Libro 2

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Aceites y juramentos, orbes, cetros...simbolo tras símbolo, una inimaginable red de ancestral misterio y liturgia. Difuminando tantas líneas que, ni clerigos, ni historiadores, ni abogados podrán desentrañar jamas.

¿Quien quiere transparencia cuando puedes tener magia?

Envuelvela con ropajes finos y ungela con aceite y ¡voila!, ¿Que obtienes?

Una diosa...

—Sea ungida, bendecida y consagrada reina sobre los pueblos

Siento el peso de la corona sobre mi cabeza y al mismo tiempo puedo sentirlo sobre todo mi cuerpo

—A quienes el señor, te ha dado para regir y gobernar, en el nombre del padre, del hijo, y del espíritu santo... amén

—Amén

Musité con la mirada perdida entre la multitud

—Majestad...

Hizo una reverencia

—¡Larga vida a la reina!

Larga vida a la reina...


•Monarca en México•


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