Capítulo 39

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-Es un honor volverlos a ver príncipe heredero, princesa Reese.- Verlos nuevamente llenaba de alegría mi corazón, a pesar de los vínculos que los emperadores querían hacer con papá, Evan y Rees somos iguales si lo pienso bien, aún son niños, es algo triste saber que a esta corta edad traten de forjar a Evan con la idea que debe ser mi esposo. Sorprendentemente Rees corrió hasta mi lado rodeándome en un amigable y cariñoso abrazo, mi padre y todos los presentes entraron en pánico. Lo que he aprendido hasta ahora es que la realeza no muestra mucho sus sentimientos, a decir verdad creo que mas bien somo muñecos de exhibición, no puedo comprender el por que tenemos que aparentar una personalidad diferente, pero no soy la mas digna de decir eso, ya que soy completamente diferente a lo que todos ven de mí, bueno después de todo no tuve mas opción, solo espero poder ser gentil con ellos, sé que su amistad es sincera. -Reese, pero que actitud más desvergonzada es esa, muestra respeto frente a la realeza, Evelion, encárgate de la princesa.- una mujer que parecía ser doncella de la princesa, la apretó un poco fuerte de su brazo para poder alejarla de mí. Inesperadamente no me di cuenta en que momento fue que impedí que la doncella siguiera sujetando de esa manera a Rees, tal vez fue el hecho que cualquier niña pequeña me recuerda a Blair, cada maltrato que veo en algún niño me recuerda lo que no pude hacer por ella. -Ah...Ava cree que no debería sujetar a la princesa Rees de esa forma, le duele.- Mi mirada comprensiva fue transformada en una actitud amenazante, ¿cómo se atreven actuar de esa forma frente a nosotros?. -La princesa de Dieber no ha hecho nada por lo que deba corregirse, estoy agradecido que pueda aceptar de una grata manera a nuestra princesa.- Podían verse la mirada ambiciosa en la madre de Evan, creo saber la razón. -Eso es verdad emperatriz nuestra Reese ha amigable con la princesa de Clawwind, además creo que ambas pueden llegar hacer muy buenas amigas.-Como siempre el emperador Ryu poniéndose del lado de mi padre, ahora entiendo que es un hombre manejable pero...con deseo de poder. -Princesa Ávalon espero podamos reunirnos muy pronto, hace tiempo que no nos vemos, sé que al igual que yo, mi hermana estará feliz de ver sus pinturas.- Ah claro lo he olvidado, yo adoraba pintar...¿Cuándo fue la ultima vez que lo hice?, lo único que pude hacer fue sonreír amigablemente, no quiero que sepas todo lo que ha pasado Evan, no quiero que ambos tengan lastima de mí, y lo más importante, aún no sé si puedo confiar plenamente en ustedes. -Ava estará encantada de poder pintar con Rees y Evan.- mi padre sujetó nuevamente mi mano alejándome de la familia Dieber, subimos nuevamente al trono donde me ordenó quedarme con los guardias reales -Espero que su estancia aquí sea de su completo agrado, nos veremos nuevamente en baile de legitimidad.- Mi padre agradeció sin ninguna emoción, ¡cielos este hombre!. -Agradecemos su hospitalidad su majestad el emperador, esperamos verlo en todas las actividades después del baile.- Agradeció la madre de Evan y Rees, ¿actividades? no sabía que se quedarían mas tiempo. Bueno es mi primer baile seguramente hay muchas cosas que desconozco.
Al terminar la despida formal, sus altezas fueron guiados por uno de los mayordomos, Evan me miró sonriente, vaya sinceramente ha cambiado mucho y pensar que al principio creí que no le agradaba, parece ser que mi obsequio aquella vez rindió frutos, Rees por otro lado parecía tener estrellas en los ojos cada vez que me veía, es una pelirroja muy simpática. -Esto es tan agotador.- suspiró cansado Richel, papá vio como mi querido hermano se tumbaba en el trono. -Han sido la primera familia que hemos saludado, no puedo creer que el futuro emperador este tan casando por algo como esto.- Ahí va de nuevo tratando de retarlo. -Vámonos no me digas que no estas de la misma forma, verle la cara a todos ellos que no piensan en más que quien será el afortunado que se lleve la mano de mi hermana.-Richel y papá me miraron lúgubres e indescriptibles . -No tengo de que preocuparme ya que no pienso darles la bienvenida a mi familia, por supuesto nunca les daré a mi hija, eso no llegará a suceder.- Oh pero, ¿papá dijo aquellas palabras?, cielos papá es tan adorablemente celoso. -Oye Ava ¿por qué de repente estas roja?, ¿estas enferma?.- ¿roja?, ¿yo?...quizás yo...¡¿Acabo de sonrojarme!?
