#alamierdaelamor

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Me despierto en mi sofá. Mi sofá huele a frituras. Odio las malditas frituras. Me tapo la nariz y ruedo sobre mi espalda. Ni siquiera pude llegar a la habitación. Lo cual está bien, porque también vomité en uno de mis cojines, y a nadie le gusta tener vómito en su cama. Voy dando traspiés hacia el cubo de basura y meto el cojín. Luego tomo una ducha. Estoy a mitad de enjabonarme el cabello cuando recuerdo la nota que dejé para Kyuhyun en el bar. Gimo.

Salgo de golpe de la ducha, sin molestarme en tomar una toalla, y corro hacia mi teléfono.

Dios. Una millonada de llamadas perdidas de David, mis padres, Sarah y mi trabajo.

Bla, bla, bla. El jabón está corriendo por la parte posterior de mis piernas. Me desplazo a través de los mensajes hasta que veo el nombre de Kyuhyun.

CH: ¿Qué carajo?

Eso es todo lo que dice. Me tapo la boca con la mano. ¿Qué decía la nota?

Cierro los ojos. Recuerdo cuán torpe se sintió el bolígrafo entre mis dedos. Cómo la punta rasgóla servilleta en algunas partes, y tuve que ponerla firme para escribir: "TUVE UN SUEÑO. NO TE CASES CON SARAH".

Gimo. De pronto, tengo que vomitar de nuevo. En cambio, me tomo una selfie. Mi cabello está hecho en punta, y aún tengo cara de borracha. Pongo la foto en un álbum
llamado "Momentos Emocionales Mortificantes", y el título "Nota En una Servilleta Empapada". La última selfie que había puesto allí era de mí el día que me gradué de la universidad.

Mi rostro perfectamente luciendo feliz... Aliviada. A esa la llamé: "Mund, chúpate esa".

Termino mi ducha y me siento más optimista. Nunca volveré a ver a Kyuhyun.
Eso resolverá todos los problemas a la mano. De alguna manera encontraré a alguien mejor para Sarah, alguien con una cara menos satírica. Estará más feliz con una médica o una agente de inversiones de todos modos. Alguien que financie su estilo de vida, que no infrinja en su independencia. O podría encontrar una nueva mejor amiga. A Mina, de la universidad, siempre le gusté. Me gustaba su estilo.

David quiere ir a la playa. Dice que: "sólo nosotras", pero ya sabes cómo va eso. Siempre ves a alguien que conoces cuando estás en traje de baño y tu estómago está hinchado de toda la bebida y comida que tomaste la noche anterior.

Voy de todos modos, y me pongo un pantalón corto y una blusa de escotes. Todavía me siento mareada cuando salgo y me acuesto en mi toalla, mi cabeza debajo de un
libro abierto. David ha estado hablando de su trabajo durante los últimos
cuarenta minutos. No me ha preguntado absolutamente nada acerca de mi trabajo.

Cuando hace una pausa para reírse de su propia broma, le hablo sobre mi neumático
ponchado, y pone mala cara.

—¿Por qué no me llamaste? Hubiera ido a buscarte. Me dejaron tomar treinta minutos
extra para mi almuerzo porque piensan que soy muy bueno.

Pongo los ojos en blanco detrás de mis gafas de sol.

—Llamé a la grúa. Además, Kyuhyun me vio y se detuvo— añadí ese último pedazo sin pensar

—¿Kyuhyun? ¿La Kyuhyun de Sarah?

—Bueno, no es de su propiedad— digo, molesta. —¿Y cuántas otros Kyuhyun conocemos?

—¿No crees que eso es raro? pregunta David.

Me incorporo.

—¿Que el tipo que sale con mi mejor amiga me vea varada a un lado de la carretera y se detiene para ayudarme?

David resopla.

—Bueno, supongo que cuando lo pones de esa manera..

—No hay otra manera de decirlo.

A la Mierda con el AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora