Charla de mañana

1K 123 27
                                    

NARRA THEO

-Liam, ¿Podemos hablar un momento?. -Pregunté nervioso mirando al chico frente a mí con una pequeña sonrisa.

-Theo, es muy temprano como para discutir, aún no me lavé la cara, ni siquiera terminé de despertarme... -Murmuró con molestia caminando hacia su armario mientras buscaba ropa.

-No quiero discutir, sólo quiero terminar la conversación que estábamos teniendo antes de que tu madre entrara, aunque también quisiera hablar sobre eso... 

Dije tomando su brazo para que volteé a verme, quería que me preste su completa atención al menos por dos malditos minutos. Ya no quería seguir con sus vueltas, era momento de hablar las cosas de frente, decirle lo que sentía o al menos intentarlo. Liam dejó lo que estaba haciendo y me miró a los ojos, el nerviosismo que él sentía se reflejaba en ellos.

-Bien. Tienes cinco minutos y luego debemos irnos. ¿Entiendes?. -Preguntó con seguridad en su voz pero ansiedad en su mirada.

-Entiendo. -Contesté soltando su brazo pero sosteniendo su mirada con la mía.- Ahora, lo que nos tiene aquí. ¿Por qué me pediste que durmiera contigo? Y, ¿Por qué anoche dijiste que lo que te gusta de mí es mi sinceridad y mi fidelidad? ¿A qué te referías con eso?. -Indagué curioso dejando que mí corazón guiara la conversación.

-Te pedí que durmieras aquí, supongo, que porqué realmente quería que durmieras conmigo anoche, no lo recuerdo en realidad. Y dije que me gustaba eso de ti porqué es así, me gusta que seas tan sincero siempre y que seas fiel a tu palabra. No le veo nada de malo a eso. -Contestó con simpleza haciéndome enojar un poco.

-Bueno, entonces explícame un poco de lo que dijo tu madre. -Solté sonriente.- ¿Cómo es eso de deberías demostrarme el cariño que me tienes?.

-¿Y cómo es eso de que sufres en silencio cuando discutimos?. -Fue un buen contraataque, debo admitirlo, pero yo no iba a quedarme atrás.

-¿Por qué intentaste besarme anoche?. -Oí por ahí que entre mentira y mentira, la verdad sale a la luz, y luego de todas sus mentiras, una mía no le haría daño.

-¿Y-Yo hice e-eso?. -Indagó nervioso, sólo asentí. -Por dios... Lo lamento mucho... Se-Seguramente te hice sentir muy incómodo...

-De hecho no, sólo que no me aprovecho de niños borrachos. Te dije que si lo hacías mientras estabas sobrio aceptaría. -Contesté con una sonrisa, teóricamente no mentía, sólo agregaba un hecho que no sé si realmente era así o sólo me estaba intimidando.- En fin, ¿Por qué lo hiciste?

-No lo s-sé... -Gruñí bajo al notar que era una gran mentira, me acerqué a él un poco acortando la distancia entre ambos.- ¿Qu-Qué haces?.

-Quiero que me seas sincero al menos una vez estando sobrio. Anoche fuiste muy honesto conmigo, no intentaste besarme, o eso creo, de hecho no tengo idea de lo hiciste, só-sólo te acercaste demasiado a mí y te alejé porque me pones demasiado nervioso y sabía que haría algo incorrecto si estabas tan cerca de mí en ese estado. ¡Me frustra no poder entenderte! Un día eres un chico dulce y a los segundos me estás insultando, y anoche... -Lo miré a los ojos unos segundos soltando un suave suspiro para poder seguir hablando.- Anoche eras coqueto y tierno, pero ahora ya no sé que pensar de ti. 

Bufé con molestia sacando todo el enojo que tenía en mi corazón mientras me sentaba en la cama del chico mirando mis dedos, esperando una respuesta coherente o al menos una respuesta. No pedía mucho del rubio, sólo que me diga si sentía algo por mí o no, me estaba volviendo loco.

-¿Yo te pongo nervioso?... -Preguntó sentándose a mi lado, su voz era tranquila y suave.

-Claro que sí, idiota... Y más como estabas anoche... No sabía si besarte o darte una paliza... Sólo quiero que me seas sincero... -Suspiré triste girando un poco mi cabeza hacia el rubio.

-Bien, seré sincero... Creo que es lo que te mereces, ¿No?. -Preguntó esperando a que yo le diera un pie a hablar, no lo hice, simplemente asentí con la cabeza girándola de lado para poder verlo.- Te aprecio mucho, Theo, estuviste conmigo muchas veces que te necesité de niño, fuiste mi mejor y único amigo en esos años y aún así te aprecio. -Se quedó en silencio unos segundos. Yo me dedicaba a observarlo.- Y sobre el beso... O intento de beso... No lo sé, no recuerdo nada de cuando llegamos aquí, seguramente intenté besarte, eres atractivo aunque no quiera admitirlo. Valoro que no te hayas aprovechado de eso, aún así no lo hubiera recordado. 

Bromeó con una pequeña sonrisa en su rostro. Yo le parecía atractivo... Quizás no era la gran cosa, pero parecerle atractivo al chico de mis sueños y que él lo dijera en voz alta para mí era el mayor logro de mi vida. Estiré levemente mi brazo apoyando mi mano con delicadeza en su pierna, esperé unos segundos antes de comenzar a hablar.

-Liam, tú también eres atractivo, y es por eso que me pones nervioso. Intenté rechazar la idea de dormir contigo pero tus ojos de perrito logran ganarme haga lo que haga. No... No sé si estuve bien o mal en no besarte, simplemente no podía aprovecharme de ti estando tan vulnerable... Y sobre si sufro en silencio cuando discutimos... -Agaché la mirada evitando la suya, no me gustaba admitir mis debilidades, pero no podía seguir ocultándole nada, y menos si sus padres ya lo sabían.- Claro que sí, me siento muy mal y hasta solté alguna lágrima... No me gusta discutir contigo, niño, eres con la última persona con la que quiero discutir...

El peño puso su mano derecha en mi hombro consiguiendo que mi mirada volviera a la suya, nos quedamos en silencio un tiempo, se sentía bien ser sinceros al menos en una cosa, quizás teníamos mucho más para decir sobre nuestros sentimientos pero ya por esa mañana era suficiente. Me levanté con cuidado para, acto seguido, depositar un suave beso en su cabeza. Al alejarme, lo vi a los ojos con una amplia sonrisa.

-Será mejor que me vaya, tus padres están abajo así que puedo ir a cambiarme y salir por la ventana... -Susurré alegre hacia el menor.

-Bien, te veo en la escuela, Raeken... -Contestó devolviéndome la sonrisa.

-Sí... -Comencé a caminar sonriente  en dirección a la puerta pero al llegar a ella decidí voltearme a verlo una vez más.- Por cierto, si quieres besarme... No te emborraches, sólo hazlo. 

Antes de que el menor pudiera objetar algo, le guiñé el ojo y salí de su cuarto con cuidado.

Hasta que te vuelva a ver ||THIAM||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora