Es Hora

421 19 0
                                    

 –"Déjame ser tu fuerza, tu voz y tu luz, y prometo que no te defraudare" dijo un día como este hace tiempo.– susurró con la mirada perdida, sin mirar a su acompañante. –Yo aún sigo esperando que vuelva, aún sigo esperando mate al dragón que custodiaba mi castillo y me salve, pero no fue así ¿Sabes por qué princesa?– dijo girándose a mirarla con decisión –Porque ese fue un sapo disfrazado de príncipe, pues el príncipe azul ya ni siquiera existe en los cuentos de hadas. Es hora de quitarse la corona, ponerse la armadura y matar al dragón. No sólo somos princesas, también somos guerreras y llegó la hora de demostrarlo.– terminó, secándose una lagrima traicionera que cayó por su mejilla.

EscritosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora