24.

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Después de haber pasado toda la tarde junto a Zayn, Louis y Harry, era momento de volver a su casa.

Al entrar el auto al garaje vió el de su madre y supo que se encontraba en casa, así que estaría indagado por preguntas de su progenitora en cuanto traspasará la puerta de entrada.

Dicho y hecho, una vez que cerró la puerta detrás de él; la rubia lo arrulló entre sus brazos y después de llenarle el rostro de besos, lo tomó de la mano y lo guió hasta la sala en donde ambos se sentaron en el sofá.

— ¿Y bien, mí amor? ¿Como fue todo? ¿La pasaste bien con Zayn? — atacó la ojiazul con cuestiones.

— todo estuvo bien, mamá. — contestó para luego sonreírle. — ¿Adivina qué?

— ¿Que? ¿Que pasó?

— le he pedido a Zayn que sea mí novio y él aceptó.

Y si, él realmente esperaba esa reacción de su madre, pero está no le dió el tiempo necesario para poder tapar sus oídos antes de que un chillido agudo saliera de su boca después de formular aquellas palabras.
La mujer se levantó de su lugar dando saltitos de felicidad y mover sus brazos en modo de victoria.

Liam solo sonrió ante aquello y dejó que la mujer se cálmase antes de volver a su lugar.

— ¡Ay, por Dios! ¡Ay, por Dios! ¡Lo sabía! ¡Sabía que eso pasaría! — chilló, su rostro se hallaba algo rojizo de la emoción. — ¡Ay estoy tan feliz! ¡Es una hermosa noticia!

Rió bajito y asintió.
— lo es, mamá. Estoy muy feliz por tener un novio tan hermoso como Zayn lo es.

— ¡Hay que festejar esto, cielo! ¡Haré una cena familiar y así podrás presentar a Zayn como tu novio oficialmente!

— mamá, eso no es-

— ¡Cállate! ¡Haremos una súper velada, todo será perfecto! ¡Tengo que llamar a Trisha y así ponernos de acuerdo! — y se fue escaleras arriba murmurando cosas sobre hacer la presentación. Liam suspiró cansado, no podría contradecir a su madre, sería perder el tiempo, Karen Smith Payne nunca perdía una batalla, jamás.

Se resignó a ello y se tiró hacia el respaldo del sofá, cerrando sus ojos luego. Louis debía venir a su casa para hablar más tranquilos, ya que al parecer, Zayn se había enzañado en no dejar que Tomlinson esté cerca de él más del tiempo que el moreno creía y de tan solo recordar los celos de su pequeño bebé le llenaba el corazón de alegría.

Y hablando del motivo de los celos del menor, el mismo entró por la sala de su casa.

— ¿Tarde mucho? Es que Harry quería mostrarme unos ositos que Gemma le había traído de su viaje. — musitó el ojiazul tirándose a su lado en el sofá. — ¡Mamá Karen, ya estoy en casa! — gritó.

— ¡Ahora bajo, Boo Bear! — la respuesta de su progenitora se escuchó desde arriba.

— ¿Y cómo es eso que Zayn está celoso de mí?

Liam suspiró mientras una sonrisa se formaba en su rostro luego.
— eso, hoy cuando te llamé y tuvimos nuestro pequeño momento tierno, él se fue de la cocina y fue por eso que te dije que te vería luego, ¿Recuerdas? — el más bajo asintió. — bueno, fui tras él y lo encontré en su cama; dijo que estaba enojado y bueno... Dijo que fue porque no le gustó el hecho que te dijera que te amo.

— sucedió lo mismo con Harry cuando empezamos a salir, ¿Recuerdas? A él no le gustaba que viniera a tu casa y este contigo. Eso fue hasta que entendió que somos hermanos.

— es eso lo que intenté hacerle entender, pero al parecer no logré hacerlo ya que cuando llegaste, los celos reaparecieron.

— si, pero bueno, hay que entenderlo. Eres su primer novio, Liam. Él no sabe cómo manejar sus sentimientos y los expresa de la manera que le salen.

¿puedo abrazarte?. (ZIAM MAYNE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora