3.- Pequeñas sorpresas

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– ¡Mida, mami Eoir! –

El elfo se horrorizó al ver que su pequeño le enseñaba un bicho de escabrosa constitución que tenía en la mano. Harry estaba todo lleno de barro y jugaba junto al árbol donde habían decidido descansar ese día.

– ¡Suelta eso, pequeño! – Exclamó, corriendo junto al niño para hacerle tirar el bicho – ¡Ah, maldición! – Juró cuando sintió que el insecto le enterraba sus tenazas.

– Eres un idiota – Rio su hermano – Ese bicho es muy temperamental. Casi como un Balrog –

"–" /Pero a Ezellahen no le hizo nada/ Masculló mientras se chupaba el dedo herido, mirando con rencor al insecto que se iba a paso orgulloso hasta el árbol.

– ¿Mami, nana dedo? – Preguntó Harry, acercándose a Elrohir.

– Si, bebé. El bicho me ha hecho nana – Frunció el ceño – Y soy tu papi –

– No, Eoir mami – Sonrió.

– No, yo soy tu papi –

– No, mami – Harry mostró una sonrisa deslumbrante, agarró el dedo de Elrohir y comenzó a acariciarlo – Haddy sana tu nana. ¡Malo bicho! – Masculló, frunciendo el ceño.

– Gracias, cielo – Sonrió a pesar de todo.

– Oh... mami – Arrulló su hermano.

Recibió una mirada helada por su burla.

– Esto es culpa tuya – Dijo con voz helada.

Desde hace dos semanas que Elladan había tenido la maravillosa idea de enseñarle eso a Ezellahen. Para el niño, Elrohir era su mami y Elladan su papi. Algo que no había podido sacar de la cabeza del pequeño, ya que a Harry le había fascinado tener a quien llamar mami y papi. Y el gemelo "mamá" lo dejaba, no podía resistirse a esos ojos verdes que lo miraban con adoración y, tenía que admitir, que muy a pesar de que sonara humillante, le encantaba oír como su niño lo llamaba mami.

– Oh, vamos, te conozco mami Eoir, sé que te derrites cada vez que te llama así. Yo mismo lo hago – Sonrió mirando el rostro confundido de Harry – ¿Marchamos de nuevo, pequeño? –

– ¡Ti, papi Dan, cahallo! – Chilló, arrojándose a los brazos de su papi.

"–" /¡Sí, a caballo!/

Elrohir gruñó imperceptiblemente y comenzó a recoger las cosas. Les faltaba visitar tan solo una aldea más. No se engañaban al creer que ahí si iban a encontrar a los padres de Harry. Era evidente que algo raro había con su llegada a la Tierra Media. Sin embargo, ellos acordaron hablar de eso hasta que se agotaran sus últimas esperanzas de encontrar a los familiares del niño entre los hombres.

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~ Rivendel ~

Lord Elrond pestañeó mirando la sonrisa afectada de su hijo adoptivo Esthel (actual Rey de Gondor) y la soñadora de Legolas (Príncipe del Bosque Negro). Creía haber escuchado mal... cosa que era muy poco probable. ¡Pero, por los Altos Elfos! ¡Aquello debía ser una broma!

"–" /¿Perdón...?/

"–" /Lo que ha oído Lord Elrond. Legolas y yo vamos a casarnos/ Carraspeó Aragorn / Y debe ser cuanto antes porque... vamos a tener un bebé dentro de unos meses/

EzellahenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora