serás tú, mi majestad. (Editando)

Capítulo 06 Te protegeré...hija.

Me veo a mi misma reflejada en tus ojos, no te preocupes no iré a ningún lado, no temas no importa que pase, yo siempre estaré contigo. A dormir mi princesita. 
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El reino de Clawwind es más bonito de lo que pensaba, veo tantos rostros felices, familias unidas que reflejan amor, siento un poco de envidia.
Después de lo que sucedió, el tío Lauke pensó que lo mejor sería dejar el palacio cuanto antes, si así es un palacio, cuando el tío Lauke me llevaba en sus brazos rumbo al carruaje mis dudas fueron aclaradas cuando ví la pintura del retrato de mi padre, un hombre guapo de elegante porte, con su larga capa y corona real adornaba el gran recibidor del palacio, por cierto tampoco imaginé al niño que apareció en la habitación, al parecer es hijo de Candeb, así es adivinan su retrato también estaba ahí, no hay duda de que los dos son preciosos, aunque me duela decirlo tengo que aceptar de una vez por todas que Candeb no me quiere ni siquiera un poco, y dudo que quisiera a mamá, es decir tiene otro hijo ¿no?.
- El niño del cuadro ¿quién es lauke?.- Lauke aparto la vista del paisaje del pueblo y me miró.
-Desde hoy puedes llamarme tío Lauke.- Lauke me miró esperanzado, en sus ojos puedo notar su amor sincero por mí.
-Esta bien tío lauke.- sonreí alegremente.- él me miró sorprendido
-Vaya pensé que tardaría un tiempo en oír que me dijeras tío. - me sonrió emocionado, es gracioso ver cómo se emociona por una cosa como está.
- me gusta el tío Lauke, y me gustaria que Lauke fuera mi papá.- Lauke no podía estar más que emocionado, se acercó a mí y me abrazo.
-Gracias, me hace feliz escuchar eso.- nos separamos de aquel abrazo para poder sentarme en sus piernas.            
-El niño que viste en aquella pintura se llama Richel, es el hijo del emperador Candeb.-Tal vez es solo que él quería un solo hijo, y es varón, debe ser eso, quiero decir, soy una niña que nació de una mujer que amaba, que murió por mi culpa, y tuvo una hija que el no deseaba es lógico.
-Ava, ¿tu sabes quién es tu papá?.- asentí nostálgica reviviendo cada uno de los recuerdos con Candeb.
-El hombre del cabello de nieve es mi papá, el hombre que no me quiere.- pegue mi cabeza en el cálido pecho del tío Lauke.
- Tu padre te quiere, solo que no lo sabe...-hubo un momento de silencio. -De todos modos Ava si vuelves a encontrarte con él algún día, mantente alejada, se que eres una niña inteligente y entiendes, ¿Lo harás?.- sé que el tío Lauke quisiera que nuestra relación fuera diferente, pero también es consciente de la actitud y temperamento de su hermano, por lo cual entiendo su preocupación, tranquilo tío yo también prefiero estar alejado de él, quiero vivir una buena vida, al lado de Lauke podré hacerlo, con el tiempo lo veré como mi padre estoy segura, Candeb solo es parte de un pasado triste y cruel de mi vida, está bien no todas las personas podemos tener un buen comienzo pero...trataré de que mi vida de ahora en adelante sea muy afortunada. Al menos tengo una cosa de que agradecerle a Candeb, el que gracias a sus desprecios conocí a Lauke y ahora tengo la oportunidad de comenzar lo que puede ser una vida familiar dichosa.
El carruaje se detuvo frente a una casa enorme, a mis ojos podría parecer un palacio, aunque no es tan grande como uno. En la entrada  un muro de concreto protegía la casa, la puerta de la entrada llevaba lo que parecía ser un sello de la familia, al entrar una fuente con forma de un dragon adornaba la casa. Bajé de las piernas del tío Lauke, enfrente del carruaje había un hombre esperando.
-Bienvenido a casa Duque Clawwind.-El tío Lauke me ofreció su mano para poder bajar las escaleras del carruaje.
-Buen día Joseph es agradable llegar a casa temprano, Joseph quiero presentarte a la nueva integrante de la familia, Avalon.- Joseph me tendió su mano para saludarme.
-Un placer conocerla señorita avalon.-le sonreí alegremente, tomé su mano correspondiendo a su saludo
-Estoy muy contenta de estar aquí Joseph. - Joseph me miró sorpresivo
- Se ve que eres muy alegre y llena de energía.- dijo Joseph
-!Me gustan mucho más flores¡ ¡Y los pájaros!.- Joseph y Lauke rieron felices.
-Entonces no te aburrirás aquí, la señora Naru tiene un jardín enorme y con muchas flores, tal vez a Robert el jardinero no le importará que vayas a visitarlo de vez en cuando.
Salté de emoción al escuchar esas palabras, ¿De verdad podré visitar el jardín? ¿Quién será Naru?.
-Vamos Ava entremos, te presentaré a Naru, vamos Joseph después te explico la situación.- soy una niña pero entiendo a lo que se refiere por "situación".
Al entrar a la mansión, se sentía tan cálido y reconfortante, una pintura del tío Lauke se mostraba en el recibidor, estaba abrazado de una mujer, y debo decir que era una mujer hermosa, sus ojos eran del color de las plantas con un sabroso manzano, su cabello era largo y ondulado me recordaba al chocolate, era tan café como el chocolate y alegraba la pintura con una sonrisa alegre y muy enamorada.
-¡Lauke! - gritó la voz de una mujer.
-¡Lauke!- la mujer del retrato bajo corriendo por las escaleras, emocionada y feliz de ver a Lauke se unió a él en un abrazo. Se podía ver el cariño y el amor que le tenía, el rostro de Lauke parecía iluminarse tan solo al mirarla.
