para ver mi avance, he estado lúcida todo el tiempo, pero mi hambre es voraz, creo que no es algo bueno, para ser la anfitriona perfecta, por momentos la escuchaba discutir con Alcina, ¿no seré la salvación? ¿Para qué los demás lords necesitan una salvación?, ¿Qué tan importante es conseguir el recipiente perfecto, para ellos?, al principio creí que sólo era una cosa de Miranda, recuperar a su hija, pero y ¿después?  ¿Qué planea realmente? un escalofrío recorrió mi cuerpo de sólo pensar en las respuestas, pues al parecer nadie me diría nada y bueno no es la primera vez que me ocultan información, pronto lo sabré. De pronto la puerta se abrió, entrando Lady Dimitrescu con una bandeja con comida, "Se que tienes hambre, de nuevo, creo que es hora que uses tu nuevas habilidades", probé bocado de la carne, para darme cuenta que esta tenía un sabor muy intenso, jamás había probado algo igual, sabía deliciosa y de momento me estaba comiendo el platillo como si llevase días sin comer, lo terminé en segundos, con la cara sucia con restos, mi ama tomó una servilleta y me limpió, "Lo siento, no es muy educado de mi parte, pero no sé qué me pasó", se levantó y tomó nota de nuevo, mierda era un ¿experimento?, "Qué exactamente era esa carne?" pregunté con la esperanza  que la respuesta no sea carne…  "Un aldeano, eso comiste", mire con horror la bandeja, lanzandola lejos de mi con mi fuerza ahora adquirida salió volando por la habitación, empecé a exaltarme, la miré con frustración, estaba ciertamente enojada, "Por qué carajos no me dijiste?",  grité, "Madre Miranda ella me ha ordenado, es lo que siempre hago, probar tu apetito, al parecer eres un arma biológica que se alimentará de carne humana", "NO, basta no lo haré más, le obedeces en todo, ni siquiera es tu madre realmente, me has dado comer algo sin mi consentimiento, yo…" mis lágrimas empezaron a salir, sollozando como una tonta, Alcina realmente no sabía que decir, pero sentí su abrazo, "Perdoname por lo que te hemos hecho", su voz se quebró, ¿estaba por llorar también?, subí la mirada, se veía frágil, había prometido no lastimarla, así que limpié mis lágrimas, "Está bien, te perdono, es parte de todo esto, ahora dijiste que podía vivir de la carne de animales, como lo he hecho estos días ¿no?", se separó de mí, "Eso parece, sólo necesito que salgas de la habitación y veamos tus habilidades en función",  "Hagámoslo entonces", dije mientras me levantaba, el dolor era mucho menos y respecto a mis sentidos, cada día eran mejores, sentía que podía moverme muy veloz si quisiera. 

De nuevo me mire al espejo, todo seguía igual, ningún otro cambio físico, pero ahora pensándolo bien con mi nuevo tamaño, mi ropa ya no me quedaría, ¿con qué saldría allá afuera?, me volteé para decirle mis dudas, "Amm supongo que mi ropa ahora no me quedará", "No te preocupes he mandado al mercader por ropa y Donna vendrá por medidas, por mientras mis hijas te pueden prestar algo", contestó, tomando mi mano besándola, un acto dulce, me sonrojé, pero respondí tomando su rostro besándola una vez más, todo este tiempo cuidándome en verdad me quería y era lo único por lo que aguantaba todo esto por el amor que siento, la sensación de tranquilidad que me trasmite besarla con pasión. Los besos siguieron, uno tras otro, era una adicta, su aroma era embriagante,  me tomó por la cintura atrayendo con firmeza, exaltadas, deseando aún más el contacto físico, como hace tantos días no lo habíamos tenido, quería sacarle el vestido destrozarlo con mis nuevas garras, así que empecé a tocar sus pechos por encima del vestido, pero un ruido a la puerta nos interrumpió en mitad de mi plan, era Bela con un par de prendas, algo impactada por la escena que seguro vista, me separé de inmediato apenada. 

"Madre aquí está lo que me has ordenado", "Gracias querida, ponlo ahí", ordenó su madre, Bela no la había visto en todo ese tiempo y creo que se ella se llevó una gran sorpresa no por los besos si ni por mi nuevo aspecto, ahora era un poco más alta que ella, se acercó a mí, estaba esperando sus preguntas que no tardaron en llegar de hecho, "Impresionante, ¿dolió mucho?"  dijo mientras caminaba en círculos a mi alrededor, "Bueno pase la mayoría de tiempo inconsciente, pero si",  "Cassandra ahora tendrá un gran problema si quisiera hacerte daño" dijo riendo, la que habló fue mi lady, "Y espero que no se le ocurra, no quiero más discusiones entre ustedes", "Sí madre, yo me retiro, nos vemos abajo", con un guiño desapareció, me puse ojear la ropa, escogiendo algo, mientras lo hacía Alcina estaba terminando sus notas, se levantó para salir pero antes de se dirigió hacia mí, "Más tarde terminamos lo que empezamos darling, te espero abajo", con una sonrisa pícara dibujada en su rostro, ok me había puesto muy caliente, era mejor tomar un baño.

Baje para encontrarme con las demás, Cassandra y Daniela estaban igual de impresionadas mirándome, "Vaya y pensé que te ibas a morir en el trayecto pero era cierto eres especial" dijo Daniela tocando mis brazos, la castaña sólo río, "No es para tanto, igual no es tan especial, Madre Miranda no está muy feliz con lo que resultó, otra mutación fallida buh", "Siempre tan agria Cassandra, de todas formas es mejor así, a madre le dolería perderla, el amor lo puede todo", "Cállate Daniela tus cursilerias sacadas de libros no va conmigo", se acercó Bela para evitar que la conversación se pusiera más tensa, "Basta las dos, madre me ha dicho que paren de discutir con ella, ahora ella dice que vayas al patio", asentí dejando a las hermanas atrás, que todavía discutían entre ellas, a veces me daban risa y ternura, a pesar de todo eran como las típicas hermanas. 

Abrí la puerta, demasiado frío, nevaba todavía, mi ama estaba de pie esperando en el centro del lugar, "Ahí estás cariño", "Dime que no tendré que hacer algo que no quiera" dije bajando los escalones, hasta llegar hacia ella, "Hoy no pero no prometo nada, tranquila, estaré aquí, no te dejaré sola en esto", de pronto por acto de mis reflejos esquive rápidamente lo que parecía una flecha, ¿pero qué mierda?, me volteé velozmente y mire a un aldeano, este no estaba nada feliz, su expresión de miedo era evidente, "¿Pero me quieres matar?, Alcina río llevándose su mano a la boca, "Sabía perfectamente que no te daría esa flecha, tus reflejos son impresionantes pero veamos  hasta dónde llega tu nuevo poder","Oh tú ya verás de que seré capaz" ... 






Nota : 7u7 de que será capaz?

Mi Dama de Fuego Donde viven las historias. Descúbrelo ahora