Amor Digital. Next Order.

Capítulo 01

Este nuevo cuerpo desarrollo nuevos instintos, además de mejorar mucho mis sentidos.

Podía escuchar más lejos, mi visión... no sé qué decir, ahora puedo enfocar el majestuoso trasero de mi esposa, no me puedo quejar, el olfato pues... se me es difícil ubicar los olores, pero al menos los puedo reconocer, tendré que decirle a Rena que me enseña a usar mejor mis sentidos, ya que para ella es algo sumamente fácil.

Siguiendo con lo que decía, el tener los sentidos más alertas, puede ser algo bueno y algo malo, lo malo es que la sensación de ser observado es mucho más presente he inquietante, y en estos momentos, estoy siendo observado por todas las mujeres presentes en esta casa, mientras llamaba a mi seguramente muy angustiada Madre para decirle que el fruto de su desvelo está bien.

Actualmente estoy sentado en uno de los banquillos de la cocina siendo acosado mientras marco en mi teléfono.

—Chicas no desapareceré si dejan de verme un segundo, son conscientes de eso ¿no?

—Lo siento Papá pero Katrina y yo preferimos prevenir que lamentar.

—Si ya me di cuenta.

Tengo a mi hija mayor a mi izquierda sujetándome fuerte del brazo, mientras que la menor me abraza como un koala el pecho, me da ternura porque sus bracitos no alcanzan a abrazarme del todo, por lo que se aferra a mi ropa con fuerza. Y como no era de extrañar bajo estas circunstancias, mi tal vez muy consentida y malcriada hermana está a mi derecha casi aplicándole un torniquete a mi brazo, lo más curioso es que aun usando su peso para sujetarse, no me impide para nada usar mi brazo sin ninguna restricción.

Lady y mi esposa están frente a nosotros preparando al comida, pero puedo notar como giran paran verme ocasionalmente.

Cuando la llamada al fin cayó, solo respire profundo para el drama que sé que venía.

— ¿Hola?

—Hola Mamá.

—A-Arthur. ¿Eres tú hijo?

—Sí, ya regrese Mamá.

— ¿¡P-Pero qué paso, a dónde estabas, no sabes lo angustiada que me tenías!?

— ¡Lo sé, lo sé!

— ¿¡Dónde estás ahora!?

—En cas_

— ¡Llego en cinco minutos!

Ni me dejo responder antes de colgarme. Dicho y hecho, a los cinco minutos llego casi tumbando la puerta de la casa.

— ¡Ya voy, ya voy!

En cuanto abrí esa puerta, fue verla a ella y a mi viejo y al verme a la cara, el asombro en las suyas fue más que obvio.

— ¿De verdad eres Arthur?

—Si Papá soy yo... Pasaron muchas cosas, se las explicare enseguida, pasen.

Mi Madre lo primero que hizo fue darme un fuerte abrazo, uno que sinceramente a mí también me hacía falta.

—Estaba tan preocupada Hijo...

—Lo sé, créeme que lo sé... lo siento, pero de quedarme aquí solo fuera sido peor para ti.

— ¿Qué fue lo que te paso? mírate, estas tan cambiado, parecieras que recién sales de un concierto de Ramstein....

Solo ella podría decir algo así.

—Es algo que aun no entiendo del todo, pero les explicare lo mejor que pueda todo lo que paso.

Los logre llevar hasta la sala, Rena ya estaba allí, junto a las niñas y a Lucia, Lady sitio atendiéndole a la comida.

— ¿Qué fue lo que paso? —Pregunto directamente mi Madre al ponerse cómoda en el sofá.