Capítulo 14: Feliz cumpleaños, te amo

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Josephine se encontraba devorando una Nutella extragrande, con aceitunas y pan de ajo mientras disfrutaba de la comodidad que le brindaba su cama y el estéreo con canciones de Disney de fondo. Últimamente se le antojaba hacer o comer las cosas más asquerosas y extrañas que probablemente en otro estado físico no las haría ni aunque el dinero le cayera del cielo. Pero le gustaba, le gustaba la sensación de estar acompañada constantemente, a pesar de que el bebé aún era demasiado pequeño ella lo podía sentir. Sabía que estaba a todas horas con ella, y ese sentimiento le generaba demasiada paz y tranquilidad. Observaba una revista que contenía miles de artículos de maternidad y para bebés de todas las edades, ver ropita en miniatura se había convertido en su hábito diario. Le encantaba imaginarse todas las prendas de recién nacido en su bebé, eso sí, le costaba asimilar que ya no era la mujer de hace un par de meses atrás, aquella que compraba tacones y bolsos, que modelaba las mejores ropas y salía de fiesta. Su nueva realidad era una diferente, y es que su hijo le recordaba que la vida era tan loca como generosa, era sanadora cuando debía serlo y había decidido serlo con ella. Estaba tan absorta en su mundo que no oyó el móvil sino hasta que había cesado. Era su madre, por lo que decidió no devolverle la llamada. El estar embarazada le traía con más frecuencia el pasado que intentaba ocultar. Tanto dolor, tantos golpes, tantas humillaciones. Era un torbellino de emociones, pero hasta entonces no había tenido tiempo para llorarle a nada, ni lo quería.

— Mi niña, hay un tal Montpelier en la puerta. Dice que quiere verte. —su nana apareció de la nada, y ella intentó fingir serenidad poniéndose de pie.

— ¿El de cabello largo o el rubio? —elevó una ceja con interés, todo podía pasar.

— Es rubio cariño, estoy segura. —la mujer mayor rio y salió del cuarto. Jo buscó una salida para correr lejos sin que Jeremy la viera, pero de inmediato se retractó de querer huir, así que salió de su cuarto sin tener otra opción. Bajó la escalera y entonces lo vio sentado de espaldas en el sofá. Por un momento se quedó apreciándolo en silencio. Le costaba procesar su embarazo, pero también el hecho de que el hombre con el cual tenía sexo sin otras intenciones de por medio, sería el padre del hijo que estaba esperando. Fue entonces que miró su aspecto y lo desaprobó, pensó que quizás le daría una mala impresión por las fachas que traía, el pijama de ositos no aportaba madurez de su parte.

 Pero ya era tarde para subir de nuevo, él se había girado encontrándosela en las escaleras.

— Jeremy. —carraspeó bajando el último escalón. Él le dedicó una sonrisa fugaz.

— Buenos días, Jo. Lamento molestar, pero vine porque quería saber cómo estabas y si necesitabas alguna cosa. —él se relamió los labios, estaba claro que esa mujer lo ponía nervioso.

— Oh... Bueno, pudiste haberme llamado, es decir... —intentó simplificar su encuentro, la realidad era que no podía verlo sin temblar. Tal vez por el temor en su mete o porque andaba antojada de todo él, verlo en ese traje gris un tanto ajustado la hacía apretar las piernas.

— Sí lo sé, es que pasaba por aquí cerca y quise verte. —ella frunció el ceño cuando el rubio buscó algo detrás suyo. Escondía una enorme bolsa con un moño, la cual se la entregó dudoso. No estaba seguro de si le gustaría—. Es para el bebé. No soy bueno con estas cosas, pero intento ya sabes, acostumbrarme al panorama.

— Gracias, no debiste molestarte. —respondió con calma tomando con sus manos la bolsa, y su curiosidad pudo más. La abrió y sacando algunos de papeles encontró una variedad de cosas dentro. Había un pequeño mameluco con dibujitos de barcos de papel y otro simple de color blanco con franjas rojas. Una manta de color verde menta con lunares blancos, chupones y biberones de todos los tamaños, colores y formas, y unas zapatillas. Unas hermosas y pequeñitas zapatillas converse en miniatura. La castaña no pudo más que sonreír, estaba que moría de la ternura—. Jeremy... Están hermosos, gracias.

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