𝚊𝚞𝚝𝚞𝚖𝚗 𝚕𝚎𝚊𝚟𝚎𝚜 •𝘀𝗮𝗻𝘄𝗼𝗼•

•48•

ㅡ Uuuh, no hay estrellas, creo que va a llover. ㅡ subió la ventanilla y se acomodó mejor.

ㅡ Sí, oí eso.

ㅡ Espero que no sea tormenta porque, hey, acabas de pasarte la casa ㅡ apuntó con el dedo a medida que su hogar iba quedando atrás. ㅡ ¡Sannie!

ㅡ ¿Sabes? Nunca creí que fueras a encontrarlo detrás de ese libro, digo, ¿qué probabilidades había de que justo ese se cayera? A veces el universo hace cosas raras.

ㅡ Bueno, es oficial, enloqueciste.
¿A dónde me llevas?

ㅡ Estamos yendo juntos.

ㅡ Bue, ¿a dónde estamos yendo?

ㅡ ¿No sabes?

ㅡ Uhm... ㅡ miró afuera. Sí, reconoció el paisaje. ㅡ ¿Al parque? Sannie va a llover y preferiría estar en casa por las dudas de que se torne feo.

ㅡ No te preocupes, voy a estar aquí, ¿okey?

ㅡ Okey... ㅡ dijo despacito.

Frenó y se estacionó.
ㅡ Bueno, vamos. ㅡ abrió y bajó, Wooyoung hizo lo mismo. ㅡ Ya se están acumulando las nubes, mejor que nos apuremos. ㅡ dijo mirando al cielo.

Fue hasta Wooyoung y le extendió la mano ㅡ ¿Me acompañas?

Sonrió con un leve piquito en los labios ㅡ Sabes que sí. ㅡ la tomó.

Para cuando comenzaron a caminar, se le hizo más obvio hacía donde iban, pero, ¿por qué, para qué?

Pararon en el puente y San se puso frente a él.
ㅡ ¿Vinimos a ver el lago?

ㅡ Sí ㅡ hizo una seña con la cabeza para ir al borde del puente.

Ambos miraron hacia el lago, pero Wooyoung frunció los labios, algo decepcionado ㅡ No se ve la luna ㅡ miró arriba ㅡ Las estúpidas nubes la cubren ahora.

ㅡ ¿Pero qué dices? ㅡ sujetó su mejilla y lo hizo mirarlo ㅡ Veo la luna perfectamente reflejada aquí.

ㅡ Ah, Sannie... ㅡ bajó la cabeza, ligeramente avergonzado. ㅡ ¿Por qué estamos aquí?

ㅡ Cuando lo encontraste en la casa, pensé que entonces sería mejor tenerlo conmigo hasta el momento en el que esté preparado para pedírtelo.
Hoy, contigo diciendome esto, siento que no hay mejor momento que este. ㅡ Wooyoung escuchaba atento y sus nervios iban en aumento ㅡ Desde el instante en el que te vi, me gustaste, y en cuando te conocí realmente, fue que me enamoraste. Siento, en este punto, que nadie te conoce como yo lo hago, que nadie se ha molestado o arriesgado a conocerte a tal punto de decidir que te quiere a su lado para siempre y para todo, por nada más que el amor que te tengo. ㅡ se detuvo un segundo ㅡ Bien, siento que si estoy frente a una clase podría hablar durante horas, pero cuando estoy frente a ti, lo único que quiero es cerrar la boca y sólo besarte y besarte hasta que olvide incluso cómo hablar.
No sé bien qué decir, en cada parte de mi mente estás tú y no encuentro las palabra exactas. Hasta que pueda encontrarlas, hasta que exista alguna otra forma de describir esto que siento, sólo puedo decir que te amo. Que eres el hombre que quiero a mi lado, que eres a quien elijo hoy y todos los días para estar a mi lado. ㅡ San se arrodilló y sacó la cajita azul ㅡ Wooyoung, uh... ¿Qué haces? ㅡ preguntó cuando éste lo tomó de la mano y lo levantó.

