•Realeza en México•

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—Buenos dias, alteza

Ugh, debía dejar de dormirme hasta muy entrada la noche.

—Buenos dias—respondí a su saludó en un murmuro sin levantar mi cabeza de la almohada

—Es momento de comenzar el día mas importante de su vida—fruncí el ceño, ¿Acaso estaba molesta por eso?, no, debía ser por otra cosa—le he traído algo de desayunar

—Gracias—agradecí mientras me incorporaba en la cama

Bostece antes de estirar mi cuerpo y luego me levanté en dirección al baño para lavarme la cara y poder estar un poco mas despierta. Al salir note a la doncella esconder algo inmediatamente, me extrañé por eso pero después lo deje pasar por que tenia suficientes cosas por las que pensar este día. Caminé hacía mi buro y tome mi teléfono para ver las notificaciones.

“Aun estas a tiempo de arrepentirte”

“Sabes que no voy a hacerlo”

“Bien... entonces ya no hay nada mas que yo pueda hacer. Felicidades por tu boda.”

“...”

“Gracias.”

Escuché una notificación de un mensaje después de enviar el último mensaje, alce la vista y miré a mi doncella arreglar todo para hoy.

¿Ella es...?

—Las estilistas están aquí—alce las cejas desconcertada mientras parpadeaba—¿Las hago pasar?—señalo la puerta

—Ah, si, por favor—sonreí levemente y mire nuevamente mi teléfono

Estaba imaginando cosas.

En un par de segundos tenía todo un equipo de estilistas arreglándome para la boda, una chica trabajando mi cabello, otra trabajando en mi maquillaje y otras dos para las uñas de manos y pies, fácilmente podia identificarme con una muñeca barbie.

Todas habian sido muy simpáticas, cuando tenia alguna duda simplemente preguntaba y ellas me contestaban amablemente, ademas, me sacaron tema de conversación mientras me alistaban, cosa que agradecí bastante, nunca he sido fanática de estar quieta por mucho tiempo.

Cuando terminaron conmigo se despidieron alegremente y al momento entraron dos doncellas mas para ayudarme con el paso mas importante para una novia, el vestido.

—¿Como que el vestido no esta donde debería estar?—las miré—¿Donde se supone que lo dejaron?

—Lo lamentamos alteza, no tenemos idea de como pudo haber llegado a perderse

—Tengo que estar lista antes de las 12:00, necesito ponerme el vestido ahora

—Nos haremos cargó de todo, no se preocupe

—Deben encontrar ese vestido

—Volveremos con él—las tres hicieron una reverencia

Suspiré y me senté en la cama tratando de calmar las inmensas ganas de llorar que sentía en este momento, no pensé que arreglarme seria tan caótico, ¿Como puede perderse la cosa mas importante de la boda?, puedo casarme sin velo o sin una estupida tiara, pero no sin un vestido. Los minutos pasaban infernalmente lentos, cada segundo en el que no sabia nada de ese vestido se sentían agobiantes.

—Adelante—hable cuándo tocaron mi puerta, tenia esperanzas en que fuera alguna de las doncellas

—Alteza—me hizo una reverencia