Cuando juntas a dos demonios fácil, pueden ocurrir dos cosas dos cosas, se unen y forman un equipo capaz de hacer todo y joder al mundo o se destruyen apenas el otro de la espalda.
Sandoval estaba en completo silencio mientras Zulema con los ojos cerrados sentía muchos nervios, el hombre finalmente habló.
San: Bueno quieres escuchar las buenas noticias primero o la mala?
Zu: Lo miró- que puede tener esto de positivo habla.
San: Bueno efectivamente estas embarazada estas a punto de cumplir los dos meses, escucha-los latidos del bebé sonaban altos y constantes-la mala tienes menos de una semana para decidir si interrumpes el embarazo.
Zu: No tengo que pensar nada, quiero la pastilla damela ya.
San: No es tan fácil, debo hacer la orden estaría aquí en tres días.
Zu: Vale, no comentes nada o te juro que termino lo que Saray inició-vi en medio de sus piernas, limpió el gel y salió, con una mano en su vientre y los ojos bien abiertos, llevaba al hijo de Andrés en su vientre, caminando se topó con Saray.
Sa: Que pasa Mora?
Zu: estoy embaraza Saray-sus ojos se humedecieron-No voy a tenerlo, no puedo....
Sa: zule.....
Zu: Nada de Zule, Sandoval traerá la pastilla en unos días, no puedo ser madre Saray, no tengo ese instinto, no puedo cuidarme yo misma menos a una criatura tan frágil.
Sa: Piensatelo bien Mora, ese niño es lo que te queda de Andrés... Porque auque nunca me los has dicho, se que lo quisiste mucho...-Zulema hizo una mueca.
Zu: Callate y abrace por favor.
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Sa: Se que vas a tomar la mejor decisión-esa misma tarde Zulema mandó a una de las reclusas al hospital, al parecer solo quedaba un pastelillo y ambas lo querían, la chica salió en una ambulancia con un tenedor en el hombro mientras Zulema estaba en aislamiento.
Zu:Mmjmm.... Mmjmm-tarareaba una canción mientras inconscientemente hacía círculos en mi vientre al darme cuenta de tal acción la retiré rápidamente, me apoyé sobre mis hombros mirando el leve bulto que se se formaba en mi vientre.-No te hagas ilusiones, no conocerás este mundo.... Joder que es horrible para personitas como tú, no quiero que nomas nazcas veas barrotes y el puto color amarillo, además estuviste conmigo... Pero de cierta forma me acompañaste en todo lo que pasó, que mierda le estoy hablando a un cúmulo de células-apagó la luz y decidió dormir un poco, pero esa pequeña siesta se hizo larga y cuando se dio le estaban entregando el desayuno, tomó la bandeja y sentó en la cama, la avena parecía vómito y el platano ya estaba malo, intentó meter una cucharada en su boca pero inmediatamente sus ácidos gástricos subieron y fue corriendo al vater donde vómito, terminó y limpió su boca, se sentó en el suelo y tocó su vientre.
Zu: Esto no va a funcionar si sigues así, tengo que comer entiendes.... Tenemos... supongo que también te estas muriendo de hambre así que colabora un poco.-al parecer el pequeño cúmulo de células como ella lo llamaba entendió perfectamente sus palabras pues pudo comer la avena.
Paso el día aburrida, hasta que nuevamente llegó la noche, mañana por fin saldría de aislamiento, además mañana Sandoval le daría la pastilla, durmió con un sentimiento extraño en su interior, pero lo ignoró, ese niño no podía nacer, lo tenía muy claro que podía ofrecerle? Un mundo encerrado? Ni siquiera estarían juntos porque a los dos años el niño se iría con una familia adoptiva mientras Zulema cumplía condena, a diferencia de Saray ella no saldría pronto, amaneció y está vez no hubo problemas con el desayuno, terminó de comer recostó su espalda a la pared y sin ser consiente empezó a hablar con el bebé.
Zu: tu padre era un terco, siempre quería ser el centro de atención-rió- la única vez que lo vi un poco nervioso fue cuando le puse una serpiente en el cuello, se puso pálido pálido como una hoja de papel, esa noche.... Bueno se puede decir que llegaste tú-se puso sería-Después fue cuando las cosas se complicaron y el se quedó en el desierto-miró su vientre-Lamento que no puedas conocerlos.... Joder Saray tiene razón eres un pedazo de él.-acarició su vientre y estuvo en silencio, en la tarde uno de los guardas la sacó de aislamiento, iba apresurada para mi celda cuando Sandoval me llamó.
San: Zulema puedes venir un momento a enfermería por favor.
Zu: Sandoval tengo poco tiempo y... - el hombre tenía entre sus manos la pastilla.
San: Misoprostol, debes tomartela con el estómago lleno, ya desayunaste?—esta asintió-bueno tengo allá atrás hay botellas de agua.
Zu: Dame la pastilla, no pienso tomarmela aquí-Sandoval arqueo su ceja.
San: Y piensas que dejaré a una presa salir con este tipo de medicamento?
Zu: No, no a cualquier presa, pero a mi sí-tomó la pastilla y salió rumbo a su celda, donde Saray estaba estaba doblando las sabanas.
Sa: Mora, pense que salías en la tar...-Zulema botó por el vater la pastilla y volteó a ver a Saray que tenía una sonrisa.
Zu: Vas a ayudarme en todo lo que necesite, estarás el día del parto dándome la mano mientras puteo a todo dios, me ensañaras como cambiar un pañal, como preparar la Fórmula, como bañarlo y lo más importante pasaras las madrugadas despierta conmigo cuando lloré, le enseñaras a hablar a decir puta y todo lo que necesite, estarás para nosotros... - dijo todo eso tan rápido que tuvo que tomar una gran bocanada de aire.
Sa: Que si Zule que si,-corrió a abrazarla-Ese frijolito y yo seremos uña y mugre, vamos que la que se atreva a tocarle un pelo saldrá cagando leches de aquí-se arrodilló-elegiste bien he mounstrito-se paró.
Zu: Tengo miedo Saray, nunca pensé en esto-señaló su vientre.
Sa: Así como estuviste para Estrellita y para mí, yo estaré pa' vosotros, vamos por una manzana-la abrazó por el cuello y salieron rumbo al comedor, se venía una etapa completamente desconocida para Zulema Zahir.
