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A veces siento que soy feliz, pero luego empiezo a pensar, y noto que no merezco serlo.
¿por qué debería ser feliz? no hay nada bien en mi como para ser digno de estar feliz.

Chan, me hace sentir bien, me siento cómodo, querido, pero luego comienzo a dar vueltas todo en mi cabeza, y me apeno por él, por tener que tolerar a un chico como yo, alguien que no lo merece en lo más mínimo.

He dejado de comer la mayor parte del día, solo como con Chan, para que no haga preguntas de más. Ya llegue a los 55 kilos, pero me sigo viendo igual en el espejo.

La incomodidad que siento últimamente es impresionante, no me siento cómodo ni siquiera estando ahí sin hacer nada. Durante las citas que he tenido con Chris fuera de la escuela, lo he pillado mirando a las parejas con algo de pena, mira sus manos entrelazadas, y nosotros debemos ir a unos cuántos centímetros de distancia. Me gustaría ser una chica linda y delgada para poder estar de novia con Christopher tranquilamente sin que nos vayan a mirar feo o a insultar por ser dos muchachos. Mi hermano sabe sobre él, y se lo tomó bien, podría decirse. Fue neutro.

Mamá no lo sabe, no se bien como decírselo. Y cada vez que pienso en ello, nuevamente se me viene a la cabeza que si fuera una chica, no tendría que estar tan preocupada de si mi madre querrá matarme por estar saliendo con un hombre o no. Me apena pensar en esos temas pero últimamente mi cabeza solo se llena de mi peso y de Chan.

Y ambos temas me ponen demasiado triste.
Me siento tan celoso y envidioso de esas personas que no suben de peso por su genética, o que pueden bajar de peso rápido, lo odio tanto. Me siento tan mal.

¿Por qué no puedo ser ellos? ¿Por qué?

[...]

Sentía mi cuerpo exhausto en cuánto acabo la clase de gimnasia y eso me hizo sentir como un maldito gordo, que no puede ni moverse por toda la grasa.

Me apresure a ir a las duchas para cambiarme antes de que esten todos y me vean. No quise mirarme, y solo me duche lo más rápido que pude.

—Hey, hey, Yang. - llamó uno de mis conpañeros. - ¿Sigues viéndote con Hwang?- asentí.

—¿Por qué?- pregunté.

—Porque necesito dos personas más para un partido el sábado, estaba pensando en ti y en Hwang. ¿Crees que puedan?-

—Ehh, yo si puedo pero debo preguntarle a hyung.- probablemente me quiere porque estoy gordo y me pondrá en la portería. 

—Bienn. Esta vez tendrás que ser delantero.- dijo.- Y podrías sacar algo de músculo, pareces palito.-dijo tocando mi brazo.

De que hablas.

—Se te ve débil, antes estabas más fornido. - dijo él con un puchero. - ¿Estas comiendo bien?

—Si, claro que sí.- dije.-Pero antes estaba muy gordo... Bueno aún lo estoy.-

Frunció el ceño y me dió unas palmadas.

—Bien, me confirmas por mensaje, nos vemos. -dijo. Asentí y me fui a dejar mis cosas al casillero. Chan pasó, con varios papeles en la mano, traía una cara de orto terrible, note más colorada su mejilla pero aún así me sonrió y guiñó su ojo.

Alcé las cejas y el señaló con sus ojos la sala de tutorías. Esperé al receso y fui a la sala con una libreta y un lápiz.

—Hola Yang.- dijo. Iba a responder y vi al maestro de Literatura en la otra mesa con una alumna llorando viendo sus calificaciones. Ouch. Me senté y le sonreí un poco. Escribí en mi libreta.

¿Qué te pasó en la cara?

El suspiró y escribió.

Mi mamá se enteró que dejé a mi ex antes de entrar a las pasantías y no le gusto mucho que la razón fuera que me gusta un hombre así que vino a darme los buenos días
No te preocupes todo bien

Fruncí el ceño y tache su no te preocupes.

me preocupo. tienes la mejilla hinchada, además, imagina ella se entera de que soy yo

Chan hizo una mueca y asintió.

lo sé, pero no te preocupes, nadie sospecha nada, ni lo sospecharian.

Borró las letras y trazó muchas lineas muy marcadas antes de botar la hoja hecha picadillo a la basura.
Esta vez llevamos la lección como corresponde, sin ninguna caricia ni siquiera disimulada de por medio.

Estás ocupado por la tarde?

Escribió y me guiño un ojo. Negué y el sonrió.

¿Podemos vernos en tu casa?

Asentí y levanté cuatro dedos. Él asintió y borró sus frases antes de seguir explicandome los contenidos que tenía mi hoja de ejercicios. 
Lo miré, admirando su cara preciosa, la forma de sus ojos, sus pestañas y esa sonrisa que me da en cuánto se da cuenta que no estoy entendiendo pero digo que si lo hago. Apretó sus labios y rió un poco, explicando todo otra vez y de distintas formas hasta que por fin comprendía sus palabras.

Sonreí y me apoyé en su hombro cansado.

El timbre sonó y ya tenía todos mis ejercicios resueltos y comprendidos. Me despedí de Chris con la mano, viendo aún al maestro de literatura ahí.
Bueno, de igual forma no corresponde estarnos besuqueando en la escuela ni nada por el estilo. Pero no niego que le da un tipo de adrenalina distinta y maravillosa. Aún así, de cualquier manera prefiero cuándo estamos en su casa abrazados, es mucho más cómodo.

Logré sobrevivir al día, no se como en verdad. Me pesaba el cuerpo, pero la idea de que iría a casa y estaría con Christopher me hacia ponerme feliz.

Me hace muy feliz.

Ni siquiera pensé en comer, en tener hambre. Me tomé mi botella de agua y me fui feliz a casa. Chan y yo debíamos irnos separados, por obvias razones, pero me iba hablando por mensaje de texto.

En verdad, me hace muy feliz.

《♡》

Hola perdon pongo horarios y no los cumplo KFKFKF

u u

Ya saben si esta historia les trae pensamientos feitos, absténgase y piense en su salud mental<333 cualquier cosa mi buzón esta abierto, mi dm de insta, mi wsp <33

weight diary - chaninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora