¿puedo abrazarte?. (ZIAM MAYNE)

38.

La noche había caído y la habitación era iluminada por la luz de la luna que entraba por la ventana, mientras ambos chicos permanecían acostados uno al lado del otro siendo reflejados por la misma, ya que daba justo a sus rostros.

El silencio era cómodo, estaban disfrutando de la grata compañía contraria, sus manos estaban entrelazadas y permanecían con sus ojos cerrados.

El silencio duró unos minutos más, hasta que el menor habló.

— cuando tengamos hijos, ¿Como te gustaría llamarlos y cuántos quieres que tengamos? — cuestionó en voz baja.

Payne abrió los ojos, girando su cabeza para ver el rostro perfectamente reflejado de su novio, creyendo firmemente que Zayn era un ser superior a todos los mundanos por su extrema belleza, no pudo agradecer más a su creador por haberle enviado a tan precioso ángel para él.

— ¿Quieres tener hijos conmigo, mí amor? — preguntó feliz.

El menor asintió.
— por supuesto que quiero, tres hijos, dos perros y un gato.

Payne rió dulcemente.
— eso me encantaría, bebé. — dijo  alegre por la respuesta de su pareja. — me gustaría tener una niña y dos niños, los llamaría Valentine, James y Javadd. — respondió la pregunta hecha por el moreno. — ¿Te gustan?

— me fascinaron. Se que los dos nombres de nuestros hijos serán por nuestros nombres segundos, pero ¿Por qué Valentine?

— así se llamaba mí abuela, Valentine Marie Mason. — dijo acariciando el dorso de la mano ajena con su pulgar.

Zayn acercó su cabeza al hombro de Payne, reposandola sobre el luego.
— es un hermoso nombre, bebé.

— lo es, cariño. ¿Y ti cómo te gustaría llamarlos?

— podría elegir los segundos nombres. — dijo el menor. — James Matthew y Javadd uhm... — frunció el seño, poniéndose de costado para ver completamente a su novio. — no encuentro otro nombre que combine más que el mío.

— ¿Zayn Javadd junior? — el castaño sonrió. — creo que podríamos llamarlo de esa manera.

— por el momento, cuando piense en otro nombre te lo diré.

Liam asintió y busco el calor corporal del moreno, acurrucandose más a él. Se quedaron en silencio nuevamente, sus ojos cerrados, las respiraciones relajadas y el sueño poco a poco apoderándose de sus sistemas.

Fue entonces cuando el menor murmuró, cayendo lentamente en los brazos de Morfeo.
— ¿Liam?

Payne no abrió sus ojos, solo hablo igual de bajo que el moreno, también perdiéndose en la neblina del sueño.
— ¿Si, mí amor?

Y entonces... Zayn susurró, bajo pero audible, tan puro, inocente y dejando que su corazón expresará lo más anhelado.

— Cásate conmigo.

(...)

Un movimiento a su lado, fue lo que hizo que sus párpados comenzarán a revolotear, de pronto, sintió como el lugar contrario se vaciaba y luego unos pasos, dejando el sonido de la puerta cerrarse posteriormente.

Abrió sus ojos, un poco desorientado, hasta que la nubosidad se despejó completamente de su vista; el recuerdo de la noche anterior lo atacó al instante, sonriendo como un idiota al recordar lo sucedido.