22.

3.3K 445 485
                                    


Se encontraban en la cocina, era hora de preparar el almuerzo y mientras Zayn estaba sentado en una de las banquetas, Liam se encargaba de preparar los ingredientes para marinar la carne.

— entonces... Cuando tú vienes a verme o algo, yo debo preguntarte cómo estuvo tu día y lo que haz hecho y lo que no ¿Verdad?

El moreno preguntó, ellos estaban estableciendo algunas reglas que debían seguir o más bien, aconsejandose el uno al otro para poder tener una fructífera relación.

Terminando de picar el ajo, Liam asintió.
— claro... O también cuando tengas alguna duda o no entiendas algo que yo digo puedes preguntarme, bebé.

— bueno, deberíamos hacer una lista de nuestras reglas, tú dijiste que eso sería una buena idea.

— lo es, es una brillante idea, cariño. Así que podríamos hacerlo después de-

No terminó de formular la palabra ya que el moreno había salido disparado de la cocina en cuanto sus piecitos tocaron el suelo.

— ¡Amor, no corras, te vas a caer! — regañó aunque obviamente no fue escuchado por el menor.

Lavando sus manos en el fregadero las secó y cuando se dispuso a salir de la cocina, sin previo aviso el azabache llegó corriendo como un torbellino haciendo que Liam no pudiera esquivarlo a tiempo y chocando sus cuerpos, el impacto los hizo caer de espaldas, golpeando el suelo posteriormente.

— Liam... ¿Por qué no te fijas por donde caminas? — musitó Zayn sentándose lentamente.

Liam lo imitó, sobando su espalda como pudo y lo miró incrédulo.
— no creí que vendrías corriendo contra mí.

— y yo no creí que te cruzarías en mí camino. — quejó. Lentamente se levantó y recogió lo que se había caído de sus manos cuando chocó con su novio. — tiraste mis cuadernos, tendrás que arreglarlo si se dañaron.

— creo que me lastime el trasero. — quejó Payne sobándose. — ¿Tú estás bien? ¿Te lastimaste?

— uhm... — comenzó a tocar las partes de su cuerpo; su cabeza, rostro, brazos, su pecho, abdomen, espalda, trasero y piernas. — no, no me he roto nada, estoy bien.

Liam sonrió.
— no se dañaron tus cuadernos, bebé. — espetó revisando los mismos. — ¿Que harás con esto?

— tu cuaderno será el Rojo, el mío el amarillo; tu escribirás allí tus reglas. — señaló. — yo escribiré las mías aquí y cuando terminemos nos mostraremos y así estudiaremos lo que debemos hacer y no hacer para no enfadar al otro. ¿Esta bien, bebé?

Liam no podría negarse a nada mientras Zayn usase aquel término con él.
— está bien, amor. ¿Quieres hacerlo ahora?

— por supuesto.

— bien, hagámoslo.

Ambos se encaminaron hacia sus anteriores posiciones, Liam del lado de la isla donde tenía todas sus preparaciones; Zayn se sentó sobre la banqueta, apoyo su cuaderno, abriéndolo y luego, con su bolígrafo en mano, comenzó a escribir.

Liam lo observó con amor mientras terminaba de hacer el almuerzo y en sus pequeños tiempos libres escribió algunas cosas.

De hecho, él no había pensado en muchas reglas. Solo lo que el creía más importante y básico para hacer funcionar su trato, ya que estaba seguro que su relación con Zayn no sería tan difícil de llevar.

Por otro lado, Malik se hallaba sumamente concentrado en sus reglas. Cuando Liam creyó que ya había terminado, al verlo terminar los renglones, se sorprendió al ver como el menor giraba la página para ponerse a escribir aún más sobre el espacio vacío.

¿puedo abrazarte?. (ZIAM MAYNE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora