CAPITULO 2
"la vida es un puto carma"
La vida te pone retos, unos más difíciles que otros, pero que a la final todos te enfrentan a algo inevitable, pues a mí me está poniendo el reto de tener la habilidad de tener paciencia, no obstante, aunque quisiera hacer creer a el imbécil que tengo al frente, que me domina y me tiene en "sus manos", en el fondo sé que nunca podre, ya que no soy la que se deja dominar, yo, domino.
Apartó de un empujón al chico cuyos labios se encuentran más rojos e hinchados de lo que lo tenía antes, lo que es una clara señal de que el beso fue muy apasionado; me observa con una combinación extraña asombro, duda; es obvio que no se esperaba ese movimiento, pero yo solo sonrió con superioridad, lo que hace que el frunza el ceño.
Lo he aprendido a conocer tanto que se, que quiere preguntarme ¿por qué lo aparte?, pero de su boca no sale nada, al pasar unos minutos al parecer coge un poco de valentía pero su celular suena en ese momento, nose que pasa y la verdad no me importa, sin apartar la mirada de mis ojos el saca su movil de la parte trasera de su pantalón, nuestro duelo invisible termina cuando el baja la mirada para ver que dice el mensaje, sus ojos se abren un poco pero le da poco interés, me da la espalda para poder contestar el mensaje, lo único que alcanzo a ver es un...
Ya llegué...
E.
Una sonrisa maliciosa se forma en mis labios, porque se me acaba de ocurrir una travesura, sin que él se dé cuenta sacó mi celular y le mando un mensaje a la que me ayudara en lo que se me acaba de ocurrir, espero que ella me conteste y cuando veo su afirmación, objeto que era una pésima idea, pero que aun así, lo haría; escondo mi celular antes de que se volteara y lo pudiera ver; con la ayuda de ella, estoy segura que aquí voy a matar a dos pájaros de un tiro, él se voltea hacia mí y yo lo miro con confusión actuando de que no me he dado cuenta de nada, me dedica una sonrisa de medio lado antes de intentar irse.
— Me tengo que ir — Es lo único que dice con una pizca de fastidio y desgano, yo solo lo observo, pero en mi plan no está que él se vaya así de mi casa, así que tengo dos opciones.
Opción 1, lo dejo ir, me olvido de mi plan y me quedo con estas ganas de hacer algo en su contra.
Opción 2, no lo dejo ir, cumplo mi plan y después me rio en su cara.
Aunque me cueste admitirlo de todas las opciones la que más me llama la atención es la dos, en realidad no me cuesta admitirlo ya que me encanta ver el mundo arder y más si soy yo quien lo provoca, pero la pregunta es ¿Qué estoy dispuesta a hacer con tal de cumplir ese plan, algo inusual?
<< lo que sea >>
El me mira en espera de una respuesta y cuando no la obtiene intenta pasar por mi lado para dirigirse a la puerta, ya que yo me encuentro en el medio, si quiero que mi idea brillante se cumpla me tocaba hacer algo que nunca creí haría nuevamente, esto para mi va hacer lo peor que me podría haber pasado, respiro profundo y antes de que el abandone mi habitación, hablo...
— ¿Enserio te vas?, yo creí que nos divertiríamos — Todavía le doy la espalda a su persona y puedo asegurar que esas palabras me generaron asco, me tocara lavarme la boca con desinfectante, siento como el para en seco dejando un silencio por la escasez de ruido, no le doy la cara porque sé que se enojara y también que una leve sospecha se incrustara en él, considero que se ha dado cuenta que soy frentera con mis acciones.
Aun encontra de mi voluntad me volteo y veo como mira cada parte de mi cuerpo con lascivia, deseo y mucha lujuria, sin ninguna vergüenza, sus ojos hacen que me ericé ya que la manera en la que me ve, es poco inusual o al menos la parte que creí conocer de él, espera de mi siguiente movimiento, así que le doy inicio a mi plan.
ESTÁS LEYENDO
Perfecto Engaño [TERMINADA]
Teen FictionElla, una chica presa de su pasado, en el cual la vida le enseño que los débiles siempre serán los primeros en sufrir. Eso la convirtió en el ser más despreciable que ha descendido en la tierra, una chica que se considere un monstruo no puede sentir...