•|El oso y La serpiente|• Rusmex

•ÉL ESTÁ...•

Las puertas del almacén se abrieron y dejaron ver a varias personas al fondo y cinco que iban entrando al almacén, por como vestían era fácil saber quienes trabajaban ahí y quienes eran los dueños.

Uno, quien iba en medio, vestía elegante, un traje de tres piezas color negro, llevaba un bastón donde se apoyaba cada que caminaba, su cabello era rubio cobrizo y estaba peinado hacia atrás, sus ojos se podían ver de color azul, uno intenso, y a pesar de que se veía ya mayor lucia sumamente atractivo, era como la representación de lo bello y lo elegante.

Había dos chicos mas a ambos lados de el, se les veía el parecido y se notaba que debían de ser sus hijos. El de la derecha era alto, su cabello era mas castaño que rubio pero le combinaba con sus pecas y ojos verdes, su atuendo era mas sencillo pero se veía formal, y en su cabeza llevaba puesto un gorro de mapache. Sus ojos y los de México de inmediato conectaron.

El chico del lado izquierdo era mas pequeño que el anterior solo por centímetros, pero mas grande que el de en medio, su cabello era rubio y sus ojos eran azules, mas claros que los del otro sujeto, vestía algo parecido a lo del primer chico y se parecía al mayor, pero a la vez se veía tan diferente.

Por como eran ambos chicos y su parentesco con el mayor ahí México supuso que debían de ser parientes, posiblemente sus hijos.

El mexicano volteó a ver a su hermano y este asintió e hizo una seña de que guardará silencio; entonces entendió que el debía de ser UK y uno de esos dos chicos USA.

- este es quién mando el señor China, apenas arribó lo trajimos aquí - habló uno de los trabajadores mientras caminaban en su dirección.

México se hizo hacia atrás y levantó como pudo su cola a modo de defensa, haciendo sonar el cascabel alertando sobre cualquier peligro.

UK lo miró con un brillo en sus ojos, se podía ver lo asombrado que estaba por su mirada a pesar de no mostrarlo en su rostro. En cambio, México lo miraba desconfiado, sabía que no era hombre de fiar, pero pensó en su siguiente movimiento.

- China dijo que poseias una belleza natural...debo decir que esperaba más - su voz era gruesa y firme. México emitió un gruñido por lo bajo e inconciente se limpió las manchas de tierra que tenía en las mejillas.

Perú por otro lado veía con temor a su hermano, sabía que el podía llegar a ser impulsivo y podía arruinar las cosas, mientras que USA lo miraba de reojo sin una emoción de por medio, pero miraba también con curiosidad a México.

Y Canadá lo miraba fascinado, nunca en su vida había visto un híbrido de serpiente, quedó encantado con el, su mirada no demostraba temor, en cambio mostraba desconfianza y enojo. Era simplemente perfecto.

- Permanecerás aquí un tiempo hasta que decida cuál será tu precio o el mejor postor aparezca. Sin duda será más de lo que te compré - con su mirada lo analizaba de pies a cabeza mientras México seguía sin decir nada.

- padre - habló Canadá, quién captó la atención de México y volteó a ver al chico -¿Podemos hablar?- parecía suplicante su voz. El canadiense discretamente volteo a ver al mexicano y sonrió un poco, apenas visible.

UK accedió y se alejaron un momento de ahí, los que trabajan ahí habían estado manteniendo su distancia mientras que USA aprovechó la distracción de su padre y hermano para ir a la jaula de Perú.

- hola USA - saludó por lo bajo el peruano mientras sonreía

- hola palomo - dijo con burla haciendo reír al otro

- deja las bromas de lado, tengo algo importante que decirte - USA volteó a ver a su familia y vió como estos seguían hablando y prestándole más atención a la serpiente que a ellos.