Diego me tomo de la mano y me llevo tirando hasta las escaleras, comenzó a subirlas y casi no podía subir mis pies porque el subía de a dos escalones y mis piernas diminutas casi no alcanzaban a tocar los peldaños.
Mire a Samantha de reojo que miraba a Lucas entre enfadada y babeando.
Samy es creativa así que se las va a ingeniar en qué hacer con él, luego me contara.
Llegue al segundo piso con Diego y me llevo a su habitación. Tenía una cama con colcha negra y dos ventanas que iluminaban, la habitación era un cuadrado grande que tenía un escritorio al lado derecho de la cama y un estante con libros y discos. En el costado del estante hay medallas de competencias, pero no sé de qué exactamente. Diego me estaba mirando mientras yo inspeccionaba su habitación detalladamente.
Diego se acercó a mí, acortando toda la distancia que teníamos. Puso una mano en mi nuca y con la otra me levanto rodeando mi cintura.
Nos miramos a los ojos, sus lindos ojos verdes con café me ponían tan nerviosa. Pase mis manos por su puntiagudo cabello hacia atrás y adelante, se sentía como pelitos finitos que al mover la mano hacia una dirección pinchaba y hacia la otra era suave.
- Ya no podre acariciar tu cabello. –dije haciendo pucheros falsos. –
- Lo hubiera pensado mejor antes de cortarlo. –me hizo un pecho falso también. –
- No. – respire. – Se la razón por la que lo hiciste y era lo correcto, además...-hice una pausa. – Puede ser que te veas bastante bien. –le sonreí divertida. –
- Te dije que lo admitirías. –me sonrió dejándome ver sus dientes. –
- No admití nada, dije que puede ser.
Diego seguía sonriéndome divertido, pero me acerque a su oído y le susurre.
- ¿quieres besarme?
Su cara dejo de sonreírme y se sonrojo levemente. Me miro con mucha intriga, curiosidad y cariño.
Dios, Diego sonrojado es lo más. Y que sus ojos me miren así me revuelve la cabeza.
- ¿Tú quieres? –me pregunto susurrando en mi oído. –
- Yo si quiero. ¿Y tú? –le susurre. –
Me sonrió como si la respuesta fuera obvia y corto todo espacio entre nuestros labios y los unió con los míos haciendo una suave presión. Cada vez que me besaba era mejor que el anterior, y la sensación de tenerlo junto a mí, es perfecta.
El presiono la mano en mi cabeza hacia el para tener más control en el beso, me gusta tanto que cuando después de abrir los dos la boca, al momento de cerrarla chupa mi labio inferior. Es como profesional o algo así, pero que sea tan fluido y que entendamos los dos el movimiento es tan satisfactorio. Definitivamente lo deseo, deseo a Diego, él me ha vuelto loca.
Su lengua acariciando la mía entre nuestras respiraciones y calor corporal, su mano en mi nuca.
Puse mis piernas alrededor de su cintura abrazándolo con ellas.
Diego puso sus dos manos en mi cintura y tome su rostro mientras me llevaba a su cama.
Él se sentó en la cama conmigo encima de él y comenzó a pasar sus manos por mis muslos acariciándolos mientras seguía besándome. Baje mis labios y bese su cuello, Diego estiro su cuello mirando hacia el techo con sus enormes manos en mis nalgas, mientras las apretaba ligeramente moviendo mi cuerpo presionando levemente su pantalón.
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DIEGO: Deseo que te quedes conmigo [COMPLETA]
RomanceHistoria de amor y odio, llena de pasión, conexión, sentimientos y emociones. (Contiene escenas +18) Diego es un chico que sufre depresión y problemas familiares, todo comenzó un poco antes de que su hermano intentara suicid...