-Hehe no, yo...Ava esta bien, solo hace un poco de calor.- Espero no se dieran cuenta, ¡que vergüenza!, acabo de sonrojarme por lo que dijo mi padre. -¡Presentando sus majestades al glorioso imperio de Histbating!.- ¿Histba...hist...? rayos ¿por qué me suena tan familiar ese extraño nombre?
-Emperador Candeb, su majestad el príncipe heredero, es maravilloso volvernos a vernos, el imperio Histbating agradece profundamente su invitación a tan importante evento.- Mi padre soltó una pequeña risa sarcástica. -Siempre fuiste bueno con la palabrería Dean.- Mi padre nunca hará amigos de esa forma
-Y tú siempre fuiste bueno en mostrar tu poco afecto a tus amigos.- Ese hombre si que es sabio.
-Soy bien conocido por ser un emperador que no tiene amigos, estoy seguro que sabes eso. -Ahahahaha ¡pero si es nuestro adorable emperador Candeb.- esperen...¿Qué fue ese rápido cambio de humor?, esa mirada de adoración y admiración a mi padre...esa mirada me recuerda a una persona que ya he conocido antes. Si, esa manera de hablar es igual a la de Elliot, el día en que nos conocimos en la presentación dragón miraba de la misma manera a Víctor, haha ya decía yo que ese nombre era tan familiar.
-El primer príncipe de Histbating extiende sus saludos a su alteza el emperador y a su majestad el príncipe heredero.- ¡Pero si es Elliot! no hay duda que no solo es atractivo por su belleza, si no que lo que complementa tal belleza son sus armoniosos y elegantes modales. Cualquier princesa estaría encantada de estar en matrimonio con él.
-Entonces ¿estas diciendo que aceptarías su propuesta de matrimonio?, ¿por que no acabar con eso? elegirlo desde ahora te evitaría problemas en el futuro, ya sabes las grandes disputas que sueles salir de varios hombres enamorados de la misma mujer. - Parece que la voz en mi cabeza había tardado mucho en aparecer. -No me refiero a eso, sabes muy bien que mi objetivo no será casarme, es algo que desde que vine a este mundo se me ha prohibido, aunque se que la noticia de un prometido evitaría malos entendidos en el futuro no puedo hacer eso, mas bien lo que desea mi corazón es poder hacernos amigos, cada uno de ellos, príncipes y princesas son buenas personas, se ve que se en el fondo se llevan bien y todos tienen algo en común...quieren tener paz...quieren ser libres. -¿Como puedes saber eso?.- De alguna forma me alegra que estemos hablando en nuestras mentes, seguramente si alguien me escuchara, me creería una loca.
-Es fácil ver el deseo de la libertad reflejado en sus miradas, nunca has escuchado que los ojos son las ventanas del alma, además todos estamos unidos por ese deseo en común. Al menos quiero poder hacerme su amiga...quiero creer que puedo confiar en ellos, quisiera poder descansar sabiendo que si hay personas que quieren asesinarme al menos tengo personas que intentaran protegerme.
-Creí que dijiste que desde ahora serás fuerte y que nada te asustaría.- Este zorro no sabe nada.
-Seré fuerte pero dime Aken...a quién no le da miedo la muerte...quién no teme ser traicionado...¿no es por eso que mi padre no confía del todo en mí? ¿crees que no lo sé?...sin embargo no es el temor a la muerte en si, mas bien es el temor a morir sin completar nuestra misión en el mundo, el ser libre es un sueño no una opción que podamos elegir. Además en mi antiguo mundo no tuve el privilegio de conocer algo como la amistad...¿es egoísta querer tenerlo ahora?.

serás tú, mi majestad. (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora