Alfa Destinado ಇLarry Stylinson.

Capítulo 3

Mientras se encontraba en clases Harry no pudo evitar mirar a las chicas que se encontraban a una silla delante de él y saber si ellas habían planeado lo de ayer. Aún se sentía muy inseguro y confuso ¿Ellas serían tan horribles personas como para hacerle eso?. No las conocía para nada y cuando escuchó a esas Omegas decir eso simplemente se dio cuenta de que ocultaban su verdadera cara en esos actos amistoso que tenían con todo el mundo. Harry suspira recordando esos ojos azules que parecían tan sinceros y aquel gesto que hizo con la boca que parecía que estaba nervioso y Harry no sabe si confiar o mantener un límite por mientras, solo para cuidar su corazón.

No sabe que hacer en esos momentos y todo hubiera sido demasiado fácil si fuera un Omega normal, tal vez estaría tan contento ahora de haber encontrado a su alfa destinado y no con un gran dilema en su cabeza.

Unas horas después está sentado en su lugar favorito, justo en el césped del campus de su universidad, debajo de esta gran árbol que le proporcionaba sombra. El clima es agradable como para estar afuera sentado, la lluvia que ayer caía fue reemplazado con este cálido sol y estas nubes. Harry alza la mirada hacia Lia, quien está expectante a que Harry contestara.

—¿Qué sucede? Has estado todo el día muy raro. ¿Sucedió algo?—Lia se acerca a él para acariciar su brazo.

Harry la mira dudando un poco si contarle a su amigos lo que ha pasado antes de hablar con Louis. Siempre ha sido de contarle todo a Lia y a Niall, pero no quería emocionados en vano, tal vez Louis solo estaba jugando y no se iba a presentar, pero quería hablarlo con ellos y que lo aconsejaran.

—Sí, en realidad ha pasado algo—Niall alza su mirada ante eso y Harry se siente mucho más nervioso ahora—. Ayer con todo esto de la lluvia casi caigo pero uhm... Un alfa me salvó y dice que es mi alfa destinado.

Lia abre los ojos con sorpresa y suelta un gritito llevándose las manos a la boca y lo mira alarmada. Niall se une a Lia mirándolo con mucha sorpresa, que hace que las mejillas de Harry se sientan calientes y desvíe la mirada. Odia lo rápido que puede llegar a estar avergonzado. Por eso no quería decirles aún a sus amigos, aún no hablaba con Louis y sus amigos ya se están emocionándose. Lia brinca abrazándolo con un puchero en sus labios.

—Estoy tan feliz por ti—La Omega responde.

—¿Y qué más?—Niall insiste acercándose también.

Harry hace una mueca acomodándose la bandana que sujeta sus rizos en un acto de nerviosismo. Está seguro que sus amigos lo van a reprender cuando les diga que no se dijeron nada con tanta importancia, pero Harry había tenido mucho frío y tenía que pensar muy bien las cosas.

—Yo tuve que irme—les explica—. Estaba totalmente mojado por la lluvia y si no llegaba a casa pronto iba a pescar un resfriado.

Lia se cruza de brazos. —¿En enserio Harry?

—Sí—Responde con un suspiro—. Yo no estoy tan seguro y confiado de que en realidad sea mi alfa.

—¿Por qué lo dices? No sé supone que él alfa te lo ha dicho—Niall nota.

Mira unos momentos la hora en su teléfono dándose cuenta que falta unos quince minutos para encontrarse con el alfa de ojos azules en la biblioteca y está un poco nervioso por eso. Vuelve su vista a sus dos amigos que esperan su respuesta.

—Sé que no les he contado esto—Los mira con esa sonrisa de disculpa—, pero hace unas semanas, cuando algunas personas de la clase se enteraron de que no podía reconocer a mi alfa si lo llegará a ver, escuché a Blair y a Brooke que sería muy divertido si mandaran a un alfa a decirme que soy su Omega destinado. Y estoy algo inseguro por esa razón ¿y si ellas lo mandaron?