- ¿Qué haces aquí tan temprano? Pensé que su majestad te tendría ocupado por mucho tiempo.- al escuchar eso, la sonrisa del tío Lauke fue disminuyendo, se separó del abrazo de la mujer para mirarla a los ojos.
-Bueno sucedió un inconveniente y decidí venir a casa. Naru...¿recuerdas que estaba investigando un asunto sobre mi hermano?- Así que ella es Naru, ¡cielos! Es tan bonita como su nombre.
-Si, oh...¿lo descubrió Candeb?- la mirada triste de Lauke hizo  preocupar a Naru.
-Sí, pero no importa mucho eso, lo que importa es que...quiero presentarte a alguien.- tomó las manos de Naru felizmente y me miró. Naru confundida siguió la mirada de Lauke hasta mí. Abrió los ojos sorprendida.
- ¿Ella es...?- Lauke asintio como si supiera lo que Naru iba a preguntar, Naru soltó las manos de Lauke y se acercó a mí sorprendida.
-Ella es Avalon, mi sobrina.- concluyó Lauke.
-Hola...¿Avalon eh?, estoy feliz de conocerte.- su mirada parecía querer soltar lágrimas, me acerco a su cálido cuerpo y me abrazó, se sentía muy maternal, su cuerpo con olor a rosas me arrullaba como si fuera una fragancia somnífera.
-Eres tan parecida a ella.- ¿Querrá decir a mi madre? Bueno es la primera que lo dice.
-Ava ella es Naru mi esposa, puedes llamarla tía Naru.- Naru me alejo de ella para acercarse a su esposo, ambos me miraron muy felices, son sin duda a lo que yo llamaría una familia.
-Desde ahora nosotros seremos tu familia, claro que no te he preguntando si...tu quisiera ser...- no hace falta que sigas, estaré encantada de estar siempre con ustedes. Corrí llena de alegría a las piernas de ambos. Naru estallaba de felicidad me cargó en sus brazos mientras me daba besos en la mejilla.
-Gracias.- no podía decir otra cosas más que expresarle mi eterna gratitud, tal vez este era el plan de mamá, tal vez esta será mi feliz vida, tal vez ahora mamá este feliz.
Abrace fuertemente a Naru, estaré eternamente agradecida, seré la hija más obediente.
-Por supuesto te presentaremos a los que serán tu nuevos hermanos.- ¿Qué? ¿Hermanos?.
-Estoy seguro que se llevarán bien son de la misma edad, los gemelos estarán emocionados.
-¿Donde están ahora?.- preguntó el tío Lauke. Naru tomó mi mano y comenzamos a caminar.
-Estan en el jardín jugando, vamos Ava estarán muy feliz de conocerte.- Lauke se quedó de pie viéndonos marchar.
-Lo dejo en tus manos Naru, tengo que tratar unos asuntos con Joseph.-Lauke me dio una última sonrisa para marcharse con Joseph.
-Sabes Ava estoy muy feliz de que estés aquí, yo conocí a tu madre a decir verdad éramos muy buenas amigas, gracias a ella conocí a Lauke, eh? Jaja pero que cosas digo.- la cara de Naru se puso roja como un tomate.
Pero me alegra saber que conoció a mi madre, eso me hace tener a mi madre más cerca de mí.
- ¿Tía Naru puede hablarme de  mamá?- Naru acaricio mi cabeza y cariñosamente asintió.
-Siempre que tú lo desees así será.- camine feliz de la mano con Naru hasta llegar al jardín no era tan hermoso como el del palacio pero era un bonito jardín, resaltaban mucho las rosas y tulipanes. Cerca de columpio había un niño jugando con lodo, parecía ser que hacía castillos. Una niña cerca de ahí lo miraba con cara de asco mientras recogía rosas en una canasta.
-¡Noah! ¿¡Que haces!?.- gritó furiosa Naru, el niño se levantó espantado, trato de limpiarse pero su madre ya estaba reprimiendolo, Noah solo reía nerviosamente.
Mientras miraba la escena con atención y diversión me percate de una pequeña mirada que no me perdía de vista. La niña me observaba asombrada, ¿Qué debo hacer? Alegremente le dedique un saludo de mano desde mi lugar. La niña sorprendida y lo que parecía ser ¿emoción? Se reflejaban en su rostro, corrió hasta mí con su canasta de flores.
- ¡Hola! Soy Clara ¿quién eres tú?- vaya pero parece muy amable, lo que no entiendo es por qué sigue emocionada.
-Hola soy Ava...¿Son tus flores?.- trate de ser lo más amistosamente que pude.
- ¡Ah esto! Si las recolecte para hacer peinados ¿Sabías que puedes ponerlas en tu cabello?, me gustan mucho las flores.- me sonrió feliz.
Naru se acercó junto con Noah hasta nosotras.
-Oh veo que ya se conocieron, Niños ella es su prima Ava, vivirá con nosotros de ahora en adelante, tratenla como una hermana.- Al escuchar las palabras de su madre clara salto hasta mí para abrazarme.
- ¿Eres mi prima?, ¿Vivirás con nosotros? Estoy muy feliz podemos jugar juntas, peinarnos, te podré mostrar mis flores, te mostraré mis vestidos, wow eres muy bonita Ava.- ¡Vaya! Si que tiene mucha energía, incluso más que yo. Noah sonrió emocionado, pero al ver qué me percate de su sonrisa, cambio su actitud tratando de mostrar desinterés.
-¿Una nueva hermana? Ehh ¡que molestía! Ahora no solo será clara sinó también Ava. - Pero que niño tan más raro pero tierno, si al principio hizo la misma reacción que Clara, pero parece que nos llevaremos bien. Aunque pensé que solo seríamos Naru, Lauke y yo, me emociona saber que mi familia es más grande, ahora tendré a más personas importantes para mí.
-¡Estoy feliz de conócelos, Clara y Noah! Por favor cuiden de mí.- Naru me abrazo feliz, Clara salto de emoción e imitó a su madre, Noah sin embargo es extraño pude ver la emoción en su rostro pero rápidamente la cambio a desinterés ¿Qué le pasa?. Pero es un niño encantador iguales a su madre y con la belleza de ambos padres. Gracias mamá por poner al tío Lauke y la tía Naru a mi cuidado.

