Perfecto Engaño [TERMINADA]

CAPITULO 16

"nos vamos"

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Liz...

— no puedo creer que nos hayan sacado — reclama mi madre por undécima vez caminando de aquí para allá al frente de la puerta, desesperándome un poco mas, la comprendo ya tenemos una hora esperando que mi padre y mía salgan de esa oficina, pero no se escucha nada y se que haciendo lo que ella hace, no hará que las horas sean menos cortas, no negare que me genera miedo lo que esos dos se estén diciendo, pero mas miedo me da la calma y silencio que se percibe. 

Creía que en los primero minutos en realidad a los segundos de abandonar esa habitación sentirá como Mía partiría todo lo que encontrara a su paso, para notificar su descontento con la idea de que nos cambiaran todos los planes, pero no, fue todo lo contrario y que a sido tanta la paz que se ha sentido que hasta miedo tengo de lo que este pasando detrás de esa puerta.

Se que mía no es de las personas a las cuales le pueden dar una orden y que ella se atenga a ella, siempre a sido de hacer lo que ella cree correcto aun a pesar de que para otros no lo sea, cuando me confesó que le corto la cara a Sonia no me sorprendió, ya que ella fue un bache en sus planes, ella no estaba incluida y eso hizo que mía comenzará a improvisar, para que todo saliera como ella quería y en esa  improvisación no le convino a Sonia, estar involucrada en lo mínimo.

Se que esto la enojo, principalmente porque ya sabíamos todo de la cuidad a la que íbamos, sabíamos donde estaba la diversión, las bibliotecas y no negare que también las cosas malas como las carreras ilegal o las peleas, que nos fuéramos no significaba que íbamos a dejar esas partes de nosotras, yo quería iniciar una nueva vida donde esas actividades, no estuviera involucrado pero se que si sigo a mía, ese mundo siempre estará, principalmente porque eso hace parte de ella.

"Pueden quitarle a una persona muchas cosas, como lo son el nombre, las raíces o hasta su origen, pero jamás su esencia y la de mía es ser rebelde".

Por eso no me sorprendió cuando se negó a acatar las normas de su padre, llegó el y cambio todo, ya que no tenemos conocimiento de nada de la cuidad a la cual nos enviaran y creo que si fue idea de mi madre será todo lo contrario a lo que mía tenía planeado.

—¿tu no vas a decir nada? — me volteo a mirarla y me doy cuenta que seguía hablando, estaba tan perdida en mis pensamientos que no le había prestado atención, bueno eso siempre es asi, Carla habla y es como si mi celebro creará una distracción y simplemente nunca la escucho, ella me alza una ceja, yo simplemente me encojo de brazos y ella vota humos como un Toro — cuando será el día, ¿Qué mires más allá de lo que tienes al frente?, por eso siempre serás el perro faldero de mía.

Sus palabras me importara si ella fuera importante, no negare que si hacen un pequeño rasguño en mi pecho, porque sea lo que sea ella me dio la vida y se que, aunque quiero aparentar fuerza y demostrarle que en realidad soy todo lo contrario a lo que cree, simplemente no doy, siempre que me dice este tipo de cosa y yo solo prefiero guardar silencio.

Porqué aunque ella lo haga con toda las intenciones de herirme, yo no puedo, nunca se me olvidara que ella me tuvo en su vientre y por no olvidar eso, no le puedo decir lo que todos sabemos pero yo soy la única que lo calla, la veo a los ojos y me pregunto ¿Cómo es que dos seres tan diferente pueden ser parientes?.

Mi madre es la típica mujer estereotipo de mujer rica, que se cree superior por tener un hombre a su lado, mas si tiene poder, yo soy todo lo contrario veo a los hombres como un mecanismo para sentirme querida, pero no son esenciales, solo me gusta que me brinde seguridad para después pasar de ellos.

Soy la típica chica que todos creen tímida por que no habla mucho a la cual creen cobarde, porqué cuando la acosan, insultan o sobre bajan, prefiere guardar silencio y hacer como si nada.