Al día siguiente me levanté más temprano de lo usual; me bañe, me vestí y bajé para desayunar y quien me esperaba abajo era mi madre
—Buenos días hija, te hice el desayuno.—exclamó con una gran sonrisa en su rostro.
—Oh gracias.—exclamé para después sentarme a la mesa a comer. Luego ella se sentó al frente mío
—Hija, hoy en la mañana llamó Isela y nos invitó a la playa a ti y a mi que por que ellos irían ¿Qué opinas?
—Suena genial la idea, nunca eh ido a la playa y sería una excelente oportunidad para ir a conocerla
—Está bien. Pues no se diga más, nos vamos a la playa.—exclamó con entusiasmo
—Si, y ¿Cuando nos vamos?
—Nos vamos mañana
—Oh genial. Estaré lista, bueno ya me voy que se me hace tarde para la escuela, adiós.—le dí un beso en la mejilla
—Oh, esta bien. Adiós hija
Salí de casa rumbo a la escuela. Y cuando llegué me encontré con mi amigas Jennifer y Montserrat a quienes tenía mucho tiempo que no veía
—¡Vanessa. Hola!—gritó Monserrat quien corrió a darme un abrazo junto con Jennifer en cuanto me vieron
—Hola.—me alegré al verlas
—Supimos lo que te pasó, de hecho fuimos a verte al hospital pero no nos dejaron pasar por que estabas al parecer en coma en terapia intensiva ¿Cómo te sientes?— preguntó Jennifer preocupada, de hecho me sorprendió lo que me dijo ya que nadie me comentó nada de que ellas habían estado en el hospital
—Pues me siento ya mucho mejor y gracias por preocuparse
—Pero cuéntanos ¿Cuándo saliste?
—Pues he estado en mi casa y salí hace unos días
—Pues fuimos a tu casa y no había nadie
—Es que no estaban mis "padres"
—Pues fuimos hace 3 días y no, no había nadie
Me quedé pensando por un segundo si debía de contarles lo sucedido ayer. Supongo que merecen saberlo, son mis amigas
—Es que. . . salí en busca de mi verdadera madre
—¡¿Tu verdadera madre?!—contestaron al unísono
—Si, yo. Olvidé decirles que no soy hija de Isela
—¿Y entonces. . .?
—Pues que busqué a mi madre, hasta que finalmente la encontré y ahora vivo con ella
—Oh wow, pues . . . vas a tener que contarnos todo lo que ha pasado con lujo de detalle he y especialmente lo de Santiago y tú
—¿Santi y yo?—me sonrojé
—Si, y no te hagas hace mucho que nos enteramos que tú y el andan y también estaba en el hospital cuando fuimos a verte
—Lo se, es un lindo.—sonreí—si ya somos novios y para el ya tenemos mucho pero para mi es poco ya que yo estaba en coma y para mi es como si solo hubieran pasado días pero no, fueron 6 meses y pues me cuesta trabajo acostumbrarme a ello
—Pues felicidades, por fin se les hizo estar juntos.—sonrió Jennifer
—Lo se y gracias
—Es un buen partido para ti y oye ¿Crees que Esmeralda trate de interponerse entre ustedes?
—Ay amigas, tengo tanto que contarles.—suspiré
—Pues cuéntanos, no nos tengas en suspenso
—Y lo haré aunque, es una larga historia. Pero si les contaré todo pero después, primero quiero hacerles una invitación
—¿A donde?
—Pues. . . ¿Les gustaría ir a la playa?—sonreí
—¿Quien irá a la playa?—exclamó Santiago quién se apareció de un momento a otro sin avisar y me dió un beso en la mejilla
—Iremos toda mi familia y pues quisiera invitarlas ¿Qué dicen?
—¿Y a mí no me vas a invitar Vane? —exclamó Santiago
—Claro que si, tú también estas invitado
—Pues claro que si Vanessa, iremos —contestó Jennifer
—Yo también iré—añadió Santiago
—Bueno mañana a las 10 de la mañana paso por ustedes para irnos
—Ok. Y bueno ya vamonos a clase que se nos hace tarde—sonó el timbre
—Si ya vamonos
Entramos a clases, después ya que era hora de la salida fui a casa a arreglar mis maletas para el viaje. Me tardé mucho ya que se me hizo noche escogiendo que llevaría y que no. Y ya que terminé, sin mas me fui a dormir esperando con ansias el día siguiente que llegó en un abrir y cerrar de ojos.
—Vanessa, hija ya levántate que se nos hace tarde para irnos a la playa —gritó mi madre desde la otra habitación. Y en ese instante me levanté de volada, me arreglé, desayuné y metí en mi maleta las últimas cosas que llevaría ya que el viaje sería de unos días. Para antes de que dieran las 9:30 am yo ya estaba en la puerta de mi casa junto con mi madre esperando a que llegaran por nosotras. No pasó mucho tiempo para que eso sucediera, llegaron rapidísimo
—Hola, ya llegamos.—grito desde el auto mi hermana Catalina indicándonos que nos subieramos al auto
—¿Oigan podemos pasar por mis amigas y mi novio?—exclamé ya en el auto
—Si claro. Vamos.—contestó Daniela
Ya que fuimos por ellos, de ahí nos pusimos en camino a la playa. No habíamos llegado todavía y ya me estaba divirtiendo, todo era felicidad; nunca había ido a la playa y jamas pensé ir. De pronto el viaje se me hizo eterno ya que solo veía que la carretera era interminable, no podía esperar a llegar a la playa. Pero luego de unas horas de viaje en auto por fin llegamos, nos bajamos del auto y nos fuimos al hotel para después salir a ver la playa. Y ya estando ahí nos la pasamos super fenomenal; reímos, nos metimos al mar, pusimos música a todo volumen, hasta hicimos un castillo de arena. Sin duda nos divertimos por horas. Jamás me había divertido de ese modo
—Que hermosa es la playa, gracias por invitarnos—sonreí
—De nada Vanessa, ya sabes que eres nuestra hermana.
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Quiéreme Si Te Atreves
RomantizmÉl, un chico tan normal. Hasta que apareció ella en su camino. Ella, una chica depresiva, con un pasado que la atormenta hasta él día de hoy. El, luchará por su amor Ella, luchará por mantenerlo lejos ¿Ambos se amarán o esto terminará en odio? [Nota...