Hasta que te vuelva a ver ||THIAM||

¿Theo a cargo?

NARRA THEO

-Bueno, ese chico Lahey parece ser un buen chico, y tú eres muy responsable. Claro que puede venir, mientras que cuides a Liam y la casa no esté hecha un desastre cuando llegue. 

Me aclaró la madre de mi ex mejor amigo con una sonrisa. Estábamos hablando tranquilamente hasta que oímos la puerta, sonreí ampliamente al ver a Liam entrar a la cocina. Me miró con enojo y luego pasó rápidamente la vista a su madre para sonreírle.

-Mamá, hoy vienes los chicos a hacer un trabajo de química. -Avisó alegre sin siquiera voltear a verme o decirme algo.

-Bueno hijo, está bien. Yo voy a salir con Lucía a pasear un rato, charlar y tomar un café. Así que Theo se queda a cargo mientras yo no estoy. -Sentenció la rubia con una sonrisa.- Ah, y vendrá un amigo suyo para hacer una tarea de álgebra, trátalo bien y compórtate.

La cara de Liam era todo un hermoso poema, se le notaba muy enojado, como si quisiera ver mi cuerpo arder en llamas mientras alguien me tira gasolina para que prenda más fácilmente y muera con más dolor. Me dolía un poco ver aquella expresión en su lindo rostro, pero no me quedaba de otra que seguir el juego.

-Ma, ya tengo dieciséis años, puedo cuidarme solo. No necesito un niñero, y mucho menos a él. -Escupió el pequeño con furia.

-Pero soy tu madre y yo decido. Además, Theo tiene dieciocho, es mucho más maduro, responsable y me quedo más tranquila si él se queda a cargo... La última vez que te dejé solo, casi prendes fuego toda la cocina por intentar cocinar quien sabe qué para luego olvidarte por quedarte jugando videojuegos. Theo a cargo. Fin de la discusión.

Liam no dijo más nada, sólo gruñó para luego irse a su cuarto con enojo dejando muy clara su desaprobación hacia mí con un portazo muy sonoro. Julia suspiró bajo agarrando sus cosas para luego abrazarme.

-Si pasa algo, lo que sea, llámame y vendré. Cuídate e intenta lidiar con Li, por favor... 

-No te preocupes, Juls. Puedo con éste niño!

Bromeé con una sonrisa para que luego la adulta saliera de la casa sin problema. Respiré hondo y comencé a pensar, si todo seguía así, el padre del rubio terminaría interviniendo en ésto y no sería nada bueno. William era un gran hombre con una paciencia de oro, pero cuando esa paciencia se agotaba, parecía una fiera salvaje en busca de comida. En fin, agarré un plato con comida que había en la nevera y lo calenté en el microondas, serví un vaso con refresco para luego poner todo en una bandeja y subir al cuarto de Liam. Golpeé la puerta un par de veces hasta que salió. Me miró con asco de arriba a bajo haciéndome sentir algo extraño, levantó una ceja mirando la bandeja con comida y me miró a los ojos para comenzar a hablar.

-¿Qué quieres? Que sea rápido porque tengo cosas que hacer. -Respiré hondo antes de contestar, no quería volver a discutir con él.

-Te traje el almuerzo, que me odies no implica que no tienes que comer por mi culpa. -Aclaré con una pequeña sonrisa.

-Jm... Bien. -Me arrebató la bandeja de la mano con una amplia sonrisa pero un movimiento algo brusco.- Adiós. 

Y luego de eso me cerró la puerta en la cara. ¡Ni siquiera un gracias me dijo!. Maldito idiota... Ya verá, ahora sí estoy realmente molesto, éste niño estaba colmando la poca paciencia que me quedaba, y a diferencia de su padre, mi paciencia no era de oro, ni de plata, ni siquiera de roca, más bien era de hielo, y Liam estaba derritiendo mi hielo con un encendedor de muy cerca. Me fui directamente al living con molestia recostándome en el sofá una vez estaba delante de mí para hablar con Isaac de lo que había pasado.

*MENSAJES CON ISAAC*

ISAAAAAAAAAAAC

 HEEEEEY LAHEYYYY

¿Qué tienes, idiota? ¿Impaciente por verme? JAJAJAJA

 ¿Quieres que te cuente o no?

Sí, claro. ¿Qué pasó ahora con el niño?

Su madre salió y me dejó a cargo, a él no le gustó la idea pero ella no nos dió opción a nada. Ella se fue y yo, como buen niñero, le llevé AL MALDITO NIÑO LA COMIDA CALIENTE CON UN VASO DE JUEGO Y ME CERRÓ LA MALDITA PUERTA DEL SU CUARTO EN LA CARA DESPUÉS DE AGARRAR LA COMIDA Y PEOR AÍN, ¡NI GRACIAS ME DIJO!

Uff sí que tiene carácter el niño... Creo que le gusta hacerte enojar y colmar tu paciencia JAJAJAJA

 ¿PODRÍAS TOMÁRTELO EN SERIO? ME ESTÁ ENLOQUECIENDO, AMIGO

Ya cálmate. Prometo estar ahí en una hora. Intenta no asesinarlo hasta que llegue, ¿Si?

 Lo intentaré pero no te prometo nada.

*FIN DE LOS MENSAJES*

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Sé que no suelo poner nada al final de los capítulos, pero es una situación especial. Hace ya una semana seguida que ésta hermosa historia está en el puesto #10 de Niñez. Quizás ustedes crean que no es nada, pero para mí es un logro enorme y es todo gracias a ustedes. Muchísimas gracias por seguir apoyando la historia con tanto amor y cariño, los amo! Espero que sigan apoyándola con el mismo amor por mucho tiempo más. Con amor y cariño, Anita <3