MI POEMA [Namjoon] [TIMD] / Libro II

Capitulo Final: Nuestro Poema

El abogado miraba la puerta de su oficina con nostalgia, inhalo un poco de aire y cerró sus ojos para darse fuerza a sí mismo antes de apretar el pomo que lo haría recordar a la persona que en algún momento lo amó y se lo dijo en su último suspiro antes de desfallecer sobre sus brazos.

Entró y quiso llorar solo pisar la alfombra, dejó un maletín en el suelo y caminó alrededor de ese lugar en donde se conocieron por primera vez oficialmente.

Sus ojos miraron el sofá donde salían leer y conversar. Las ventanas por las que veían la ciudad.Las pequeñas macetas que ella solía cuidar y donde las plantas ya no estaban.
Todavía yacían algunos papeles sobre la mesa del centro en donde revisaban su caso.Luego su mirada se posó en su escritorio y en el objeto que buscaba.

La esfera de nieve que le regaló la navidad pasada. Caminó hasta ahí y la tomó con una pequeña sonrisa surcando sus labios, pero con  tristeza su mente trajo a él aquel momento.

"Haeri estaba tan metida en formar la cara de su muñeco, que ni percato cuando el abogado se alejó de ella y minutos después  casi saltó cuando un dedo intruso tocó su hombro.

— Mi regalo de navidad  — fue lo que dijo Namjoon poniendo sobre sus palmas una esfera de nieve — es.. lo vendían cerca — dijo al verla tan metida viendo la pequeña bola, tal vez no le gustó—  no sabía que estarías hoy con nosotros y no prepare un mejor regalo-

Pero sus palabras quedaron atascadas cuando la pelinegra prácticamente se lanzó sobre él

— Es la primera vez que me obsequian algo.. — escuchó el más alto en su oído — me decían que no merecía ningún regalo."

— Te merecías más que un regalo. — musitó bajito acariciando con sus dígitos el cristal— te merecías el mundo entero

Ya había pasado un tiempo desde eso y ocurrieron tantas cosas que podía decir que el destino era cruel, muy cruel por haberlos unidos en esas situaciones.

Él siempre quiso conocer a su alma gemela desde que supo de la existencia de una flecha del destino y a pesar de que está desapareció, aún quería conocer a esa persona que sería la protagonista de sus poemas, su inspiración y rayo de vida.

La conoció cuando más perdido se sentía, cuando ya estaba dejando la idea de encontrar el amor verdadero luego de su decepción, pensando que nadie amaría a alguien como él y lo apreciaría con todo y sus torpezas. La encontró sin querer  y tal como alguna vez le dijo Young Mi.

"La encontrarás Namjoon, te lo aseguro. Cuando menos lo esperes, tal vez en el caso mas extraño o un lugar distinto, pero te toparas con tu alma gemela y aunque no te percates, ambas almas se encargarán de llegar al corazón y la mente del otro"

Y así fue, porque ambos llegaron al corazón del otro, se enamoraron como si fuera la primera vez y un poco rápido a la vista de cualquiera, sin embargo, lento para sus almas que se reconocieron desde el instante en que sus ojos se encontraron siendo niños.

Se perdieron en el camino de sus vidas, se buscaron sin saberlo y se hallaron por una casualidad.

Namjoon logró saber y sentir lo que era amar con desinterés e incertidumbre, con protección y esa incondicionalidad por ella, capaz de dar su vida si se lo hubiera permitido. Y él sabía que su alma gemela lo amó de la misma manera o quizás de una mejor.