Capítulo XXIV

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Pasaron los meses el vientre de Zulema iba creciendo, las presas quedaban hipnotizadas cuando Zulema pasaba frente a ellas, le impactaba el hecho de que aquella mujer fuera a ser madre, pero eso no le quitó su esencia, pues seguía siendo muy respetada. Esa tarde la mora cumplía sus cinco meses de embarazado, estaban en la lavandería terminando con sus tareas mientras algunas presas trataban de adivinar el sexo del bebé.

An: Que no que no, yo me dejo de llamar Antonia si ese churrito no es niño, es que tiene toda pinta vamos.

Te: Antonia que pesa' que es niña vamos-Dijo Tere.

Sa: Bueno bueno ya está ya esta.... Que mi Mora está nerviosa-caminó hasta ella que estaba terminando de doblar unas sabanas.

Zu: No estoy nerviosa, solo que joder cada vez estamos mas cerca y.....

San: Zulema.. Me puedes acompañar un momento...-Llegaron a la enfermería donde Sandoval le dio un formulario a Zulema.

Zu: qué es esto?.

San: Los papeles donde aceptas entregar al bebé cumplidos los dos años a una familia adoptiva.

Zu: Joder-tomó una pluma y comenzó a firmar-Solo quiero conocerlos antes, no puedo entregárselo a cualquiera.

San: Veré que puedo hacer, estas lista para descubrir si es niño o niña?

Zu: Sí-Saray y las demás llegaron  corriendo, todas veían la pantalla mientras hablaban.

An:MIRALO, MIRALO que ese es un pepino no me puedes decir que no.-dijo Antonia.

Sa: Shhh callence a ver Sandoval que dice la pantallita esta?

San: Zulema vas a tener un niño, felicidades-Todas comenzaron a gritar, auque Zulema estaba distraída y Saray lo notó.

Sa: Bueno Antonia por qué no vas con Tere a preparar algo rico para celebrar, estamos con ustedes en un momento, Sandoval me vino la regla puedes conseguirme unos tampones?-todos salieron delandolas solas, Zulema se sentó y limpió el gel- y a ti que te pasa?

Zu: Acabo de firmar los papeles para entregarlo.... - miró su vientre-tengo dos años para disfrutarte a mi antojo-posó la mano en su vientre.

Sa: Y ya sabes como le vas a poner yo estaba pensando en Estrello! Vamos hacemos un combo con Estrellida no te mola?

Zu: Joder Saray-rió-ni en tus sueños tía, todavía no tengo nombres, no pensemos en eso, queda mucho tiempo vamos a ver que preparó Antonia.

Cuatro meses más tarde en una madrugada fría, los pasillos de Cruz de Norte estaban vacíos y silenciosos, pero si caminabas un poco podías escuchar los gritos desgarradores de una mujer, esa mujer era Zulema, que desde hacía varias horas había entrado en labor de parto, sentía como su cuerpo ardía, tomada de la mano de su amiga se dejó caer en la cama, estaba agotada.

Sa: Vas muy bien Zule, muy bien vamos falta poco-secaba el sudor de su frente con una toalla.

Zu: Respiraba agitada- No se que es peor si el puto dolor o que Sandoval me este ayudando a parir.

San: Tranquila, yo no escucho-volvió a su labor.-Ok Zulema necesito que en la próxima contracción pujes con todas tus fuerzas vale!

Zu: Y como se cuando.. Aaahhhh-apretó la mano de Saray.

Sa: Con esto lo sabes comadre ay, joder que me corta la circulación.

San: Muy bien Zulema-sacó al niño y lo levantó-Mira quien está aquí-lo colocó en su pecho.

Zu: ay joder... Hola mounstrito-lagrimas caían mientras lo limpiaban y escuchaban su llanto-Joder Saray es idéntico a él, míralo.

Sa: No Zule esto es guapeton vamos que apenas atravieses esa puerta te dirán suegra.

Zu: Cállate, hola... Hola-el niño se calmó a escuchar la voz de su madre y  comenzó a mover su cabeza tratando de hallar el origen de aquella voz, Sandoval terminó su trabajo y se retiró después de darle las felicitaciones a Zulema. Mientras ella descansaba Saray lo vestía con un mono de osos y unos cuantos muy pequeños.

Sa:Joder que eres guapo tío-lo tomó en brazos-Mira Zule-esta se sentó y recibió al niño el cuál se quejó.

Zu: No quiere, lo lastimé ten Saray yo quiere estar conmigo.

Sa: no no fue un simple quejido no vez, ya está calmado.. Pero creo que tiene hambre.

Zu: joder y donde está la fórmula.

Sa: la traen mañana Zule, debes darle pecho.

Zu: qué? No yo no puedo ni siquiera produzco leche, bueno creo es decir yo..

Sa: Dicelo a tu blusa-señaló sus pechos, esta estaba manchada.

Zu: Joder, vale... - retiro el sostén y colocó al niño este por instinto comenzó a comer mientras colocó su pequeña mano en el pecho de la mujer, Zulema agarró esa mano y la besó...-No hay marcha atrás Saray ya está aquí- Voy a protegerte siempre pequeño mounstrito.

Sa: Vamos a protegerte, pero Zule no podemos llamarlo mounstrito toda la vida, ya sabes como le vas a poner?

Zu: Andrés una vez me habló que le gustaría que nuestro hijo se llamara Napoleón-rió mientras mordía su labio- es un nombre horrible.

Sa: Joder Gracias a dios, pense que le pondrías Napoleón.

Zu: Sera su segundo nombre en honor a su padre..... Pero se llamará Samuel.. Te gusta Samu-el niño dejo salir un pequeño suspiro mientras seguía comiendo.

Sa: El pequeño Samuel, mola comadre - lo que restó de madrugada se la pasaron hablando y contemplando al niño.

 Amor Egocéntrico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora