Capítulo XVI

185 18 6
                                    

Entré al cuarto donde las chicas estaban terminando de arreglarse, la chica que me habló hace unos minutos me miró por el espejo y sonrió.

X: Viniste.... Vas a bailar con nosotras?

Zu: Sí, muéstrame la coreografía y hagamos esto rápido-Una de las chicas dio la señal para que maquillaran a Zulema, no tenían que hacer mucho, pues la mora ya tenía un delineado perfecto, solamente añadirían un par de perlas en su rostro, un poco de labial y listo, mientras hacían eso la mora observaba la coreografía por el móvil.

X: Que te parece?

Zu: Buena-las chicas se emocionaron-Si van a competir con niñas de 5 años-las risas pararon y las mirabas se centraron en Zulema que estaba lista con el maquillaje- A ver, saben seguir instrucciones?—todas asintieron-Bueno entonces quiero que se olviden de toda la coreografía y me sigan, se ve que tienen un don, solo tienen que pulirlo vale-todas con una sonrisa asintieron-Bien, cuál es mi traje?

X: Aquí tienes-le entregó un brasier rosa decorado con perlas rojas, un velo y una enagua.

Zu: Joder, no tienes algo menos...

X: Sexi?

Zu: Patético iba a decir.

X: Veré que más traemos-comenzó a buscar en los maletines, encontró uno exactamente igual pero negro con cristales, se lo dio a Zulema y esta parecía contenta, al verse en el espejo se veía diferente, se sentía bien de alguna extraña manera le gustó lo que veía y pensó que tenía el accesorio ideal para completar su vestimenta, fue hasta su habitación donde bien guardada estaba la tiara, era el accesorio perfecto, volvió al salón con las mujeres que estaban listas, notó una especie de baúl en una de las esquinas, era alargado y tenía mucha seguridad.

Zu: Que hay ahí?—otra chica se aproximó al baúl y lo abrió-Wao creo que las sobreestime un poco no son tan principiantes como creí, la usaremos.

Gota a gota se iba formando un charco de sangre en el suelo de aquella bodega, tres dedos le faltaban, uno cortesía de la morocha y los otros dos por parte de aquel cínico hombre de ojos verdes y acento extraño. El cadáver de su amada estaba a su lado mientras lloraba implorando que se detuviera tal tortura, una hora después de despedirse de Zulema y Andrés Jorge y Katthy iban hacia un rumbo desconocido, claro estaba que todo lo que le había dicho a Zulema era mentira, jamás llamaría el helicoptero y dejaría que se pudrieran, pero no contaba con que Gandia estaba cerca, iban ya bastante lejos del hotel cuando una camioneta impactó con ellos, y al despertar Katthy estaba muerta y Gandia tenía un cuchillo entre sus manos, el estaba atado con las manos estiradas sobre una mesa.

Jo: QUE LE HICIERON, KATTHY, KATTHY MI AMOR.... - lloraba.

Ga: A mi no me ha dado tiempo de matarla, murió en el choque-me senté frente a él-Están en el hotel?—El chico no respondió, tomó el cuchillo y cortó otro dedo.

Jo: Aaaaah MIERDA... - comenzó a llorar más.

Ga: Están en el hotel?

Jo: Sí.

Ga: Por que no se han ido?

Jo: Respiraba fuerte, además del dolor tenía mucha ira.

Ga: Dije POR QUÉ NO SE HAN IDO-otro dedo fue cortado.

Jo: Aah, están esperando un helicoptero que llegará mañana, no se a donde los llevará solo se que se van mañana.

Ga: Seguro no sabes hacia donde van?

Jo: No, yo solo tenía que conseguirlo y ellos elegían el destino-Gandia se paró y caminó hasta estar junto al chico.

Ga: Te creo e imagino que también quieres vengarte de ellos no? Es decir por su culpa murió Katthy, Ramala..... -hubo un silencio y una lágrima amenazó con salir pero Gandia no lo permitió-Y ahora solo tienes dos deditos, dime que tienes sed de venganza-Jorge lo pensó, tenía su cabeza gacha, pero rápido miró a Gandia a los ojos.

Jo: Quiero que paguen.

Ga: Muy bien.... Dime toda la información acerca del helicoptero, debemos empezar por ahí-después de unos 20 minutos Jorge le contó todo, el color del helicoptero, a que hora llegaría todo-Es todo?

Jo: Sí es todo lo que necesitas saber.... Ahora cuál es el siguiente paso?

Ga: El siguiente paso es que te reúnas con tu amada-Le dio señales a una de los hombres y camino a la salida

Jo: NO NO GANDIA HIJO DE PUTA-un crujido lleno aquella habitacion, el hombre el partió el cuello-Gandia sonrió levemente.

X: Está hecho señor, cancelamos el helicoptero?

Ga: No, el helicoptero llegará, creeme que va a ser placentero verlos cuando llegue el helicoptero y no puedan subir, todo sigue igual, prepárense partimos en unas horas.

An: Ese es el plan, no quiero que le digan nada a Zulema vale, es solo por si las cosas se complican, no quiero cobardes quiero guerreros-Todos los serbios asintieron.-las mujeres comenzaron a salir y se colocaron de espaldas a los chicos, Zulema no estaba entre ellas, unos segundos después salió en su traje negro, Andrés tuvo de parpadear varias veces para asimilar lo que veían sus ojos, la piel blanca de la mora combinaba perfectamente con el traje negro, está sonrió cuando vio al hombre se volteó, se puso en posición.

La música comenzó a sonar, Andrés no lograba descifrar que instrumento era, simplemente se centró en el movimiento de caderas de Zulema las cuáles se movían exactamente acorde a la música, claro habían más personas en la habitación pero para ellos, solo existían ellos, se voltearon y con el velo cubrieron la mitad de su rostro dejando ver unicamente sus ojos, se fueron acercando a los hombres sin perder el ritmo, atado a sus caderas llevaban un cinturón con que sonaba con nada movimiento.

La poca luz que había en el sitio hacia que toda la atención se centrara en las asombrosas siluetas de las mujeres, los serbios estaban sin palabras observando a cada una de las mujeres, Andrés por su parte seguía a Zulema a donde ella fuera, las mujeres hicieron una fila con Zulema al frente donde hicieron una danza con sus brazos después cada chica se movió hacia donde estaban las velas, mientras Zulema seguía bailando, la música estaba en su punto máximo y de un pronto a otro se terminó, justo en ese momento las mujeres apagaron las velas quedando todo completamente oscuro, los hombres aplaudían mientras Andrés buscaba desesperadamente a Zulema, necesitaba tenerla entre sus brazos, hizo un show admirable, sus mejillas estaban rojas, estuvo por pararse para  ir a buscar a la mora cuando por su espalda sintió unas manos, las velas nuevamente se prendieron, las mujeres seguían bailando pero Zulema no estaba, Ahí comprendió que estaba tras él.

An: Joder Zulema.......-las manos seguían subiendo y bajando hasta que rodearon su pecho y comenzaron a desabotonar los botones de su camisa, el calor fue aumentando en el cuerpo de Andrés, trataba de concentrarse cuando dejó de sentir aquellas manos, nuevamente Zulema iba hacia el frente pero no iba sola, una boa la acompañaba medía alrededor de dos metros, eran la combinación perfecta, un escorpión y una víbora, los serbios se asustaron bastante, Zulema se acercó lentamente hacia Andrés, se arrodillo mientras que con sus manos jugaba con la serpiente, tomó la mano del hombre y la unió a la suya, el animal lentamente se fue enrrollando en el brazo de Andres, Zulema se acercó a su rostro y dejó un pequeño beso en la nariz de Andrés, se acercaba el final de la función, la serpiente había abandonado el cuerpo de la mujer y se encontraba en los hombros de Andrés, Zulema permanecia de rodillas, fue contorsionando su cuerpo hasta que su espalda tocó el suelo mientras hacía movimientos con sus brazos, a la vista de Andrés el vientre de Zulema era algo maravilloso, la música paró y la mora subió nuevamente encontrándose con la mirada de Andrés, respiraba agitada debido al baile y claro a la adrenalina que sentía en ese momento.

An: Eres....

Zu: Calla.. - En la mirada de Zulema había calor, lujuria, pasión que necesitaba ser liberada y Andrés lo comprendía perfectamente, pues él estaba en la misma situación.

 Amor Egocéntrico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora