Lo observó a la expectativa de su próximo movimiento, es claro que ya me descubrió y no tengo, ni el tiempo y mucho menos las ganas de explicar algo que es obvio, así que solo me lo quedo observando.
Él me mira con diversión y cansancio, ya que sabe que si no habla en los próximos 5 segundos lo más probable es que me importe una mierda su presencia y me vaya de mi habitación.
Alza una ceja mientras yo crucé mis brazos, no le pienso dar explicaciones, ni hacia dónde voy, ni porque me voy a estas horas, por la simple razón que a él no le importa y él ya lo sabe.
Su expresión de diversión cambia cuando repara mi vestimenta y las llaves que tengo en la mano, muy pocas personas saben que poseo réplica de todas las llaves de la casa en una sola.
Ya que soy del pensamiento, que cuando me cierran una puerta, busco la manera de entrar, ya sea a las buenas o malas, ya que si esta cerrada la parto a patadas, pero entro porque entro.
Él opta por poner mi actitud, una sin expresión y con los brazos cruzados, en realidad a mí no genera miedo, porque soy peor que él, pero no puedo negar que me intimida, ya entiendo por qué las personas hacen lo que a él se le place.
— ¿Me vas a responder la puta pregunta, o seguirás como estúpida?— sus palabras no me ofenden o me generan rabia, sé la clase de persona que es él, compartimos los mismos hábitos y la misma sangre, así que se podría decir que calem es mi versión masculina.
No le quiero responder porque él sabe la respuesta, realizamos lo mismo, pero la diferencia es que a él no lo encierran, o se lo prohíben ¿por qué?, él es "independiente".
Su mirada directa a mis ojos, hace que creemos una guerra inexistente, pero que se siente presente, siempre hemos sido muy competitivos y ahora, el que baje la mirada se denominará como perder, y esa palabra no existe en mi diccionario, así que se la sostengo, todo eso hasta que a mi celular llega una nueva notificación.
¿QUIEN MIERDA ENTRÓ?
L.
Bajo la mirada a ver el mensaje y no porque perdiera la pequeña guerra, solo es que ya era muy tarde y si no me iba en este momento lo más seguro es que no llegué a tiempo a mi lugar destinado.
Decidida, me encamino hacia la puerta que se encuentra abierta, trato de pasar por el chico de 1,80 que esta al frente de mí, pero como suponía cuando lo hago, él forma un agarre en mi brazo, no es fuerte al punto de romperlo, sin embargo si es precisó.
Esa acción hace que ruede los ojos. <<Dios por qué hoy, todo el mundo se destinó a joderme los ovarios >>
— he preguntado a donde mierda vas — volvió a decir con voz calmada pero autoritaria, y aunque su apariencia de a mostrar que es mejor llevar la fiesta en paz con él, a mí me importa un reverendo rábano tanto su pregunta como su muy claro ya cambió de humor.
Sé que con mi respuesta le tocaré las pelotas, pero no sería mía Smith si no lo hiciera. — no tengo tiempo para tus estupideces calem, porque preguntas algo que sabes, imbécil.
Y como me suponía la respuesta no fue de su agrado, ya que el agarre se vuelve más determinado y decidido, el verde claro de su mirada se transforma en un verdoso oscuro, calem es como yo, por algo es mi hermano mayor, sabemos que tenemos límites para todo, y sé que, cuando alguien se atreve a pasar esa raya tendemos a ser más calculadores y decididos.
Pero eso es una ventaja en mi caso, somos tan parecidos que pensamos casi igual, siendo yo más precavida que él, tenía claro cuál sería su próximo movimiento, así que antes de que lo hiciera me suelto de su agarre de manera rápida, corro hacia la puerta y la cierro sin importarme el ruido que esta provoca.
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Perfecto Engaño [TERMINADA]
Ficțiune adolescențiElla, una chica presa de su pasado, en el cual la vida le enseño que los débiles siempre serán los primeros en sufrir. Eso la convirtió en el ser más despreciable que ha descendido en la tierra, una chica que se considere un monstruo no puede sentir...