Por favor mamá cuida de mí.

                           Naru

-Por fin se durmieron, le asigne a Amelia el cuidado de Ava, jugaron mucho en el jardín los tres.- Naru entro al estudio donde Joseph y Lauke seguían hablando.
-Me alegro cariño, entonces Joseph ahora estás enterado, ya lo sabes.- Lauke se puso de pié y camino hasta su esposa.
-Cuando mi hermano Candeb venga de visita a la mansión Clawwind, eviten  solo que se cruce con Ava.- Naru acaricio la espalda de su esposo para relajarlo.
- si Duque Lauke no se preocupe. Me retiro que tengan una buena noche señor y señora Clawwind.- Naru y Lauke se despidieron de Joseph, aunque Naru estaba al tanto de la situación seguía preocupada.
-Lauke...-Lauke miro a su esposa preocupada, tomó sus manos y las beso con ternura y amor.
-Candeb...¿sigue con la idea de matar a la niña?- Lauke miró a si esposa y tristemente asintió.
- sí, pensé que al ver a la niña cambiaría de parecer, tarde mucho en encontrarla, Candeb siempre me ocultó su paradero, pero cuando lo averigüe, no dude en mandar a buscarla, al parecer la habían vendido, los caballeros siguieron la ruta de los que la habían comprado, pero...fue como un milagro que apareciera frente a mí, cuando ví a una niña de cabello blanco correr entre la gente y ver qué la perseguían no pude evitar pensar que ella podía ser, no dude en cuanto la ví, sabía que era ella, tan idéntica a Candeb pero con la escencia de Ivy, tu ya lo has visto. Creo que eso fue lo que hizo enfurecer aún más a Candeb, estaba decidido a matarla Naru, incluso...saco su espada con decisión.- Naru no pudo evitar llorar ante aquella historia, recordaba el último favor que le había hecho si amiga Ivy.
"Por favor Naru, si yo llegara a irme, protege a mi hija, podrían ser lo único que ella tendría, mi bebé no tendrá una vida fácil, probablemente tenga que pasar muchas desgracias, por favor" 
-Le prometí a Ivy que cuidaría a su hija pase lo que pase, cuidare a Ava como mi propia hija, eso es ahora, es mi hija.- Naru limpio sus lágrimas para abrazar a su esposo, buscaba esa fuerza en la única persona que no la dejara sola.
-Lo sé cariño, la protegeré de mi hermano, no dejaré que la toque, protegeré a mis hijos pase lo que pase.