•PRÓLOGO•

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En la época antigua, donde el humano le temía a lo nuevo, y lo extraño era malo, existen una especie de criaturas que es cazada por el hombre, que no puede vivir en paz y tienen que combatir con el temor a ser cazados y morir.

Los Híbridos, son humanos que nacieron con características de animales, teniendo así, extremidades que los hacen diferentes a los demás.

El humano le teme a los híbridos, creen que son criaturas que vienen a matarlos a ellos y a sus familias, por eso atacan primero, queman sus casas y matan a sus crías para que ya no haya más de ellos.

Los híbridos tuvieron que esconderse si querían sobrevivir, se alejaron de la civilización y se resguardaban en los bosques y selvas, cualquier lugar que cumpla con su hábitat para poder sobrevivir.

Durante años fue así, pero luego el hombre comenzó a cazarlos nuevamente, esta vez dándole un nuevo usó, subastandolos como sirvientes, matandolos por deporte o vendiendo partes de ellos en el mercado negro.

Los que sobrevivían a los maltratos de las personas al final eran ejecutadas si así lo quería el dueño, a los que mataban por deporte los dejaban correr por un campo libre y le disparaban a lo lejos, si sobrevivían a eso eran libres de irse, y a los que vendían en el mercado negro, los cazaban cuál animales y mataban para después desmembrar las partes animales y venderlas para que usen su piel o como una pieza decorativa.

Pero los que eran libres se escondían entre los bosques, conviviendo entre ellos y ayudándose mutuamente para poder sobrevivir y que sus familias estén a salvo.

Y justo en uno de ellos, donde los climas eran cálidos y húmedos para que alguien pueda sobrevivir sin tener que pasar frío o morirse de calor vive una familia de híbridos, una grande.

Cazaban peces en el río o recolectaban fruta de los árboles para comer, tenían una pequeña pero acogedora cabaña que tenía el suficiente espacio para ellos, vivían muy felices.

Pero una noche, el fuego se desató, la cabaña comenzó a incendiarse al igual que los campos y árboles alrededor, los gritos de todos y los humanos cazandolos uno por uno.

-¡CAPTURENLOS! CAPTURENLOS A TODOS!- gritó uno de ellos a los demás quienes comenzaban a llevarse a los más pequeños en carretas llendose lejos de sus hermanos

Pero los hijos más grandes luchaban por que no se llevarán a nadie y poder salvar a sus padres, pero al final los capturaron y amarraron frenté a sus progenitores, siendo testigos de como se llevaban a su madre, Italia, y como mataban a su padre, España.

Los tres fueron subidos a diferentes carretas, amarrados de pies y brazos viendo como sus hermanos se iban para no volver.

Así fue como México vió partir a sus hermanos, presenciando la muerte de su padre y como se llevaban a su madre para seguro matarla.

•|El oso y La serpiente|• RusmexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora