México y Rusia se encontraban caminando entre la fría nieve, todo iba en completo silencio y solo sus pisadas o el sonido del cascabel se oían de repente.
-¿Ya me dirás a dónde vamos?- cuestionó por tercera vez pero con la excepción de que en esta si le contestó
- a un bazar - dijo cortante el ruso quién aún cargaba al ciervo en sus hombros
-¿A un bazar?- dijo extrañado el mexicano, pues según lo que el sabía era un lugar en el que ibas a comprar con algo llamado dinero -¿No necesitas dinero para esa cosa?-
El ruso soltó una risa divertida y burlesca, valla inocencia tenía aquel ser.
- hay es donde entrás tu Мексика - el nombrado se confundió por dos cosas, una, el como lo llamó, y dos, ¿El que tenía que ver?
-¿Y qué hago con o qué?- el ruso se detuvo y bajo al ciervo de su hombro y lo dejó a un lado, se dió la vuelta e inspeccionó al menor quién le veía raro -¿Qué haces?-
Rusia se acercó a el y abrió su boca revisando la dentadura de este buscando los colmillos y la lengua bífida que vió hace unos minutos, pero no halló nada.
-¿Y tus colmillos? ¿Y tu lengua?- el mexicano se apartó de el de una manera un tanto brusca y le miró enojado
- pa' empezar, ¿Qué vergas te pasa animal? Y segundo, ¿Pa' qué quieres ver mis colmillos?-
-¿Salen si tu lo deseas?- cuestionó ignorando por completo las preguntas anteriores, México se enojó por ello pero aún así asintió
- si, solo salen si yo así lo quiero, ¿Pa' que quieres saber?-
Rusia volvió a ignorarlo y caminó por detrás del menor siguiendo su labor de inspeccionarlo, vió la gran cola de tonos verdes y el cascabel café que poseía el menor, con curiosidad la tomó y la sacudió de un lado a otro haciendo sonar el cascabel, sin darse cuenta de lo tenso que se puso México
- Órale wey! deja!- México se apartó de el y le miró enojado aun que tenía un gran rojo cubriendo su rostro
-¿También puedes esconderla?- dijo nuevamente ignorando el gritó del otro
- n-no imbécil - respondió aún avergonzado
- bueno, supongo que...- susurro y se acercó al menor quién se volvió a tensar
Rusia abrió el gran abrigo que tenía puesto México - órale cabrón! ¿Me vas a violar o que pedo?-
- si te quisiera violar ya lo habría echó - dijo simple, tomó con cuidado la cola de este y la rodeó en su pequeña cintura, volvió a cerrar el abrigo y vió de pies y cabeza al tricolor
- c-cabrón si querías que hiciera eso, l-lo hubieras dicho - habló apenado y el sonrojo en su cara se hizo más fuerte
México parecía un humano cualquiera, solo que de la parte de la cintura se veía el bulto que la cola provocaba, pero fuera de eso todo se veía normal.
-¿No tienes nada más cierto?- preguntó, a lo que el otro negó - bien, ahora pareces toda una persona normal -
-¿Y pa' que chingados quiero ser normal?- respondió frustrado comenzaba a caminar
- por que tu, Мексика, estarás entre personas en lo que, yo, me dedicó a robar - el eslavo había caminado hasta unos arbustos, donde detrás de estos se podía ver perfectamente un gran bazar llenó de personas y puestos de ropa para el invierno, fruta y verdura, pieles de animales en algunos, entre otras cosas
México se quedó parado detrás de el, <<"¿Robar?...¡¿Robar?!>> sacudió su cabeza negando una y otra vez
- lo siento Rusia pero yo no robó, papá me enseñó a ser honrado y no pienso defraudarlo - el ruso rodó los ojos molesto, aun que por otro lado...

ESTÁS LEYENDO
•|El oso y La serpiente|• Rusmex
Short StoryLas personas le temen a lo que es diferente, no se abren a nuevas posibilidades y lo nuevo es peligroso para ellos. Los híbridos son personas que nacen con características animales, no precisamente tiene que ser hijo de su especie, puede nacer vinie...