37 Te amo

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Habíamos pasado hasta una nueva habitación la cual Calum se había encargado personalmente de que los tres tuviéramos todas las atenciones posibles.

- Te duele mucho cariño? - murmuró Calum mientras señalaba el área de mi abdomen donde me habían practicado la cesárea.

- Aún la anestesia está haciendo efecto pero se siente alguna que otra molestia- confesé mientras aún no podía sentir completamente mis pies.

Los mellizos por su parte los habían llevado a hacer algunos análisis aunque el pediatra nos aseguró que estaban lo bastante desarrollados y fuertes como para poder ir a casa en un par de días, cosa que me llenaba de alivio pues nunca me habían gustado los hospitales y quería disfrutar de mis bebés en el calor de nuestro hogar.

- Hola familia Hood!!!! - gritó Ashton entrando por la puerta seguido por Kyla, Kay Kay, Luke, Sierra, Roy  y un manojo de globos rosas y azules además de bolsas de regalos.

- Habla bajo que nos hecharán a todos- lo requirió Calum.

- Ya suenas a un padre gruñón- se quejó el castaño mientras los demás reíamos.

- Y donde están mis sobrinos? - preguntó Kyla mirando los cuentos vacíos.

- Ahí vienen!!!! - dije emocionada cuando dos enfermeras trajeron los pequeños bultitos rosa y azul.

- Pero esta horas de vista es solo para la familia!!! - inquirió una de ellas mirando a los chicos.

- Ellos son nuestra familia- respondió Calum a lo que la señora asintió y se retiró junto a su compañera de la habitación.

- Oh Dios, son una monada - exclamó Kyla asombrada mientras miraba de un cunero al otro.

- Quién es mayor? - preguntó Luke.

- Ella - señale a mi hija.

- Ella quién? - preguntó curioso Ashton.

En realidad no había dicho los nombres que tenía para mis bebés, había recibido muchas ideas y sugerencias pero para mi los que había escogido tenían significados especiales.

- Ella, Sydney Koa Hood- exclamé orgullosa mientras todos me miraban y Calum se estremecía a mi lado.

Era la cuidad que vio nacer al amor de mi vida, en la que la banda también nació, un lugar hermoso y sin dudas especial para 5sos además del nombre de la madre y hermana de Calum, las mujeres tan importantes para su vida.

- Que preciosa es - comentó Sierra - Es igual a ti Cal.

Este lleno de orgullo observó apacible a su primogénita mientras acariciaba su pequeño rostro con uno de sus dedos.

- Es mi princesa - murmuró Calum.

- Y él? - preguntó Kay Kay señalando a mi hombrecito dormido ahora.

- El es Angel David Hood - dije mientras Calum alzaba sus ojos hacia mi y me miraba con la aprobación de que había escogido los nombres perfectos para sua hijos, en este caso el de la ciudad donde nos encontramos por primera vez y nació nuestro amor junto al de su padre, su guía y ejemplo.

- No puedo estar más agradecido y feliz por los nombres que escogiste para nuestros bebés - murmuró Calum a mi lado mientras yo acariciaba su rostro.

- Holaaaa!!!! - se escuchó decir en la habitación y ya sabía que se trataba del bullicioso de Michael y Crystal que lo mandaba a callar.

Ambos se acercaron a los cuneros para darle la bienvenida también a sus sobrinos.

- Awwww Snow, son preciosos - dijo Crystal con ojos llenos de lágrimas.

- Y ahí está la futura novia de Matt - dijo Mike riendo mientras Calum desde el otro lado de la habitación lo fulminaba con la mirada- No lo niegues Hood, mi hijo será un rompecorazones como su padre.

- Si, y eso es lo que me preocupa - reiteró Calum mientras los demás reían.

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- No te dolerá? - preguntó Calum en un susurro cuando yo le dije que me tragera a la bebé para amamantarla.

- No lo sé, ya veremos- dije tomando al pequeño bultito rosa en mis manos mientras Calum se colocaba detrás de mi permitiendo que mi cuerpo se pegara al suyo y este me ayudaba a sostener a los bebés.

Muy despacio bajé el bra que había comprado para estas mismas situaciones y como lo más natural del mundo Sydney ya se había pegado a mi pecho y lo disfrutaba gustosamente haciendo que mis sentimientos afloraran.

- Increíble- murmuró Calum jugando con los cabellos de su hija con una mano mientras que con la otra acariciaba mi espalda.

Unos minutos después mi querida pequeñita estaba saciada de hambre mientras su hermanito se movía intranquilo buscando también ser alimentado.

- Tómala Calum - dije con un gesto hacia este que me miraba incrédulo.

- Crees que esté bien? - dijo este temeroso.

- Eres su padre, para ella no habrá nada mejor - dije pasándole a Sydney con mucho cuidado a su padre mientras este la tomaba entre sus fuertes brazos con tanto cuidado como si la pudiera quebrar con solo respirar.

- Es tan hermosa- murmuró Calum detallando el rostro de nuestra hija.

- Es igual a ti, no caben dudas de que es preciosa - dije admirando la fascinante que era verlos así de juntos.

Tomé a Angel en mis brazos y este sí que era un tragón, se alimentaba con mucha fuerza, era indiscutible que el sexo se imponía. Lo admiré con detenimiento, era menos despierto que su hermana la cual tenía los ojos muy abiertos, él era más tranquilo y sereno, sabía que ambos serían como el ying y el yang tan diferentes pero a la vez iguales.

- Lo hicimos bien mi Wildflower- murmuró Calum besando mi frente.

- Sé que lo haremos cariño - dije besando su boca suavemente mientras Sydney se movía en los brazos de Calum.

- Esta es toda una traviesa - susurró Calum.

- Es activa como su padre, es toda una niña de papi - dije riendo mientras acariciaba uno de los pequeños rizos azabaches de mi hija.

- Y él es muy tranquilo, creo que tienen la combinación perfecta.

- Ya veremos cuando crezcan - dije riendo.

- Ya lo veremos, pero lo que si estoy seguro es que siempre voy a estar ahí para ustedes, no importa que, como, ni cuando mi Wildflower, ustedes son mi gran tesoro - dijo Calum cerca de mi boca.

- Te amo Hood...

- Te amo my Wildflower...

Fin

My Wildflower (Calum Hood)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora