XVI- ¿Fiesta de pijamas o de besos?

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Grey

Nuevo día, nueva actitud, estaba demasiado emocionada, desperté de muy buen humor, aunque el clima era nublado no se interponía en mi cambio de humor, me metí a bañar, puse música a todo volumen, mi mamá no se encontraba en casa —como ya era costumbre— antes de irse me pidió que me comportara, supongo que su cabeza piensa que como ya tengo diecinueve mis hormonas están alborotadas, pero en lo absoluto, si, tengo diecinueve pero con las hormonas tranquilas, no tengo deseo —por ahora sobre nadie, aparte nuestra noche iba a ser tranquila.

Sé que es controversial, porque en mi lista puse "No morir virgen", y estoy diciendo que a mi edad no pienso en eso, pero es que es así, definitivamente nadie quiere morir sin vivir todo tipo de placer o algo por el estilo, no lo pido ahora y en el momento que pase, pero tampoco voy a negar que no quiero, porque si quiero, pero no quiero ya ¿me explico?, a lo mejor no me doy a entender pero puff, soy pésima para expresar todo concreto, la verdad no me quejo si pasa con Aidan, ok no, controla tus hormonas, eres decente ___ Grey Bernard.

Terminé de hacer mis cosas y bajé a calentarme el desayuno, en lo que estaba comiendo me llegó una notificación de un mensaje de mi hermano. Era raro que él me mandara mensaje, si lo hacía era porque tenía malas noticias o quería presionarme en algo, votaba más a la segunda opción.

Abrí el mensaje y sólo me puso, prepara mi cuarto para hoy, solté una risa burlona, sentía que era su sirvienta ¿o qué? idiota, obviamente no iba a arreglar nada, no era mi deber, podrá ser muy mi hermano, pero no le caía bien y siendo sinceros, él a mi tampoco, total el mensaje lo ignoré y me dediqué a terminar mi desayuno y salir, mi examen era hoy y por nada del mundo podía perderlo, de ese examen dependía mi año de universidad.

Me subí a mi carro, y me dirigí a la escuela, tan apurada salí que no me traje la mochila de mi ropa para mi noche con Aidan, la había olvidado —grito de pánico ya no tenía tiempo para regresar por ella, estaba ya a dos calles de la universidad, tendría que ir saliendo de la escuela, pero lo más seguro es que Christopher ya esté en la casa, y no quería verlo.

Pasé las dos calles faltantes, entré al estacionamiento del instituto, parqueé el carro y me bajé, la escuela estaba casi vacía, no había mucho movimiento como entre semana, y era obvio, muchos ya estaban en exámenes, ahora que lo pienso, Aidan no presentaría el examen, y de ese papel nuestra vida dependía. No siempre podía preocuparme por él, pero es que de verdad ya me era imposible.

Entré al pasillo de los casilleros, abrí el mío, acomodé mis cosas, volví a cerrarlo y avancé a mi salón.

—¿Tan temprano, Grey? —habló Kiara detrás mío.

—Soy madrugadora. —me esperé para que me alcanzara y pudiéramos entrar juntas.

—¿Supiste qué Aidan tuvo un accidente? Trae el pie enyesado.

—Oh que mal por él. —me agaché y esbocé una sonrisa.

—¿Estudiaste? JA, no sé para que te pregunto si es obvio que si —rodó los ojos.

—Haces preguntas demasiado obvias.

☺︎︎

Aidan

Me levanté temprano como si fuera a ir a la escuela, y es que si iría, el plan era que no asistiría al instituto, pero mi mamá recibió una llamada ayer diciendo que no podía faltar porque era día de examen, y la verdad no me acordaba de eso, entonces si o si tenía que ir a la escuela. Iría solamente a presentar el examen, ya que me habían dando permiso de faltar a las demás clases, tenía incapacidad por la enyesada, nueva técnica para faltar a clases sin represalias, pero dolorosa.

Two Ways © [✔︎completa✔︎]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora