Había pasado una semana en la que habíamos regresado de Atlanta. Calum se las había ideado con Kyla en mi ausencia y desde que puse en pie en LA ya tenia mi maleta hecha para irme a vivir con él, este alegaba que era por mi seguridad mientras Kyla decía que necesitaba descansar de mi mientras yo sabía que lo hacía por mi bien y porque también quería espacio con Roy al cual yo había corrido de la casa de Calum y así quedábamos todos felices.
En fin, ya estaba instalada en la casa de Calum disfrutando mis interminables días de reposo de la compañía de Duke mi fiel compañero y de toda la banda los cuales me venían a visitar cada vez que podían aunque ninguno sabía sobre mi estado aún debido a que estábamos aguardando un momento propicio para contarles a todos incluyendo a Kyla que no se guardaría para nada un secreto así.
Por otra parte a penas llegamos Calum concertó la cita con el doctor que nos recomendaron y este coincidió que mi embarazo era un poco riesgoso en estas primeras semanas debido a la implantación de la placenta que producto a los golpes que padecí había un gran porcentaje de que esta aún no estuviera correctamente implantada por lo que el reposo era de vital importancia y Calum se lo estaba tomando tan a pecho que prácticamente no me dejaba mover ni un dedo.
Pero eso era cuando estaba presente porque en los momentos en los que tenía que ir al studio yo con extremo cuidado hacia pequeños arreglos en la casa así como ayudar a Andy en las ediciones de las fotografías que tomaba en el studio y este me enviaba.
- Tranquilo Duke que para ti también hay - dije calmando a la pequeña bola de pelos que se pegaba entre mis piernas mientras yo me apresuraba a hacer la cena de bienvenida de los padres y hermana de Calum que estaban llegando. Era cierto que este quería invitarlos a cenar a un restaurante pero yo creía más apropiado que al menos hoy cenaran en la comodidad de la casa y también esto me ayudaba a mi a mantener a raya los nervios que me atormentaban debido a que en solo minutos iba a conocer a la familia de Calum.
Terminé de colocar la tarta de fresa que había acabado de hornar en la nevera y repasé un poco la ropa que llevaba, era algo tan básico como un vestido lila muy sencillo pero que me permitía estar cómoda y presentable a la vez. Fui a la habitación por mi ordenador y tendida en la cama no se como ni cuando pero me dormí.
- Nena, despierta, Snow- me llamó Calum con voz suave mientras me acariciaba el rostro.
- Cal, ya llegaron, están aquí!!! - dije asustada ya que me había quedado dormida esperándolos y no sabía por cuanto tiempo había sido.
- Ya llegamos y si, están deseosos por conocerte- dijo sonriendo mientras yo trataba de verme en el espejo y arreglar el desastre que ahora existía en mi cabello.
- Estás seguro de esto? - pregunté temerosa porque realmente me costaba de siempre socializar y conocer personas nuevas y más aún cuando esas personas son los padres y hermana de tu novio.
- Tan seguro como que te van a amar tanto como yo - dijo tocando la punta de mi nariz - Anda vamos- repuso tomando mi mano y dirigiéndonos juntos hasta la sala de estar.
Llegamos a la puerta y como si ya los conociera de toda una vida debido a las continuas pláticas de Calum sobre ellos pude sencillamente identificarlos. Joy, morena como Calum, con cabello oscuro y una sonrisa jovial y muy parecida a la de su hijo, David, de cabello canoso y de aspecto dulce y Mali muy muy guapa, alta y con el cabello perfectamente rubio, era realmente la copia femenina de su hermano.
- Mamá, papá,Mali, les presento a Snow, mi novia - dijo Calum apretando mi mano mientras me acercaba más a su familia los cuales rápidamente desviaron si atención hacia mi sonriendo amablemente.
- Hola - dije tímidamente provocando aún más sus sonrisas.
- Oh Dios, eres más linda de lo que Calum nos contó - dijo Joy acercándose a mi y sin más estrechándome en un fuerte abrazo el cual disfruté mucho - a propósito, soy Joy - repuso besando tu mejilla.
- Bienvenida a la familia Hood - dijo David dándome un cordial saludo.
- Por favor déjenme que me presente - dijo Mali colocándose frente a mi - Soy Mali y no sabes las ganas que tenía de tener una hermana- dijo sonriendo y mirando de reojo a Calum quien la miró con reprobación.
- Mali, cuidado con Snow que aún está convaleciente de su accidente - dijo Calum preocupado.
- Un abrazo no le viene mal a nadie - repuso esta mientras todos reíamos.
- Mamá, papá, había pensado en salir a cenar solo denme un tiempo para encontrar un restaurante- dijo Calum.
- Yo se que no se puede comparar con la comida de un chef pero ya tengo la cena hecha para ustedes - dije un poco apenada - Pero claro, si prefieren pueden...
- Claro que no hermosa, estamos muy cansados como para salir además la comida casera no tiene comparación con nada - dijo Joy muy entusiasmada.
- Por supuesto, ya sabremos como cocina mi cuñada - dijo Mali riendo mientras yo enrojecía de la vergüenza.
- También estaba pensando Calum que podrías llamar a los chicos, hay cena para todos y creo que sería bueno reunirlos, ya sabes- le dije pensando en que este sería la ocasión perfecta para comunicarle a todos nuestro pequeño secreto.
- Me parece bien - dijo Calum asintiendo.
- Es buena idea, Liz, Ann y Karen desde que supieron que vendría no dudaron en enviarle algunas cosas a los chicos - mencionó Joy mientras se sentaba a mi lado en el sofá y tomaba mis manos entre las suyas - Gracias por devolverme a mi hijo - mencionó esta en un susurro mientras tu la miraba asombrada.
- Calum ya no era el mismo desde unos años atrás, no era aquel chico alegre, divertido y extrovertido que crié, poco a poco se había convertido en una persona amargada, enfurecida con la vida que tenía que fingir delante de los demás alegría cuando yo misma sabía que esas sonrisas no llegaban a sus ojos y mucho menos a su corazón, pero míralo hoy, de solo verle cuando fue a recibirnos al aeropuerto con una sonrisa sincera y con los ojos brillando al hablarnos de tí supe que mi pequeño estaba de vuelta y todo es gracias tí, mira esta casa, ya tiene el aspecto de un hogar, mírate a ti toda linda y dedicada, créeme eres todo lo que una madre desearía para su hijo - dijo Joy con lágrimas en los ojos mientras yo también podías sentir como los tuyos también lloraban y ambas nos fundimos en un abrazo.
- Gracias por tus palabras señora Hood - dije aún entre sus brazos.
- Para ti Joy o más que eso una madre para ti - dijo mirándome y dándome a entender que esta ya sabía que era huérfana.
- Eh, ustedes, dejen ya de llorar y ayuden acá que dentro de unos minutos llega todo el clan - dijo un muy contento Calum mientras que ambas nos mirábamos y nos hechábamos a reír aún limpiando nuestras lágrimas.
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- Entonces mamá no me envió más Vegemite? - preguntó Mike por enésima vez mientras Joy negaba con la cabeza y todos reíamos con la cara de puchero que hacía el rubio.
- Snow, debo de decir que te quedó deliciosa la comida - dijo David que estaba sentado en un extremo de la mesa mientras miraba en mi dirección.
- Es cierto hermanita, te quedó muy buena - dijo Luke mientras yo sonreía avergonzada por sus elogios - Voy a tener que enviar a Sierra para aquí para que le impartas unas clases- terminó de decir este mientras se llevaba un pellizco de su novia y todos reíamos.
- Bien Calum y Snow, no era que nos habían citado aquí para contarnos algo? - preguntó Kyla alzando una ceja mientras todos hicieron silencio y nos miraron fijamente.
- Bien, gracias Kyla por ser tan directa como siempre- dijo Calum mirando a mi mejor amiga quién le sonreía con falsa ironía - Pero es cierto de que todos están aquí por una cuestión que ambos queremos tratar - mencionó Calum mirando en mi dirección y tomando mi mano - En fin, sin alargarlo mucho, fue algo que simplemente pasó, una gran sorpresa que tuvimos y como tal se la comunicaremos, chicos, chicas, mamá,papá, Mali, les informamos que Snow y yo estamos esperando un bebé.
A pesar de que estaba nerviosa y apenada por como iba a ser aceptado nuestro anuncio me pude percatar que la cara de todos era un poema, unos riendo, otros con asombro y otros como Joy y Kyla llorando.
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My Wildflower (Calum Hood)
FanfictionEran dos inmensas rocas a punto de colapsar, fuego y diesel, eran dos almas completamente perdidas y a la vez encontradas entre sí, era la flor silvestre y el jardinero que la cuidaba