CAPITULO 7

4 0 0
                                    


-Nathanael necesito saber que es lo que esta ocurriendo – fueron las palabras que salieron de la boca de Zoey – por favor necesito entender todo esto que está sucediendo.

-Debes relajarte un poco y respirar – trato de razonar su amigo – Zoey creo que estas entrando en pánico, respira o le pido a Nathanael que haga esa cosa nuevamente – la amenazo David preocupado por su estado.

- ¡Lo necesito ahora! – grito Zoey exaltada sin importarle las palabras de David.

-Tu amiga tiene carácter David – escucho la voz divertida de Nathanael, esa voz atrayente que le ayudaba a calmarse además de sentir el peso del conocimiento en ella, como si ya hubiera vivido muchas vidas y todo lo que sucedía a su alrededor no fuera la gran cosa.

- Tu padre me ha pedido que te dijera que me enseñaras tus alas y me dejaras tocarlas – se escuchó decir Zoey – bueno espero signifique algo para ti, porque acabo de tener otro perturbador sueño.

Vio como el color se dreno del rostro de David y como este se movía quedando ligeramente más cerca como en posición de apoyo intuyo.

- ¿Enseñarte mis alas? –la cuestiono el eludido – estas completamente loca si quieres tocarlas – su voz le hizo sentir frio en todo su cuerpo.

-bueno en realidad no se lo que significa – acoto en su defensa – dijo que esa era mi prueba de que esto es real, lo que carece de lógica – trato de explicarse Zoey – para mí en este momento lo único real es que estoy en muchos problemas. – dijo moviendo sus manos con un ademán de frustración.

-De acuerdo – acepto Nathanael, lo vio iniciar a quitarse su abrigo – solo no grites muy fuerte, tengo oídos sensibles – el tono de su voz sintió la ironía de la situación.

- ¡padre celestial! – exclamo ella – ¿tienes un tatuaje o algo parecido en la espalda?

Vio como el abrigo fue tirado cerca de ella, entonces tuvo que llevar sus manos a su boca, recordando que el pidió que no gritase, con el frente a ella le observo girarse muy despacio, su camiseta era normal si obviaba que contaba con dos aberturas en la parte superior de su espalda mientras se giraba estuvo segura que murmuro unas palabras en un lenguaje desconocido para ella.

Como si se tratase de magia su espalda se ilumino con millones de pequeñas partículas de luz dorada que hizo que su respiración de atascase en su garganta realmente estaba presenciado un espectáculo de una vez en la vida, cuando el brillo se difumino en la espalda de Nathanael habían dos alas extremadamente grandes bueno todas aquellas imágenes de ángeles ahora le parecían sosas si las comparaba y las descripciones en los muchos libros que había leído no le habían preparado para nada tenía frente a ella, alas angelicales con una belleza que estaba segura nada sería capaz de describir.

Y si tratara de describirles diría que las tonalidades doradas estaban elaboradas con oro y este a su vez se degradaba en cada una de sus plumas de la forma magistral hasta casi llegar al blanco un toque sin duda místico e irrefutablemente un signo de poder en su opinión.

-Bueno esto definitivamente no viene con descripción – acertó a decir David rompiendo el silencio que se había instalado en la pequeña sala del departamento.

-Bueno me siento encantado de ser un animal en exhibición – dijo Nathanael impacientándose – podrías terminar con esto pronto.

-Honestamente no soy capaz de moverme – acertó decir finalmente Zoey.

-De acuerdo lo hare por ti – dijo Nathanael mientras se acercaba a Zoey – dame tu mano.

El contacto de su mano en el momento en que toco su piel casi la hace brincar en su puesto, sentía con su toque un poder que provocó un temblor de miedo en todo su ser, sin embargo, duro un efímero momento. Cuando bajo su mano toco la superficie de su ala casi podría jurar que su cuerpo empezó a hormiguear sobrecargado de sensaciones, sus plumas extremadamente suaves al tacto y visualmente tan fuertes, al deslizar su mano sobre las plumas decidió tocar las que tenían tono tan dorado que emitían luz, entonces al desplazar sus dedos por los bordes de estas plumas de sus dedos broto sangre que mancho la imagen etérea del ala de Nathanael.

LA BRUJULADonde viven las historias. Descúbrelo ahora