ㅡ No tienes porqué agacharte, Sannie. Yo también tengo cosas que decir. ㅡ aspiró aire ㅡ Al principio creí que lo nuestro sería algo de una sola vez, digo, como una travesura del momento; pero una mañana desperté y supe que sentía algo más. Lo quise negar, quise convencerme de que no era así, pero sí lo era. Ya no era mío, era tuyo.
Abría mis ojos y lo único que veía, lo único que quería era tú, estar a tu lado.
Te hice muchas cosas malas, y aún así me perdonaste y seguiste a mi lado. Eres demasiado bueno, y varias veces llegué a preguntarme si eras real. Si realmente esos ojitos brillosos existían o era yo inventandolo todo, y no fue así.
Tú existes, eres real, y la prueba viva de que el mundo es injusto a veces, porque no estoy seguro de haber hecho algún tipo de milagro que me permita merecerte. Merecer a alguien tan perfecto como tú.
Te amo también, Choi San, y sería un honor para mí vivir junto a ti por el resto de mi vida.

Su corazón se sintió cálido de una manera que esa expresión alegre en su cara y esa sonrisa no podían expresar ㅡ Jung Wooyoung, ¿te casarías conmigo?

ㅡ Sí.

Cuando se acercaron para besarse, un refucilo puso en alerta a Wooyoung y los hizo mirar al cielo.
ㅡ Creo que sí será tormenta. ㅡ San observó con cariño esos destellos de luz que surcaban entre las nubes.

Wooyoung sabía que a él le gustaban mucho los paisajes bonitos, y aunque él les tuviera miedo, no podía negar que era lindo.
Pero lo que él miraba era mejor.
Porque mientras San miraba al cielo, Wooyoung lo miraba a él.
La tormenta y su miedo quedaron en segundo plano si se trataba de ver los ojitos brillosos y contentos de San.

Las gotas comenzaron a golpear su rostro y de repente empezó a llover fuerte.
San río y lo miró ㅡ Va, será mejor que entremos al auto.

ㅡ No ㅡ sacudió su cabello mojado ㅡ Así está bien.

ㅡ Así está bien ㅡ repitió.

Wooyoung no pudo evitar hacerlo ㅡ San, prometeme que esto será para siempre.

ㅡ Lo prometo.

Tenía que hacerlo, tenía que hacerlo, Wooyoung se tiró hacia él, abrazándolo y besándolo bajo la lluvia.

[…]

ㅡ ¡¡Aachuuuuz!!

ㅡ Bueno, no tienes fiebre ㅡ concluyó Yeosang, agitando el termómetro.

ㅡ ¿Y qué tal San? ㅡ preguntó preocupado.

ㅡ Él también tiene un ligero resfriado, pero no lo exagera acostandose todo el día.

ㅡ ¡Estoy siendo precavido! ¿Qué pasa si los contagio a todos?

ㅡ Sólo necesitas un té y un baño caliente. ㅡ dejó la bandeja sobre su regazo ㅡ Aquí tu tesito de miel. Del baño te ocupas tú.

ㅡ Yeosangie, ¿no eres como un ángel?

ㅡ Claro ㅡ negó con la cabeza. Miró hacia la puerta y se sentó a su lado ㅡ ¿Así que te comprometiste? ㅡ susurró.

ㅡ Shi.

ㅡ Aww, ¿y cómo fue?

ㅡ Fue excelente, ¿puedo llorar? Quiero llorar.

Yeosang tomó sus manos ㅡ Woo, estoy tan feliz por ti. Tu vida mejora cada día más, y lo mejor es que lo estás haciendo bien. Me llenas de orgullo.

ㅡ Tú siempre confiaste en mi, Yeosangie, gracias por eso. ㅡ jugó con los deditos del mayor.
ㅡ ¿Y tus relaciones?

ㅡ Básicamente, decidimos que será temporal, por eso vamos a disfrutar esto lo más que podamos.

ㅡ Uhm... Y cuando acabe, ¿cómo van a terminar?

ㅡ No entiendo.

ㅡ ¿Quién se quedará con quien?

ㅡ No lo había pensado... ㅡ sacudió la cabeza ㅡ Como sea, dije que queríamos disfrutar lo que queda, ninguno está pensando en eso.
Pero estoy seguro que como sea que termine esto, los tres estaremos satisfechos de haber podido estar con el otro y conocernos mejor.

ㅡ Lo que me gusta de esto, es que eres libre. Los tres lo son, de decidir por sí mismos.
Realmente, Yeosang, tú más que nadie se merece eso.

El peligris sonrió, y por supuesto que sí, pasó demasiado ocupándose de los demás. Era tiempo de ocuparse de sí mismo.

Era su tiempo.

del~